Phoebe, Schlesinger III

Capítulo Veinticinco

Hace mucho tiempo, cuando era niña, tomé lecciones de danza. Nunca fui buena en lo absoluto, pero papá se encargó de que me diese cuenta mucho tiempo después de intentarlo. La primera vez que bailé sobre un escenario me sentía confiada porque mis padres siempre me decían que era la mejor bailarina de toda la compañía, lo cual, por supuesto era una mentira, pero yo nunca lo supe hasta mucho tiempo después.

Cuando le pregunté a mis padres que por qué me habían dejado hacer semejante ridículo, solo me respondieron "Porque queríamos que lo intentaras antes de que algún tercero te dijese que no podías"

No estoy segura del porqué estoy pensando en eso en este momento, pero me siento tan derrotada ahora, que eso fue lo primero que se me vino a la mente.

Por alguna razón entré en una especie de colapso nervioso, y aprecio el hecho de que Josh no se volviera loco conmigo, a decir verdad, ni siquiera lo reconozco. La manera en la que me miraba mientras me decía que no podíamos estar juntos porque no sabia que decisión tomar no solo me confirmaba mis temores, ya no soy la única en su corazón y se en mis adentros que tengo que respetar eso, tengo que respetar su decisión de no querer estar conmigo o tal vez si, pero no ahora.

Éste no es el Josh del que me enamoré cuando aún era una niña. Él hubiese vitoreado, hubiese dado saltos enérgicos y me hubiese besado de manera efusiva sin importar que.

Después de llorar de manera tan patética frente a él, me encerré en su baño y llevo aquí lo que creo son unos veinte minutos aproximadamente. Necesitaba un momento a solas, pero no me quería ir, porque me siento tan estúpida que creo tener esperanza de escucharlo golpear la puerta diciendo que todo fue una mala broma y que él me ama de la misma manera en que yo lo hago.

Pero no ocurre... y yo sigo sentada en el piso del baño con las esperanzas vivas...

— ¿No piensas salir? —dice del otro lado de la madera, pero no quiero responder. No quiero aceptar la posible derrota, no quiero que mi debilidad sea más que yo —Debes salir, Phoebe.

No hice más que jugar con los dedos de mis manos después de un rato en donde creo mis lágrimas se secaron por completo. Pienso en salir, pero cuando mi mano toca la perilla la voz de Josh se hizo presente, pero sus palabras no son hacia mi.

—No estoy diciendo que sea algo peligroso, es solo preocupante —dice, pero el silencio que se genero después me hace creer que habla por teléfono —. No me refiero a que hayamos hecho ese tipo de algo, Schley.

La única persona a la que Josh se dirige como "Schley" es a mi hermano. Josh está hablando con Theo.

—Ella solo se encerró en mi baño, lleva ahí cerca de media hora y no logro que salga —silencio de nuevo. Pienso de nuevo en salir, pero realmente quiero escuchar lo que él tiene que decir, al menos indirectamente —. Solo nos besamos... —dice después de lo que creo es un sonido de frustración —. No quiero que me des sermones Theo, solo necesito que alguien por favor le ayude a tu hermana —ese maldito silencio solo me hace creer que Theo o lo está reprendiendo o realmente está decepcionado de mi... —. Mira, no quiero ser malo con ella, la quiero demasiado como para hacer eso, pero solo necesito tiempo, no puede seguir haciendo estas cosas, y para ser honesto me da lastima verla tan mal. Al principio pensé que, como los adultos que somos, solo quería una buena amistad por los viejos tiempos, pero ella realmente quiere volver conmigo, y sabes que esa herida es muy delicada en mi, Theo. Si le doy la oportunidad de adentrarse se que caeré y mi vida ha estado muy turbulenta últimamente como para que le añada un triángulo amoroso a la receta. La quiero, ella es muy importante para mi, pero Lara también lo es y honestamente no tengo idea de que hacer.

Sin pensarlo más y con el mayor nudo en mi garganta salgo del baño viendo a Josh de espalda a mi con su teléfono en su oreja derecha moviéndose.