Primos (JB & AG) -PAUSADA TEMPORALMENTE-

Capítulo Veintitrés

Cuando abrí los ojos y me dí cuenta que estaba besando a la chica me aparte de inmediato.

-Vaya, eso no me lo esperaba. ¿Eso quiere decir que si te acostarás conmigo? -Cerré los ojos y pensé lo que acababa de hacer. Sus labio tenían el sabor de Ari, no eran tan buenos, pero cuando pasaba mi lengua por su labio ése salir salía, y el perfume era el mismo. Esta chica estaba utilizando productos que generalmente usaba Ari, y se había hecho incluso su delineado.

-Definitivamente no. No sé que pasó, pero no se repetirá. -Dije desesperadamente por irme de aquí. -No me acostaré contigo.

-Bien, pues sería una pena que el video que acaba de grabar Sofia llegara a manos de Ariana ¿No crees? -Me giré y vi a mi ex parada en el camino y con su celular en mano. Me sonrió antes de darse la vuelta e irse. La iba a seguir y obligarla a borrar el video, pero una mano me detuvo. -Tienes dos días para aceptar la oferta. Sino, el video le llegará a Ariana, y el video de ustedes en el auto llegará directamente a tu madre y a la de ella.

De un manotazo me solté y fui por el camino por el que Sofia había desaparecido, pero no estaba en ninguna parte. Me giré y la chica rubia ya no estaba, y Josephine con Esteban se habían esfumado.

-Ahora que hago. -Susurre cerrando los ojos.

Volví a casa y me tiré a la cama. No me iba a acostar con esas chicas, pero no quería que Ari viera el video, tampoco quería que nuestras madres se enteraran de lo nuestro, me alejarían de ella, y mi plan ya estaba bastante avanzado.

Había buscado información sobre la escuela de Ariana, y tenía una beca para terminar los dos últimos años de estudio -Los que a Ari le faltaban- En otro país, una opción era Canadá, y tenían un edificio cerca de mi universidad. Había hablado con mi tía y ella no tenía ningún problema en que Ari se quedara en mi departamento, si ella quería ir a estudiar allá. Eso significaba que me la podría llevar. Solo teníamos que hacer unos papeleos y listo, las notas de Ariana destacaban por lo que no tendríamos problemas.

Pero si nuestras madres se enteraban, todo caería. Estaba abrumado en mis pensamientos cuando me quedé dormido.

(...)

Unos besos alrededor de la cara me despertaron. Abrí un ojo y Ariana estaba sonriendome, rápidamente lo cerré y me hice el dormido. Escuché su suave risa antes de besarme la comisura de los labios.

-Ya sé que estás despierto amor. -Sonreí y abrí los ojos. -¿Qué tal dormiste?

-Mal. No tenía a quien abrazar, estaba solito. -Hice un puchero y ella me sonrió tierna.

-Correte. -Me hizo un movimiento con la mano y yo me alejé de la orilla y me puse de costado. Ella se puso más arriba que yo, me atrajo hacia ella y yo puse mi cabeza en su pecho y la abracé mientras ella me devolvía el abrazo y me acariciaba el cabello. -Son las nueve de la noche. Ryan fue donde Camila, sinceramente espero que no vuelva esta noche, así sabré que le fue bien. Hice la cena.

-Con razón huele maravilloso. -Me apreté más a Ari, sentí el olor que su cuerpo emanaba, era el mismo de la otra chica. No sabía si decirle lo que estaba ocurriendo. Si lo hacía tendría que contarle todo, quizás se enoje, pero no me sentiré tan culpable. Estando sólo no se que hacer.

-Ari. -Sije suavemente para llamar su atención.

-¿Si? -Me dijo con una sonrisa inocente. No quería borrar esa sonrisa de su rostro, no quería que se preocupara, no podía. Mi lado protector ganó.

-Te amo. -Su sonrisa se agrandó.

-Te amo. -Me susurró de vuelta y bajó hasta quedar a mi altura. Me miró a los ojos e hizo una mueca. -Quiero saber que te tiene preocupado.