Capítulo Cuarenta

2.1K 230 23
                                    

He llegado a la conclusión de que estoy enloqueciendo. De verdad enloqueciendo.

Hablar con Bella resulta ser bastante enriquecedor, sus consejos me parecen muy utilices y a la vez no. Seguir a mi corazón nunca fue precisamente la mejor opción para mi, precisamente porque nunca supe como hacerlo.

Pensé que ir a Boston era una buena idea, y resultó ser todo lo contrario. Todo este tiempo me ha parecido que he perdido el tiempo en cosas tontas. Sé que debería de enfocarme en mi trabajo y nada más. Visitar a mi familia, salir con mis amigos y no volver a preocuparme por lo que un hombre hace o no. No quiero volver a ser esa chica dependiente de lo que su novio hace o no hace.

No quiero volver a ser la esclava de alguien.

Quiero empezar de cero, de nuevo, pero esta vez lo quiero hacer bien.

— ¿Estás lista? —me pregunta Tom quien se encuentra junto a mi, mientras esperamos a que todo este listo con nuestro vuelo a Washington.

—Lo estoy, ¿tú? —lo miro, haciendo que él sonría.

—Lo estoy. ¿Vamos?

Él toma mi mano para ayudarme a levantarme y caminamos hasta nuestra puerta en donde un auto nos espera para subir al avión, nuestro avión.

Dentro, intento relajarme. Quiero pensar en lo que estoy haciendo, voy a firmar contratos, a preparar negocios, no puedo defraudar a mis padres, no de nuevo.

—Tom, ¿Carly no ha dicho nada por el viaje?

— ¿Qué podría decir? Es un viaje de negocios y voy contigo, no tiene razones para estar molesta o celosa, si es a lo que te refieres —río, principalmente porque me parece graciosa su manera de responder.

— ¿Cómo ha sido tu relación con ella?

—Turbulenta. Llena de cosas hermosas y muchos desafíos. Fue difícil conquistarla, al principio tuve mucha competencia, supongo que mi encanto natural fue lo que me ayudó.

— ¿Has pensado en lo que me habías dicho? Sobre proponerle matrimonio.

—Si, ambos lo hemos analizado y creemos que tal vez podría ser dentro de un año o dos. Cuando estemos por completo establecidos y preparados.

— ¿Han pensado en tener hijos?

—Si, ella quiere uno o dos, pero para serte completamente honesto, a mi me encantaría tener un equipo de basquetbol —vuelvo a reír y me relajo.

Hablar con Tom sobre su relación de casi una década es bastante refrescante, me hace ver las cosas de un modo distinto. El amor existe eso es seguro, pero realmente quiero saber cuantos corazones rotos debo soportar antes de encontrarlo.

—Serán una familia hermosa.

—Tu... bueno, no sé si quieres hablar del tema, pero ¿cómo te has sentido desde... ya sabes, el juicio y todo eso?

—Lo estoy intentando superar. Se supone que en unas semanas debo asistir a un juzgado en donde sentenciaran a Blake y no sé si esté completamente preparada para eso. Juré olvidarme de él, pero mientras los días pasan más anciosa me vuelvo y el miedo me mata, Tom. Se que él se merece lo peor, pero no puedo simplemente verlo en su condición y pensar que pasará el resto de su vida en prisión.

—Él hizo cosas malas, Phoe. Desde que éramos unos adolescentes, él siempre hizo cosas indebidas. No sé si tu hermano alguna vez te contó su historia con él, sus altercados, y básicamente la razón del porqué se odiaron siempre.

—No, Blake me dijo que tuvo problemas con él por causa de Sophie, pero nunca profundizamos el tema porque él no quería hablar de eso. Theo nunca me dijo nada sobre ellos tampoco. Solo que ambos se enamoraron de ella.

Phoebe, Schlesinger IIIDonde viven las historias. Descúbrelo ahora