One-Shot's Ppgz Y Rrbz

||Tu último regalo||

Era otoño y los árboles quedaban al desnudo de la temporada, siempre sucedía lo mismo y al igual que esos bellos árboles que en primavera presumen de sus frondosas copas, ella había tenido una maravillosa época en su vida que atesoraría en el fondo de su corazón, pero sentada bajo un árbol en particular, frente al estanque de los patos, recordó su primer beso. Sonrió sonrojada de recordar ese único momento de locura de amor junto a un hombre que la marcó de por vida, lo amaba, lo amaría hasta el final de sus días.

Cuando había cumplido sus anhelados dieciséis, ese árbol era el lugar que más le gustaba para dibujar plácidamente, sin interrupciones ni hermanas que la molestaran con sus tontas peleas. Un día, sin saber por qué, Boomer había aterrizado frente a ella y completamente alerta a cualquier paso de guerra, tomó posición de ataque pero se sorprendió cuando en un veloz y ágil movimiento, el rubio la había acorralado entre el árbol y su cuerpo, dejándola indefensa ante su cercanía pero la sorprendió más, cuando se arrojó directamente a sus labios. Nunca había sido besada por nadie, por ello se sorprendió de lo suave que el chico podía ser con sus besos conociendo que era un villano en ese entonces. Cerró lo ojos fuertemente sin saber qué hacer y cuando los volvió a abrir, el chico se había ido.

Esa noche no pudo conciliar el sueño intentando explicar lo que había sucedido, por qué su némesis la había besado de la nada. Eran casi las cinco de la mañana cuando sintió que alguien se acostó a su lado y fingió estar dormida. Por la fragancia de la tarde, sabía que se trataba de Boomer. Al principio no hizo nada, sólo se sintió observada por él pero luego acarició su mejilla y la besó en los labios de nuevo, le había robado su segundo beso, dormida. En un intento de poder acercarse a él, pasó su brazo sobre su abdomen y se aferró a su playera, entonces él se tensó. Había sido muy tonto como para no haberse dado cuenta que estaba despierta.

Las próximas dos horas, le estuvo tarareando canciones, con la cabeza de ella sobre su pecho y la inocente idea de que estaba dormida. Le confesó cuanto la quería y que el beso de la tarde había sido asombroso. Cuando se levantó de la cama, dejó algo en donde antes había estado y besó su mejilla. Obviamente cuando se fue, abrió los ojos ruborizada, sentía el aroma del rubio sobre su cama, contra su ropa y en su cuerpo. Se sentó curiosa de ver lo que había dejado a su lado y abrió un cuaderno de dibujo. Las primeras hojas eran dibujos que ella había hecho y el resto, eran todas de ella dormida, riendo, triste, volando, ayudando, todos eran de ella. Y en la última página, un mensaje escrito en cursiva con muy buena caligrafía.

"Pensarás que soy un acosador, pero he visto tantas facetas de ti que ya me es imposible seguir dibujándolas sabiendo de sobra que nunca lograré que ninguno de esos dibujos me vean a mí. Por favor, mírame.

Att. Boomer."

Ese día no pudo dejar de sonreír completamente feliz, el rubio correspondía a sus sentimientos. El chico despareció por meses que le hizo pensar que todo había sido un juego y un día, desesperada y dolida de sólo pensar que el chico se había burlado de ella, no resistió más y se encerró en su cuarto a llorar por una semana completa. Sus hermanas no sabían qué es lo que había sucedido y nunca imaginaron que era por el chico rubio de sus peores enemigos. Sin embargo, una llamada de emergencia la hizo regresar al campo de batalla intentando olvidar ese momento de su vida pero el destino no quería eso, se encontró frente a frente con él y sus dos hermanos mayores. Las estaban esperando en el centro de la ciudad, sobre la alcaldía. Ninguno estaba haciendo nada, más que mirar fijamente hacia ellas.

Habían ofrecido su rendición y pasarse al lado bueno. Se volvieron héroes en cuestión de meses, Butch y Buttercup se hicieron grandes amigos y cómplices de travesuras mientras que Blossom y Brick se volvieron compañeros de estudio y posteriormente novios. Ella había decidido ignorar al chico pues este era lo único que hacía cuando se encontraban. Decidió olvidarlo y cambiar de página, intentó una relación con un chico nuevo del colegio pero no fue algo emocionante.