LA VUELTA AL SOL

Capitulo 3: Mejores amigos

- Hola, soy...

- Andrea... - me interrumpió Trisha - todo el mundo lo sabe – no lo dijo en tono bonito.

No es que nos quisieran mucho. Mis amigas creían que mandaban en la escuela. Eran las reinas. Y miraban a los demás por debajo del hombro, yo simplemente me dejaba llevar por eso.

Humberto me miro. Pero Trisha siguió hablando.

- Nosotros somos... - empezó a decir...

- Humberto y Trisha – pero la interrumpí

- Uhhh – dijo Humberto.

- Hemos tenido varias clases juntos.

- No pensé que supieras quienes éramos, eres...

- ¿Soy qué?

- Una de ellas – respondió Humberto.

- Ah ya – dije con lastima - Soy observadora, eso es todo.

- ¿Y qué haces en esta clase? – pregunto Trisha.

- Ya les dije, he estado en varias clases con ustedes – me estaban mirando – quiero estudiar literatura. 

- ¿En serio? – pregunto sorprendida Trisha.

- Si ¿Por qué les parece tan raro?

- Es que nunca te vi como una persona que quisiera hacer algo con su vida más que ir de compras con el dinero de papá.

- Trisha!! – le dijo Humberto.

- ¿Qué? ¿No es verdad?

- Tranquilo Humberto, ya estoy acostumbrada que me juzguen por mis amigas sin conocerme. Pues si – dije mirando a Trisha fijamente – quiero estudiar literatura y quiero escribir, y me esfuerzo cada día por eso, no me gusta ir de comprar de hecho, me la paso mejor con un libro, y así mis padres tengan todo el dinero del mundo, prefiero siempre estar descubriendo otros mundos diferentes al mío.

- Waoooo Trish, ella te callo.

- Cállate Beto.

- Ok ya me callo.

- Perdón, mucho gusto Andrea – Trisha me dio la mano – yo voy a estudiar diseño gráfico y también amo leer, creo que eso tenemos en común. No me gusta juzgar a la gente pero es que tus amigas...

- Si yo sé, no me lo tienes que decir – voltee a mirar a Lorena, y no tenía buena cara, pienso que prefería morir justo en ese instante que estar en clase.

- Yo también amo leer, y quiero estudiar relaciones públicas. Mucho gusto Andrea – Humberto me dio la mano. No les miento que sentí un corrientazo, quizás fue el tocarlo, el sentirlo, el hablarle porque nunca lo había hecho, nunca me había atrevido.

- ¿Por qué andas con ellas? – pregunto Trisha, Humberto le dio un codazo - ¿Qué Beto? Tengo curiosidad.

- Quizás ella no te quiera responder.

- Han sido mis amigas desde que nacimos, he estado con ellas toda mi vida, ¿Costumbre quizás? Siempre hemos sido nosotras 4, aunque ahora nada más seamos 2 – en ese momento sonó el timbre.

- Hasta la próxima clase chicos.

- Hasta luego Miss Spencer – le dije al salir de clase.