Capitulo 30

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DYLAN'S POV

Estaba jugando vídeo juegos en la casa de Mark.

Pero no, no estaba jugando con Mark, estaba jugando yo solo, ¿Por que? Porque el idiota se la ha pasado chillando y encerrado en su habitación desde que terminó con Thalía.

Llegue desde la mañana a hablar con el, pero no se digna si quiera a abrirme la puerta de la habitación, por lo que he estado todo el día sentado en la sala jugando todos los video juegos que tenía al lado de su consola, ya llevo más de medio día aquí.

Arroje el control al sofá y suspiré levantándome dispuesto a sacarlo de ahí.

Subí las escaleras y toque la puerta de su habitación con mis nudillos.

- Mark, sal de ahí de una vez, ¿Quieres?

- Lárgate.

- Oh vamos amigo, no puedes quedarte ahí toda la vida.

- Si puedo, ahora lárgate.

Suspiré frustrado y baje las escaleras.

¿Así me veía yo tiempo atrás? Demonios, que vergüenza.

Fui a buscar algo a la cocina, pero el timbre me detuvo.

Volví a la sala de estar y abrí la puerta llevándome una gran sorpresa.

- ¿Mike?

- ¿Dylan?

- ¿Que haces aquí?

- Estoy repartiendo las invitaciones para el matrimonio de mi madre, pensé que Thalía vivía aquí, o eso me habían dicho así que vine a entregarle una invitación.

- Creo que te equivocaste de casa, aquí vive el novio de Thalía... O más bien ex.

Mike asintió.

- Oh... Ya veo, ¿Sabes donde vive?

Le di la dirección y el la apuntó.

- Por cierto Dylan - Dijo antes de irse - Chloe me dijo lo que hiciste... Lo del video, quiero decir. Gracias, te debo una grande.

- No tienes por qué - Dije dandole una palmada en el hombro.

- Iba a llevarte esto a tu casa más tarde, pero ahora que estás aquí - Buscó algo en su chaqueta- Aquí hay una para ti también.

Mire confundido la tarjeta, sabía del matrimonio pero nunca creí  que me fueran a invitar.

De todos modos acepte.

- Gracias.

El chico solo sonrió y se dio vuelta para terminar de repartir las cartas.

Volví a subir las escaleras pero esta vez con una llave que encontré en la mesa de la cocina, Mark siempre tiene una llave extra para los cuartos.

- ¿Que demonios? Vete de aquí - Me tiró una camisa a la cara apenas entré a la habitación.

- Llevo más de medio día en esta casa aguantándote, ¿Y así me lo agradeces? - Dije haciéndome el dolido.

- Nadie te dijo que vinieras.

- Lo se - Me encogí de hombros.

El chico que tenía en frente no era Mark, estaba hecho un desastre, estaba con el cabello despeinado y aún estaba en calzoncillos, que para colmo tenían unas hamburguesas pequeñas de adorno. La habitación también estaba hecha un desastre, habían paquetes vacíos de comida y bebidas por todo el lugar, y sin hablar del olor.

Between [ NTEDLA 2 ]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora