Esto no es la típica historia donde el ídolo se enamora de la fan o donde ambos tropiezan y surge una sorpresiva conexión. Lo nuestro definitivamente no comenzó así. Esto comenzó en la habitación de un hotel, donde ambos disfrutábamos pero a la vez le hacíamos daño a una tercera persona: mi mejor amiga.
¿No les pasa que hacen algo mal pero aún así quieren seguir repitiéndolo una y otra vez? eso nos pasó, todo comenzó como una pequeña diversión en la que ambos salíamos sastifechos pero al pasar los días quería seguir viéndolo y continuar con aquél pequeño juego.
Fue tanto así, que no imagine que nos encontraríamos envueltos en una Traviesa Mentira.