Vanesa
Llego a casa de Royce y Nina súper cansada, junto a Jorge fui a dar un recorrido a un jardín botánico y después fuimos al cine, fue la primera vez de Diego en un cine y estaba muy emocionado aunque Jorge y yo no podemos decir lo mismo; la película era aburrida y nos llamaron la atención por los gritos de Diego sin importar que era un niño.
Escucho gritos provenientes de una habitación antes de subir las escaleras, suelto la mano de Diego y me acerco a aquella puerta pero el niño viene hacia mí y lleva sus dedos a los labios indicándome que haga silencio. Río.
– Cariño sigue a la habitación.
– Voy a juga – se entusiasma y va a la habitación.
– ¡Explícame que es eso! – es la voz de Nina.
– No lo sé, es un papel.
– ¡No es cualquier papel! es una factura de una reservación en un hotel con mi nombre, pero tú y yo no nos vemos en hoteles. – su voz se quiebra.
– ¿Tienes otra? ¿es eso, Royce?– ¡Me tienes harto con tus celos!
Sale de la habitación, apenas me ve y sigue caminando.
– ¿Qué paso? – le pregunto a Nina.
– Me engaña Vanesa, mi esposo me engaña – dice en voz baja tratando de asimilarlo. – Encontré esto – muestra la factura.
«La factura esta en el bolsillo de tu chaqueta, asegúrate de botarla luego»
Arrugo ese pedazo de papel y Nina viene hacia mi abrazándome.
– Lo he perdido... – llora.
– No lo has perdido, aun no se ha ido.
– Ve y habla con él, por favor – pide entre lágrimas.