~ Enfrentamiento. Y un nacimiento ~

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¡Últimos dos capítulos! 🙊

Boulevard of Broken Dreams. - Green Day.

































Kate:





















Alargué mi mano con desesperación al ver a Kendall salir despedido por los aires.
Poco pude hacer.
Me agarré el vientre.
Dolía.
Dolía mucho.

Se me había roto la fuente.
Kira... ella iba a nacer.
¡Antes de tiempo!
¿Y como no hacerlo ante la presión? ¿Cómo no hacerlo si yo, estaba asustada, shockeada, y a punto de morir?

Caí al suelo, no pudiendo soportar el dolor.
Cuando la fuente se rompió, obviamente que sentí que algo se había roto dentro de mí.

Y la desesperación llegó con más fuerza.
Kira iba a nacer.
En el momento y lugar equivocado.

No quería que naciera aquí, rodeada de maldad. No podía culparla por ser la hija del Diablo.

Quería salvarla.

Alargué la mano hacia el portal, como queriendo tocarlo, atravesarlo.
Que me llevara bien lejos de aquí.

No pude moverme.

Más lágrimas nublaron mis ojos al ver a Kendall siendo sometido, humillado y maltratado por su propio padre.

¿Y todo porqué?
Por mí y por Kira.

¿Por qué la vida era tan injusta?
¿Por qué Dios fue injusto conmigo?
¿Qué hice mal?
¿Nacer?

-¿Porqué no me lo dijiste?- Oí gruñir a Kendall. -¿Porqué no me dijiste nada de ella? ¿¡PORQUÉ!?

-Precisamente, por esto. -Lucifer me señaló. Tenía la extraña sensación de verlo señalar a Kira a través de mi vientre. -No cumpliste con mi petición, hijo.

-¡VETE AL INFIERNO!- El grito estruendoso de Kendall llenó todo el lugar, obligándome a tapar mis oídos.

Apenas oí golpes, forcejeos, gritos y chillidos. Todo junto.
Y yo aquí sin poder moverme.

No podía esperarme nada de Dios. El que me ha protegido durante milenios.
Tenía que prevalecer sola.
¿Cómo lo haría sin ayuda?

El dolor aumentaba y me costaba respirar. Pronto pude darme cuenta que el lugar, el mismo infierno, se estaba desmoronando, cayéndose a pedazos.

¿Porqué?

Kendall estaba prevaleciendo. Y con cada golpe que le asestaba a su padre, todo el lugar se movía, como si hubiera un terremoto.
Los golpes de Kendall hacia Lucifer provocaban que el lugar se volviera más inestable.

A punto de romperse.
De quebrarse.
De desaparecer.

Lucifer era el pilar de este lugar y Kendall lo estaba...
Destruyendo.

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