9

318 43 0
                                    

"¡Rosejay, al fin llegas!" Katrina la saludó en cuanto se sentó a su lado. Terry la acompañaba, sonriente y con unas cuantas manchas de comida en las mejillas. "¿Acaso te has topado al Barón Sanguinario en el camino? Porque esa cara que tienes..."

Rosejay miró por encima de su hombro, asegurándose que nadie les prestara atención.

"Clayton y Snape discutían en el pasillo" murmuró, inclinándose. Terry pegó un brinco. "Algo no está bien ahí."

"En mi primera clase, Snape casi me lanza un libro cuando no supe usar los pelos de unicornio" dijo Terry, temblando.

Katrina la miró, pensativa.

"Snape me da miedo, y es cierto que últimamente parece estar encima de Clayton" habló ella. "El otro día, cuando salíamos de clase, Snape apareció de la nada y lo acusó de no haber cumplido con su tarea y lo hizo ir con él. ¿Entiendes lo que quiero decirte, no?"

Rosejay frunció el ceño. Miró a Terry, él estaba igual. Katrina suspiró ante su confusión.

"¡No había dejado tarea para ese día! ¿Ven la falla en su argumento? Obviamente sólo buscaba una excusa para tener a Clayton vigilado."

"Pero, ¿por qué?"

Katrina se encogió de hombros.

"Quizás deberías preguntarle tú."

Rosejay se volteó, y en efecto, Clayton iba entrando a la habitación. Caminó directo a su mesa, con el rostro lleno de golpes y una herida pronunciada en sus labios.

"¿Qué le ha hecho eso en tan poco tiempo?" Rosejay observó como los estudiantes cercanos a él murmuraban respecto a su aspecto. Pero si mal no recordaba, él no lucía así cuando lo vio como Snape...

"Rosejay, no sé qué es lo que pienses, pero no te atrevas a..."

La puerta se abrió de un crujido, y el profesor Quirell ingresó al salón con una genuina expresión de horror y el turbante torcido.

Se acercó hasta Dumbledore y chilló:

"Un trol... En las mazmorras... Creí que debía saberlo."

Cayó al suelo, inconsciente, y los profesores empezaron a indicar a los prefectos que llevasen a los estudiantes de vuelta a sus salas comunes.

Katrina jaló a Rosejay del brazo, mientras ésta se esforzaba por mantener el contacto con Clayton entre la multitud que se abarrotaba en la entrada.

Lo perdió de vista rápidamente.

Aunque estaba segura de haber distinguido un atisbo de sonrisa en su rostro cuando Quirell había dicho lo del trol...

"¡La niña del baño!" Gritó de repente al recordarla, frenándose.

Terry puso una cara de horror.

"¿De qué estás hablando?" Katrina gruñó. "Tenemos que ir a la Torre, nos dijeron que..."

Rosejay se zafó de su agarre.

"Nadie le ha dicho a ella de esto" contestó. "¿La recuerdas? La niña de Gryffindor con mucho cabello y que no deja de hablar."

"Sí que no deja de hablar en clase" Terry comentó. "Me roba todas mis participaciones."

Su amiga negó.

"Rosejay..."

"Vuelvan a la torre y eviten que pregunten por mí" tomó las manos de Katrina y le sonrió, suplicante. "Sólo iré por ella y la llevaré con un prefecto. Todo estará bien."

Ella terminó asintiendo, y le dió un apretón amistoso antes de irse.

"Espero no tengas que usar ninguno de los hechizos que hemos visto en clase" dijo. "Odiaría hacer que Percy Weasley encontrase a su antigua novia con una niña que debía estar a su cargo. Sería un poco irónico ahora que lo pienso."

Terry soltó una carcajada.

"¿Eras novia de Percy Weasley?" Se mofó. Katrina lo pellizcó.

Rosejay rodó los ojos, y empezó a correr en dirección a los baños.

No se giró ni una sola vez,

y si lo hubiese hecho, no se habría encontrado con Katrina y Terry o algún profesor,

sino con Clayton, quién maldecía en voz baja al tiempo en que avanzaba en la dirección contraria.

Hacia el corredor prohibido.

Draco dormiensDonde viven las historias. Descúbrelo ahora