~ Necesito que hagas esto último por mí, Carlos ~

164 12 16
                                    

¡Últimos cuatro capítulos! 😲🙈










Kendall:

























Algo había cambiado. No sabía qué era con exactitud. Al mirar la noche por la ventana de mi apartamento, me percaté del cambio climático.

»Un mal presagio.« Supuse. »Y yo aquí, perdiendo mi tiempo. Idiota.«

Escuché un ruido: -¿Qué haces aquí, Carlos?- Refunfuñé al sentirlo detrás de mí.

-Puedo ayudarte a entrar.

-No.- Negué con la cabeza. -No puedes.

Al voltearme y mirarlo fijo a los ojos, ví su cansancio, ví su dolor como si hubiera estado ayudando a alguien a dar a luz durante horas.

Se me estrujó el corazón.
Kate.

-¿Qué pasó?- Pregunté cauteloso, ateniéndome su respuesta. -¿Kate está bien?

Lo oí tragar saliva.
Oh, no.
Por dios, no.

¿Qué hizo mi padre esta vez?

-Carlos.- Gruñí su nombre con desesperación. Sus ojos asustados me traspasaron. -Dime qué sucedió.

-Kate está bien. Tu padre... quiso matarla.

Tuve que poner toda mi fuerza de voluntad en no derrumbarme, en no caer y hacer destrozos.

-La serpiente de Issope.- Cuando lo dijo, temí lo peor. Abrí los ojos, tembloroso ante la idea de lo que ese nombre significaba.

Lo conocía muy bien.
La serpiente de Issope. La que es capaz de matarte de adentro hacia afuera.
Aunque, esa serpiente, lo único que mataba en sí eran...

-Kira.

Al pronunciar su nombre y darme cuenta de la maldita realidad estallé.
Me juré a mí mismo no perder el control de mis emociones.
Pero esta vez, había ido demasiado lejos.

Mi padre quería matar a la bebé. A Kira.
A mi propia hija.

Y Kate...

Me agarré el pelo, desesperado, gruñendo y tirando todo a mi paso. Causando un tremendo desastre en mi habitación.

Cuadros descolgados, estantes cayendo a mi paso.
Oí gritos desesperados, gemidos.
Sentí que me quedaba sin aire, como si algo grande estuviera pasando por mi garganta.
La sensación de tener a la serpiente en mi boca, me abrumó.

Aunque sabía...
Que sólo era parte de lo que Kate había sentido en ese momento.

-Kendall, cálmate.- Carlos me tomó por los hombros evitando que caiga al suelo por la falta de aire. La sensación se iba desvaneciendo, pero la ira...- Kira está bien. Y Kate también. Sólo está un poco débil.

Abrí los ojos ante la sorpresa.

-Creí que...

-Increíblemente, cuando encontré a Kate, estaba algo consciente.- Ví su dolor y culpa ante la situación. -Su vientre creció de manera desmesurada y...- Luchaba por no dejar escapar una lágrima. -No sé cómo lo supe. Actué, sabiendo del riesgo que conllevaba. Le quité la serpiente. Y cuando lo hice...- Esperé expectante. -La serpiente estaba muerta, Kendall.

-¿Y Kira?

-Ya te lo dije. La bebé está bien. Ambas lo están.- Suspiré aliviado ante la confirmación que acababa de darme. -Es prácticamente un milagro.

• Enamorada del diablo • EDD1 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora