~ Broken Candy ~ Suga - BTS

Parte 12

-No entiendo por qué le tomas tanta importancia. Hwa In es una arpía que le gusta pisotear a cualquiera.-

¿Arpía? Wow, Jimin lleva demasiado tiempo juntándose con SaNa.

-¿Pero yo no soy insignificante, verdad?-

Me miró con esa pereza otra vez. -No, y por milésima vez, no. No la escuches nunca, ¿de acuerdo?- me despeinó el cabello tratando de animarme, y funcionó. -Tú eres Jung Dodo, la sobredosis de azúcar andante. Eres como la maquinita de goma de mascar del instituto, a todos les agradas. Más porque le das golosinas a quien menos te lo pide.-

-Sobredosis.- repetí.

-Aunque pensándolo bien, te he notado un poco menos de azúcar el día de hoy, ¿se te han terminado las golosinas?-

Oh, bueno, solo pude encogerme de hombros. -Uhm, he pensado mucho, mucho y mucho desde hace unos días.-

-¿En qué?-

-En...- no, no, no, a Jimin no. -¿La clase?-

~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~

Nunca me había sentido así de menos. Nunca, nunca. Fue extraño por un momento pero creo que han podido animarme, incluso Eunwoo quien me ha sonreído diciéndome lo divertida e interesante que soy. Moonbin dijo que soy adorable también. Para todos soy el cachorro adorable del instituto, y bueno, yo me impuse sola ese nombre. A todos les agrado, pero no entiendo qué es lo que Hwa In ve mal en mí.
Ella es bonita, con grandes ojos marrones, más alta que yo, y su cabello obscuro también me gusta. Es más alta y es un año menor que yo, cielos y cielos. De pronto ya veo a todo el mundo más alto que yo.

Volví sola al departamento de Oppa después del horario de clases. Me pareció extraño ver su auto fuera, significa que ha llegado temprano hoy también. Bueno, él no se queda horas extras como Yoongi y Namjoon.
Entré al departamento escuchando de nuevo aquel silencio tan peculiar que ya describe perfectamente el ambiente aburrido de este lugar.

-¿Oppa?-

Conforme caminaba al pasillo en dirección a su habitación, más fuerte escuchaba su voz. Está hablando con alguien. Y se oye muy molesto.

-No es mi problema.- él decía. Me acerqué a la puerta de su habitación tratando de escuchar. -¿Por qué tengo que ir yo?-

-¿Hay alguien ahí?-

-Eso no es asunto mío y lo sabes.- no me gusta que hable en ese tono, me asusta. -Yo cuidaré de ella, lo he hecho por un par de semanas, ¿no?-

-¿Oppa?-

-Esto no me gusta, ¿sí?- supongo que habla por teléfono con... -Madre, no me metas a mí ni mucho menos a Doyeon, solo terminen con esto y hazte cargo.-

-Mamá.-

-No pueden irse solo así. Sí, puedo cuidarla por unas semanas más, ¿y luego qué?- debería interrumpir, ¿tal vez? -No puedes llevártela de aquí.-

¿Oh? Tuve que retroceder.

-Tu maldito divorcio ya ha sido duro para nosotros, déjanos en paz.-

Y aquí viene de nuevo ese hormigueo acompañado de un llanto incrustado en la garganta queriendo salir.
El tono de voz, la manera de hablar, odio cuando hacen eso. Creo que incluso escuché la voz de mamá desde aquí, tan histérica y molesta. Los dos demasiado molestos.

Tuve que huir del departamento. Salí corriendo de ahí, sin la idea de ir algún lugar.
No he querido soltar nada, pero no dejo de pensar en ello. Ideas, ideas.

-¿Llevarme a dónde?- Oppa le dijo a mamá que no puede llevarme a... no sé dónde.

Mi nivel de ánimos está bajo otra vez. Necesito energía positiva en estas pocas horas libres que me quedan.

-Energía positiva... ¡Min Yoon Gi!-

Más bien negativa, pero está bien porque es Yoongi.

~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~

Tuve que tomar un autobús para ir a ese edificio tan pequeño pero muy grande en el interior. Recuerdo muy bien a dónde debo dirigirme para encontrar a Yoongi. He saludado a muchas personas en el camino y me alegra un poco que nadie me haya llamado la atención como un guardia o algo así. Porque estoy entrando sin supervisión.

Pasillo, dos puertas, lo encontré sin problemas. Ah, pero... creo que Suran estará allí. Suran siempre está con Yoongi porque son compañeros en producción y composición.
No me gustaría ver a Suran hoy, siendo torpemente sincera. Oppa metió muchas ideas locas en mi cabeza y todo por Suran que no tiene la culpa.

De pronto comencé a escuchar una melodía del otro lado de la puerta. Uhm, pero se cortó muy pronto, luego escuché unas risas. De una chica y un chico. La de la chica es de Suran, y la risa del chico ni en sueños sería de Yoongi, entonces hay un tercero.

Tengo mis pies firmes al suelo, con una batalla interna conmigo misma sobre si entrar o no. Una vez más no he avisado a Yoongi que vendría, entonces no sé qué tipo de molestia he de presentarle. Y ni siquiera le he traído algo para comer.

Genial, ahora he recordado que tengo hambre.

He comenzado a escucharlos hablar una vez más. Espiar ya se me está yendo de las manos. Si espío solo sabré cosas malas como hace un rato con Oppa.

-Ella es linda, Yoongi, no me imagino la historia en serio.-

¿Suran?

-Una chica menor, ¿qué clase de gustos son esos?- ese es otro chico.

Hablan de mí. ¿Por qué hablan de mí?

-¿Quién fue contra quién? Tengo curiosidad.- Suran otra vez.

-Yo dudo que Min haya dado el primer paso.-

-También lo dudo.-

No he escuchado la voz de Yoongi en ningún momento. Mi suposición: los está ignorando.

-No parece que la quisieras en verdad.- el chico dijo y yo me he molestado.

-Es mi novia.- ¡oh! Al fin, pero no habla tan fuerte, y creo que muy desinteresado.

-Sí pero... amigo.- escuché el rechinar de una silla. -¿Qué clase de fetiche es ese? Y hablando de fetiche, dudo mucho que ya te la hayas llevado a la...-

-¿Terminamos, no? Voy a salir.-

Escuché otro sonido. No, y pasos acercándose, ¡peligro!

Di un respingo enorme cuando la puerta se abrió de pronto y en ese segundo Yoongi se detuvo cuando me vio frente a él.
Apuesto que no se lo esperaba, esa expresión lo decía.

-¿Qué haces aquí?-

No sé por qué no pude cubrirme con una falsa inocencia.

-Oppa está molesto con mamá y mamá con Oppa.- dije en voz baja.

Él sabe de esto. Que las peleas me ponen muy triste.

-No puedes venir aquí.-

Frío, frío y hostil.

-Quería verte, hoy tuve un día malo, y eso que todavía no acaba.-

-Tienes que irte.-

-No quiero irme, Suga.-

Esa actitud conmigo no me estaba ayudando para nada. No quería irme y solo quería estar un momento con él. Porque lo necesitaba.
Cuando mis padres peleaban y yo lloraba, él estaba siempre ahí, ¿por qué hoy no?

Mordí mi labio inferior tratando de no soltar el llanto de nuevo, mi siguiente acto fue apoyar mi cabeza en su pecho esperando alguna otra respuesta de él. Algo positivo. ¿Por favor?

Y lo obtuve cuando me rodeó en sus brazos al fin. Eso es, eso quería. Eso necesitaba.

-Todo está bien.- él susurró.

No, yo creo que hay algunas cosas que no están bien.

~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~