~ Broken Candy ~ Suga - BTS

Parte 73 - Último

Oppa vino para mi ceremonia de graduación, conoció a mis amigos y nos acompañó a mi cena de despedida. Mi despedida porque yo volvería a Seúl entonces.
Mamá no quería volver pero yo tenía la opción de quedarme con mi hermano el tiempo que yo quisiera hasta que supiera lo que quería hacer con mi vida, a ese entonces cumplí 20 años y no hice el examen de ingreso a la universidad.
Ese verano salí de vacaciones con mamá a Singapur, todo normal, muchas aventuras y muchas distracciones.
Y finalmente fue el otoño de ese año dónde volví a Seúl de nuevo, encontrándome con mis amigos, los amigos de Oppa, e incluso con Youngjae.

...

-¿Estás lista?-

Era sábado en la tarde. Las hojas del color de otoño volaban debido al fuerte viento de la temporada. Oppa dijo que me llevaría a un sitio para una sorpresa. No sabía de qué se trataba, fue muy repentino, pero como me gustan las sorpresas, ¿cómo negarme?
Hice mi último arreglo a mi bufanda y até mis converse con ese bello doble nudo para no tropezar después. Oppa ya había salido así que tuve que darme prisa y correr. Lo alcancé justo cuando estaba encendiendo el motor de su auto.

-Siquiera ten paciencia, ¿no?- le reprendí. –No entiendo cuál es el alboroto.-

-Te encantará.- él sonreía.

-¿Lo prometes?-

-Digamos que es un regalo de graduación atrasado.-

-Pero tú me diste mi regalo el día de la ceremonia.-

No volvió a hablarme, en vez de eso encendió la radio y se encontró a una canción de Red Velvet, canción que automáticamente empezamos a cantar a todo pulmón los dos.

-"Vainilla, chocolate y aguacate también."-

Oppa soltó una risa. -¿Por qué lo cantas así?-

-No sé.- sonreí. –Youngjae me pegó esa manía de cambiar las letras.-

Todas mis canciones favoritas de Twice arruinadas gracias a ese chico.

-Ah, Youngjae, claro. ¿Volverás a salir con él?- me dio un ligero vistazo.

-Tal vez.- por supuesto que sí. –Estará libre la otra semana así que... tal vez vayamos al parque de diversiones.-

-Eso está bien.-

-Sí, supongo. ¿Ya casi llegamos?-

-Ya casi, solo unos segundos más.-

-Esta es la plaza, Oppa.-

-Lo sé, genio.-

Estacionó el auto en el estacionamiento de la plaza principal. Bajamos del auto al mismo tiempo, y yo en mi retraso corrí hacia él para alcanzarlo.

-No entiendo, ¿qué hay aquí?- pregunté alcanzando su paso.

-Es una sorpresa.- sonreía.

-¡Lo sé! ¿Pero qué tipo de sorpresa?-

-Lo sabrás cuando lleguemos.-

Fruncí el ceño y bufé. Quería matarme de la intriga y lo estaba logrando. ¿Cuál es el alboroto? Seguía preguntándome eso mientras le hacía muecas a mi hermano.
Caminamos por largo rato entre las calles cercanas a la plaza, tomó caminos distintos hasta perder el lugar central. Estaba cansándome de caminar tanto, estaba a punto de reprenderle otra vez hasta que de pronto él se detuvo sin avisar. Caminé de más y giré de pronto para preguntar por el cometido.

-Aquí es.-

Estábamos en una simple acera, en una esquina entre dos calles en "T" y cruzando... el parque para perros llevándose toda mi atención.