||Prisionero||

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Vaya mis días en esta prisión son interminables, quisiera que ya acabara todo este sufrimiento, mis hermanos murieron en esta interminable guerra y a mí me toco la prisión, dijeron que no era peligroso y creo que quieren vengarse conmigo de todo lo que hicieron ellos... los extraño y mucho, aunque ellos no me trataran muy bien éramos una familia, nos cuidábamos, nos protegíamos, pero ahora, ahora ya no tengo a nada ni a nadie...

Día tras día es lo mismo, me levantan a las 5 de la mañana, me arrojan con una manguera agua helada, me dan 5 minutos para desayunar, solo un pedazo de pan enmohecido y agua, me ponen a trabajar 3 horas cargando piedras y si me retraso en algo me azotan todo el día, saben que casi no puedo con el peso, apenas y tengo 14 años de edad, pero no les importa, cada vez me dejan tareas más difíciles y solo para que tengan a alguien a quien azotar, gracias a ello mi cuerpo está sumamente golpeado, lleno de cicatrices y machado de sangre, tanto vieja como nueva, ni con esa estúpida manguera se me quita la sangre... lo bueno es que si hago todo bien me dan libre 1 hora, a todos los prisioneros los dejan salir al patio 1 hora, para descansar, para hacer ejercicio, para meditar nuestra vida... yo me la paso en un lado donde pocos presos van, ahí hay varias flores plantadas tanto dentro como fuera de la valla que me separa de la libertad, quisiera que ya me llevaran a los campos de concentración, ya no quiero vivir, quisiera poder reunirme con mis hermanos...

Este día no es muy diferente a los demás, todo ocurrió igual, me levantaron con agua helada, me dieron de desayunar ese estúpido pan, me forzaron a cargar piedras y estoy aquí pasando el momento, admirando esas flores color violeta tan bonitas, las envidio un poco, aunque algunas están afuera y otras adentro están juntas, parece que se apoyan las unas a las otras, que en realidad no existe ninguna cerca alambrada de púas que las separe, las observo durante un momento y siento como algo me cae en la cabeza... un avión de papel, pero de quien era, voltee a ambos lados, no había nadie, mira a enfrente y la vi, a la chica más linda que jamás había visto, una pequeña niña rubia con ojos azules, se parecía un poco a mí, llevaba un vestido elegante azul, su pelo recogido con dos coletas, y un pequeño sombrero color blanco, me quede anonado no podía creer que alguien así me mandara un mensaje, sonreí como hace mucho que no lo hacía, sabía que me había enamorado, era amor a primera vista... me dispuse a leer el avión de papel

"Hola espero no molestarte, te eh estado observando últimamente y me preguntaba ¿Por qué si pareces tener mi edad, estas en esa horrible prisión? No creo que hayas hecho nada malo, bueno o no lo parece, te ves muy tierno sabes... creo que es todo lo que quería saber, espero que no te haya molestado en serio, y si no quieres no me contestes, lo entenderé, solo quería ver si podía hacer un amigo... ojala no te haya molestado..."

Me quedo viéndote, apartas la mirada, te das la vuelta y comienza a alejarte, afortunadamente tenía un pequeño lápiz en mi bolsillo, lo tenía para dibujar ya que me encanta hacer eso, es mi medio de diversión, te escribo unas pocas palabras, ya estas bastante lejos, no creo poder llegar tan lejos el avión así que te grito:

-¡Espera!- te das la vuelta y me ves arrojar el avión de papel, te apresuras a recogerlo, lo lees y veo que se dibuja una sonrisa en tu rostro y te vas... no se qué pensar, me sonreíste pero no me volviste a responder, siento tristeza, me enamore de ti pero estoy aquí, soy un prisionero de guerra y solo espero mi final. Aun así, espero verte mañana, espero que no hayas sido solo una ilusión, un sueño...

El día siguiente me vuelven a despertar igual, pero ya no me importa, de hecho agradezco poder despertar, soportare todo lo que siempre hago, para verte de nuevo, saber que no lo soñé, que regresarás hoy y me contestaras... Ya termine de cargar las piedras, procure no equivocarme para que pudiera tener mi descanso... por fin llego la hora, voy a donde siempre paso mis descansos intento buscarte con la mirada pero no te encuentro, siento una profunda tristeza, mis ojos se inundan de lagrimas y me siento estúpido, como pude creer que era verdad, que una hermosa joven me había visitado, estaba a punto de irme cuando un pequeño avión de papel cae a mi lado, sonrió y volteo a verte, esta vez no evitas mi mirada y nos quedamos viendo durante un rato, recuerdo el avión y me dispongo a recogerlo y leerlo

One-Shot's Ppgz Y RrbzDonde viven las historias. Descúbrelo ahora