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||♠Especial Navidad♠ [5/6]《Amigo Secreto》||

Buscando su regalo: Kaoru y Butch

Butch

Amm... bueno, ¿Qué puedo decir?, hoy día es mi turno de comprar mi regalo para mi "Amiga Secreta" que creo que no es tan secreta, bueno, que más da, quiere un balón de soccer y menos mal que no es muy difícil de conseguir ya que cuando veía las caras de mis hermanos a la hora que llegaban a casa me asusté un poco ante la idea que yo también iba a terminar así.

Entré en una tienda de pelotas ¡enorme! pero no me sorprende su tamaña ya que el letrero decía "Absolutamente todo tipo de pelotas, no hay pelota que no encuentre en esta tienda" ¿Porqué me parece que otra persona que yo conozco también a venido a este lugar?... no creo, son ideas mías.

Me acerco al vendedor de la tienda para luego preguntarle

-¿Dónde están los balones de soccer?

-Del aquel pasillo a la izquierda- me dirigí hacia donde me indico el joven alto y cuando llegué vi cientos y cientos de balones de soccer de diferentes colores y tamaños, caminé por el largo pasillo hasta ver un balón en particular, era color verde limón con manchas blancas, algo raro, según yo, pero era bonito, y perfecto para ella, después de todo era su color favorito, estaba a punto de tomar el balón pero por alguna razón no quería, sentía que algo malo iba a pasar, mire hacia todos lados para ver si había algo o alguien que me impidiera comprar el balón pero no había nada, luego de dejar de lado mi "miedo" tome el balón para después ir corriendo a la caja registradora antes de que, según yo, algo pase, cuando llegué corriendo el hombre alto de antes me miro algo raro pero no me importó, le di el balón, lo pagué y me fui de allí, todavía tenia el presentimiento de que algo iba a pasar, lo cual era raro.

Estaba caminando en dirección a mi casa cuando en una tienda de videojuegos vi uno en particular "¿Que acaso ese tal juego de Resident Evil no era el que ella había dicho que quería?", entré a la tienda para luego acercarme al vendedor

-¿Cuánto cuesta ese videojuego?- pregunté algo esperanzado de que costara por lo menos 80 dólares pero...

-El de Resident Evil cuesta 200 dólares- ¡Rayos!, con la justas había traído 100 dólares

-¿No podría hacer algo para que me lo de?- ya que, le iba a dar a la verdecita lo que tanto quería, seria mi buena acción del año

-Mmm... pues, las ventas han bajado un poco este mes de diciembre y mis torpes empleados no han logrado que suban, así que si puedes hacer que hoy día ganemos por lo menos 500 dólares te daré el videojuego

-¡Trato!- acepté, era una buena oferta

Kaoru

Bueno, ¿que puedo hacer?, me tuve que resignar a comprarle un regalo para el idiota #1 del país, total, no tenia opción, esperen, ¿Qué era lo que quería? así, un par de pesas pero... ¿Porqué alguien pediría de regalo un par de pesas? bueno, todo se puede esperar de él, me dirigí a la tienda en donde vendían esas cosas pero cuando entré

-Disculpa niña, este lugar es solo para personas rudas y fuertes, no para niñatas como tu- ¿perdón?

-Disculpe señor fortachón y peludo, yo solo vine a comprar- le respondí molesta, ¿quien se creía para hablarme así?

-Lo siento mocosa no puedes pasar

-¿Quién lo dice?

-Lo digo ¡yo!- pero que egocéntrico

-No importa, buscaré un lugar mejor- le dije para luego empezar a salir de allí

-Claro, vete, ¿Qué se puede esperar de una niña tan débil?- Ah no, estaba ves si se paso, me di la vuelta lentamente para luego fijar la vista en el fortachón con una mirada asesina, nadie, repito, ¡NADIE!, ¡ME DICE DÉBIL!

-Dime débil, una ves más- dije amenazadoramente, pude ver como el fortachón temblaba de miedo, ahora ya no eres tan rudo ¿no?

-¡Débil!- aún así lo dijo, que "valiente"

-Ahora verás- le dije acercándome a él poco a poco

Butch

-Disculpe joven, el videojuego de Transformers ¿Cuánto está?

-50 dólares- respondí algo aburrido

-¿Y es divertido?

-Pues claro, yo lo he jugado como 5 veces- bueno, debía admitir que jugar videojuegos era mi fuerte

-Mmm... ¡lo compró!- me dijo dándome los 50 dólares

-Muy bien chico, sigue así y obtendrás el juego- me felicitó el dueño, ojalá vengan más clientes me quiero ir rápido de allí

Kaoru

-¡AHHHHHHHH! ¡ya suéltame!, ¡ya suéltame!- oía como el hombre "rudo" gritaba de dolor al hacerle una de las llaves que me enseñó mi papá, eso le pasa por llamarme débil -¡Por favor ya suéltame!

-La próxima ves que me llames débil te va ir mucho peor, ¡¿ENTENDISTE?!

-Sí, si lo entendí, por favor ya no me hagas más daño- me dijo llorando, y él alardeando que era "rudo y fuerte"

Lo solté para luego pasearme por la tienda, a ver si encontraba algo bueno, cuando vi unas pesas que eran para los brazos, leí la pequeña etiqueta que decía "Extremadamente pesado"

-Por favor, ¿Qué tan pesado puede ser?- me pregunté a mi misma para luego cargar las pesas, o mejor dicho, intentar cargar las pesas, no podía cargarlas, en verdad eran pesadas y mucho, fijé mi vista en el hombre peludo que derroté antes, este se había hecho una bolita y se estaba tambaleando de un lado a otro, él me miró y luego le dije

-Fortachón, ven acá- vi el miedo en su rostro a la hora de llamarlo y cuando se acercó... -Voy a necesitar tu ayuda- y al parecer me entendió ya que empezó a cargar las pesas aunque parecía que le costaba, debo admitir que es fuerte pero la inteligencia le gana a la fuerza, me fui donde el chico que atendía, compre las pesas, me puse de acuerdo con el fortachón para que llevase las pesas a mi escuela el día viernes y me fui a mi casa, la verdad no fue tan difícil conseguir las pesas y ojalá valga la pena.

Butch

¡Genial! ya iba 450 dólares solo me faltaba vender un videojuego más y me voy de ese lugar pero había un problema, ¡No venia absolutamente nadie!, ¿y ahora que hago?

-Vamos, que venga alguien- dije desesperado cuando de repente...

-¡Si!, ¡Porfín!- dije al ver entrar a un chico

-Este... ¿Cuánto cuesta el videojuego de Batman?

-100 dólares- dije sonriendo, porfín me iba a ir de ahí

-Mmm... no sé si comprarlo- ¿Cómo que no sabes?, ¡Cómpralo! -Ya que ¡Lo compró!- ¡Porfín!, recibí el dinero y cuando se fue...

-Deme el juego, cumplí el trato- le dije al dueño de la tienda

-Vaya, gracias chico, me has ayudado bastante, toma- me dijo dándome el videojuego, ¡Yupi! me voy a mi casita, esta iba a ser mi buena acción del año y espero valga la pena

MilaBela