Encuentro fatal. TERMINADA

Capítulo 70

-Lo siento nena, me he olvidado que hoy era la ecografía.- dijo agitado Z en la sala de ecografías. Sarah tenía 20 semanas de embarazo.
-Lo bueno es que has llegado justo a tiempo- dijo ella recostada en una camilla. El doctor los miró.
-¿Están preparados para ver a su hijo nuevamente?
-Si- dijo Sarah en un ataque de euforia.
La pantalla se encendió y el hombre buscó al feto con la sonda.
Z no entendía nada, si bien había estado ya en la primer ecografía de su hijo, no logró entender casi nada y ésta ves era lo mismo.
El doctor explico que el niño estaba perfectamente bien, sus extremidades estaban formadas excelentemente, su corazón latía a un ritmo normal, en si, estaba perfecto.
Z miraba la pantalla y no podía dejar de imaginar tener a ese hijo con Alysse, podría haber sido aún más feliz.
Quería al niño, lo quería con su alma, una parte de él era de su hijo y la otra de Alysse.
Cuando se enteró de que Sarah estaba embarazada se perdió de la cuidad por dos días, estaba mal, había llorado como un crío. Se había metido drogas al cuerpo y había bebido alcohol, pero luego se dio cuenta de que eso no le serviría, las cosas ya estaban hechas. Se había resignado a seguir adelante sin el amor de su vida al lado.
Los dos salieron de la consulta.
-¿Me compras una hamburguesa? -Dijo Sarah con una voz chillona.
-Son las nueve de la mañana.- dijo mirándola.
-Tengo hambre- ella lo miró
-Esta bien, vamos por una hamburguesa.- haría todo por que ella, más bien, que su hijo este bien.

-

-Voy a buscar a Tom al aeropuerto, si quieres luego cenamos los 4, puedes invitar a Joan. -hablo Alysse por su móvil.
-Esta bien, lo llamaré y le preguntaré si quiere ir con nosotros.
-Okey, luego me llamas y me avisas.
-Okey adiós.
Alysse iba en taxi hacia el aeropuerto. Su padre había insistido en comprarle un coche pero ella no lo hallaba necesario. Disfrutaba el caminar y además era sano.
Cuando llegó al aeropuerto, pagó el taxi y se bajó. Camino por él buscando a Tom, éste tendría que haber llegado hace diez minutos. Recordó cuando fue la primera ves que llegó a ese aeropuerto, se sentía perdida, traicionada, sola y triste. Sonrió, esa Alysse había muerto hacia ya mucho tiempo.
Alguien la tomo de la cintura y la levantó, fue tal el susto que Alysse le hizo una llave a quién fuera que la había levantado y lo tiró al suelo.
-Okey, eso no es una linda bienvenida. -dijo Tom desde el suelo. Alysse tapó su boca y comenzó a reír fuertemente.- muy graciosa Alysse.- se levantó.
Los dos se abrazaron fuertemente.
-Te extrañe grandote.
-Y yo a ti pequeña.- aún no habían deshecho el abrazo.
-Tenemos muchas cosas de que hablar.
-Exacto, hay muchas cosas que debo contarte.- sonrió, deshicieron el abrazo.- acompáñame a reservar una habitación en algún hotel, dime cuál es el mejor.- dijo agarrando sus maletas.
-Oh, nada de eso, tengo un lindo departamento en donde te puedes quedar. Prefiero que gastes el dinero del hotel en comprarme comida.
-Eres una tonta- sonríeron- ¿en serio puedo quedarme en tu casa?
-Claro que si, ¿que clase de amiga sería?
-Una amiga muy mala. - los dos comenzaron a caminar hacia afuera. Pidieron un taxi y se fueron rumbo al departamento de Alysse.
Tom dejó sus maletas en la habitación de Alysse, luego se organizarían.
-¿Vamos a comer algo?- dijo Tom
-¿Un café con medialunas?
-Eso estaría genial.
-Conozco una cafetería que hace unos café muy ricos.
-¿Que estamos esperando? ¡Vamos! -hablo Tom- ¡Muévete que tengo hambre!- la cargó en su hombro, Alysse reía muy fuerte. Bajo por el ascensor con ella aún en su hombro, los vecinos los miraban con confusión y ternura.
Camino hasta la calle con ella aún en su hombro.
-No sabes donde es, bájame- dijo divertida.
-Claro que se donde es- camino con un rumbo definido.
-Por ahí no- dijo Alysse, Tom cambió el rumbo.- ¿no piensas bajarme?
-No, estoy cómodo así.
-Se me bajará la sangre a la cabeza y me desmayaré.- dijo cruzando sus brazos.
-Está bien- Tom rodó los ojos y la bajó de su hombro. Alysse lo vio, estaba despeinada.- que fea eres, sacudió un poco su cabello. -¡Hey! ¡Respetame!
-Sólo porque me puedes golpear muy fuerte.- Alysse rió, se colocó a su lado y caminaron juntos hacia la cafetería.
Cuando llegaron ambos se sentaron en una mesa libre fuera de la cafetería, el día estaba nublado pero aún no llovía.
-Se casa Fran
-Si, nos ha invitado a todos, está muy feliz.
-Puedo imaginarlo. ¿Irás?
-Claro que si, somos todos una gran familia desde que nos conocemos. ¿Tu irás?- Alysse bebió café y titubeo.
-Si iré.
-¿En serio?
-En serio. - sonrió. 
-¡Wow! ¡Que gran noticia! Sabía que podías con esto pequeña, ¡lo sabía!
-Eres un exagerado.- rodó los ojos.
-¿Cuando te vas?
-No lo sé, estaba pensado en irme junto contigo cuando te vayas.
-Oh que genial- dijo visiblemente alegre- nos iremos juntos, será un viaje inolvidable.
-Por dios. -dijo Alysse bebiendo su café.
Los dos pasaron una tarde muy divertida, visitaron varios lugares, incluidos parques, lagos, el Palacio de Buckingham y la noria. Les quedaban lugares por visitar pero lo habían dejado para el otro día. Los dos estaban en el departamento, Tom se estaba duchando.
Una llamada entró al móvil de Alysse. Atendió.
-Estamos yendo al restaurant que cenamos siempre con Joan, si quieren pueden venir, seria una cena de parejas. -dijo divertida.
-Eres una idiota. -las dos sonríeron- en 15 minutos estamos ahí.
-Okey, los esperamos. -la llamada terminó.
Alysse camino hacia la puerta del baño y golpeó.
-Oye tonto, nos esperan para cenar, ¡apresúrate!
-¡Ya voy dulce princesa! -gritó desde dentro éste.
Alysse ya se había duchado antes que el, así que debía cambiarse y estaba lista. Entró a la habitación y comenzó a cambiarse de ropa.
Estaba en ropa interior, no decidía que ponerse, de repente la puerta de la habitación se abrió y dejó ver a un Tom sólo con una toalla en la cintura y el cabello mojado.
Los dos quedaron congelados.
-Lo siento, he olvidado mi ropa aquí. Pensé que estabas en la sala. -Alysse se tapó un poco con un abrigo que tenía a mano.
-No pasa nada, saca tu ropa y ve a cambiarte al baño, yo lo haré aquí.- dijo visiblemente sonrojada.
Tom saco su ropa y se fue al baño. Alysse sonrió sola. Era sexy.
Decidió que ponerse, se maquillo y salió de la habitación.

Tom la vio y se sonrojo.
-Estas preciosa. -le dijo
-Gracias Tom, tu tambien lo estás.- dijo sonriendo.

Los dos se quedaron mirando detenidamente.
-¿Vamos? Se nos hace tarde. -Alysse decidió romper el momento.
Salió del departamento, Tom iba tras ella en silencio.
Llegaron a la calle y caminaron uno al lado del otro en silencio, los dos estaban perdidos en sus pensamientos. Rozaron sus manos sin querer y Tom aprovechó la oportunidad para entrelazar sus dedos con los de ella. Alysse lo miró, no dejaron de caminar. Seguían en silencio pero de la mano.