~ Broken Candy ~ Suga - BTS

Parte 38

Youngjae continuó con su bromas sin sentido por un largo rato, trató de sacar temas cualquieras de conversación, preguntaba cosas que ni yo sabía responder incluso. Él decía que era para distraerme de mi pésimo humor pero yo no podía asegurar que funcionaba.

Oppa llegó a su hora habitual. Yo tenía un par de cosas qué preguntarle... sobre lo de la noche anterior, pero no me sentía tan segura.

-No puede ser.- esa cara de cansancio al ver Youngjae me pareció un poco graciosa.

-¡Hyung!- saludó Youngjae poniéndose de pie y agitando una mano.

-¿Hyung? Ni siquiera te conozco.- Oppa vino hacia mí. -¿Cómo te sientes?- acarició mi cabeza pasando sus dedos hasta llegar a mi mentón para alzarlo haciendo que lo mirara.

No tenía mucho qué decirle. O ciertamente no me daba la gana. Me encogí de hombros como respuesta.

-Doyeon se siente tan mal, es difícil hacerla reír ahora.- Youngjae volvió a sentarse a mi lado.

-¿Todo es broma para ti?-

-Yah, hyung, no me ataques así.-

-Oppa...- cielos, mi voz está tan ronca. -¿Lo viste hoy?- froto mis manos como si tuviese frío pero no hacía frío.

-No.- notablemente no le gustó que preguntara eso.

-¿A Yoongi hyung? Ah, no, no es mi hyung. El oppa de Doyeon es mi hyung ahora.-

Ambos ignoramos a Youngjae. –Ciertamente... no creo que haya sido correcto despedirlo, Oppa.-

-Sí, lo sé, estaba molesto.- se dirigió a la cocina y yo lo seguí con la mirada. –Namjoon aclaró que no hubo motivo válido.- gruñó y seguido tomó una pausa, muy misterioso. –Pero él renunció.-

¿Oh?

-¿Namjoon renunció? ¿Quién es Namjoon?-

-¿Renunció?- me levanté del sofá y fui dónde Oppa. Él tomó un sorbo de una botella de agua.

-Ya no es importante, Doyeon. Lo mejor es olvidarlo.-

Olvidarlo es difícil. –Lo sé pero...-

-Te ha lastimado por última vez.- sentenció otra vez. –No lo busques.-

-Yo... no voy a hacerlo.-

-Voy a creer eso.-

Dejó la botella en la mesa y se dirigió a su habitación. Vi que Youngjae lo siguió.

-Espera, hyung, necesito un pijama.-

-¿Qué rayos? Fuera de aquí.-

Cuando Oppa llegó y preguntó cómo me sentía, lo primero que vino a mi cabeza fue "duele" pero simplemente no lo dije. Sí, duele. Aquí, en mi pecho. Un corazón roto no sana de la noche a la mañana. Youngjae dice que con el tiempo él recogerá los pedazos y los armará como un rompecabezas. Se lo agradecí pero no me hacía sentir tan bien como creí que debería.
No sé qué es lo que sentía en ese momento. Ya no estaba enfadada, tal vez triste, pero no podía mostrarlo más que de una manera muy neutral.

Odiaba a Min Yoon Gi pero algo me decía que no debía ser así.
No quería odiarlo de esa manera. Pero él me había fallado cuando yo lo necesitaba, me había mentido, traicionado. Odio esa última palabra.
Oppa dijo que él no supo amarme correctamente.

Y eso me hace pensar... que tal vez yo a él tampoco.

-¿Doyeon, por qué estas llorando así? Tú sabes que soy débil ante las lágrimas femeninas, voy a llorar.- Youngjae apareció de la nada a abrazarme. –Haría lo que fuera para no verte así.- cerré los ojos ante el calor confortante de mi amigo. Se sentía tan bien. -¿Sabes que hago yo cuando estoy así?- me miró.