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Capitulo 6. Dejame cuidarte

Hotaru se encontraba recostada en la cama, Matsuoka retiró  el termómetro de sus labios, mientras que Kanae le colocó una compresa fría en su frente.
   — Su temperatura es algo alta pero con esta medicina y reposo Hotaru estará bien, creo que sería bueno que le cambiaras la ropa, la que trae puesta está húmeda por todo lo que ha sudado.
   — Claro ahora mismo cambiare su ropa, por cierto debo pedirte disculpas por los problemas que te ocasione hace tiempo en tu trabajo — Respondió apenada.
   — No te preocupes, gracias a ello pude conocer a Hotaru — Respondió sonrojado.
Kanae vio la manera en que Matsuoka reaccionó al decir eso.
— Ya veo, con que es eso — Se dijo a sí misma  y una ligera sonrisa se dibujó en su rostro.
   — ¿Qué sucede?
   — Desde que Hotaru los conoció  es más feliz que antes,  bueno siempre ha sido una chica muy animada y nunca se da por vencida, pero desde que juega juegos de supervivencia emana un brillo diferente.
   — ¿Brillo diferente?
   — Si pero eso es algo que sólo las chicas entendemos, solo puedo decir que la Hotaru de ahora es muy distinta a la Hotaru que conocí hace tiempo — le guiñó un ojo.

No comprendió porque pero Matsuoka se sonrojó.
— Me alegra que Hotaru tenga a alguien que la quiera y la proteja.
— Al principio creía que era un poco rara, ¿Porque una chica usaría ropa de chico? ¿Porque siempre animaba a los demás? Siempre con ese sentido de justicia, castigando a las personas que fueran en contra de las reglas, por más que lo intentara no lograba comprenderla,  ¿Que ganaba haciendo todo eso? Ni siquiera quería la aprobación de los demás, fue ahí que me di cuenta que Hotaru era una una chica realmente auténtica que no esperaba nada a cambio — Dijo Kanae con una cálida sonrisa en su rostro.

   — ¡Así que no se atrevan a lastimarla o romperle su corazón porque se las  verán conmigo.
   — ¿Ro-ro-romperle el corazón? Jamás seriamos capaces de hacerle algo así a ella, aparte Hotaru no nos mira de esa forma así que no debes preocuparte por eso — Dijo desanimado.
Kanae sonrió y dijo:
— ¡Claro si tú lo dices Matsuoka san!, sí me disculpas voy a cambiarle la ropa a Hotaru.
— ¡Espera! ¿Qué quisiste decir con eso? — Dijo pero Kanae ya había entrado a la habitación de Hotaru.

Tiempo después Kanae salió de la habitación
   — ¡Listo, termine! — En ese instante su celular sonó — ¿Podrías cuidarla un momento? Tengo que contestar esta llamada.
   — Claro no hay problema.
Matsuoka entró a la habitación y se acercó a Hotaru, y tiernamente tocó su frente.
   ~ La fiebre ha bajado un poco, lo mejor será cambiarle la compresa por otra~ Pensó.

En ese momento Hotaru despertó, su rostro aún se encontraba algo rojo por la fiebre.
   — Hotaru ¿Cómo te sientes? — Preguntó.
   — ¡Tachibana es muy feliz por haberlos conocido!
   — No-no-nosotros también estamos felices de haberte conocido —Respondió apenado.
   — Para Tachibana todos son muy especiales,  especialmente tú.
Hotaru rodeó con sus brazos el cuello de Matsuoka y lo jaló hacia ella para después besarlo tiernamente en los labios, él no supo cómo reaccionar en ese instante solo sintió como su rostro se ruborizaba por completo, cuando finalmente sus labios se separaron, Hotaru esbozó una tierna sonrisa, soltó a Matsuoka y volvió a dormir.

Matsuoka está totalmente en shock no podía creer lo que acaba de pasar. En ese momento Kanae entró a la habitación.
   — Perdón por la demora, era una llamada de mamá, ¿Todo está bien  Matsuoka san? Tu rostro esta  completamente rojo.
Matsuoka se levantó de la orilla de la cama y camino hacia la puerta con el rostro agachado.
   — ¡Na-na-nada no me pasa nada! Yo v-v-oy al baño a traer un poco de agua para la compresa.
~ Que extraño, hace unos momentos lucia bien, tal vez esta realmente preocupado por Hotaru~ Pensó Kanae.

Mientras tanto Matsuoka se recargó en la puerta del baño y lentamente se dejó caer sobre ella hasta sentarse en el suelo, tiernamente acaricio sus labios recordando el momento del beso.
   — ¿Qué te está pasando Masamune — Se dijo a sí mismo.
Yukimura entró al departamento de Hotaru y exclamó:
   — ¡¡Matsun ya estamos de vuelta!!
   — ¡Tooru no entres como si fuera tu casa! Y ¿Porque yo soy el que carga las bolsas más pesadas? — Exclamó  Haruki enfadado.

En ese momento Kanae salió de la habitación de Hotaru.
    — Que bueno que están de vuelta, algo le pasa a Matsuoka san, tiene rato que está encerrado en el baño y cuando lo llamo no contesta.
Yukimura corrió hacia la puerta del baño y empezó a golpearla mientras gritaba:
   — ¡¡Mattsuuuuun estás bien!!, ¿Dime que te hizo esta horrible mujer?
— ¿A quién le llamaste horrible mujer?
— ¿Qué le hiciste a mi Mattsun? — Exclamó mientras la apuntaba con el dedo.
   — ¡Yo no le hice nada, estupido pervertido! Lo deje cuidando a Hotaru por un momento en lo que contestaba una llamada y cuando regrese actuaba muy extraño ¿Creen que se haya contagiado?
— ¿Lo dejaste solo con Hotaru?— pregunto Haruki.
— Si pero solo fue por un momento, ¿Acaso le hizo algo pervertido?
— Naa no creo que Masamune se aproveche de una chica inconsciente y menos de Hotaru — Respondió Haruki.

En ese instante la puerta se abrió golpeando a Yukimura en el rostro.
— ¡Yo- yo-yo sería incapaz de hacerlo algo a Hotaru, solo estaba cuidándola! Estaba cambiando el agua pa-pa-ra  la compresa.
— ¿Y dónde está el agua?— Pregunto Haruki con cierto escepticismo.
— ¿El agua? Ahh si el agua pues cuando Yuki gritó me asusto y la tire, si la tire — Respondió totalmente nervioso — ¡Ah trajeron comida yo-yo les ayudaré aguardarla y preparare algo a Hotaru! — Tomo las bolsas que Haruki había dejado en el suelo y entro a la cocina rápidamente, Haruki lo miró con recelo.
   — Yo iré por el agua que el estupido de Masamune olvido — Haruki entró al baño.
   — ¿Ninguno de los dos planea ayudar a su pervertido amigo a levantarse del piso? — Pregunto Kanae al verlo tirado en el suelo debido al golpe que recibió con la puerta.
   — ¡Mattsuuuun, Haru Haru, ayudenmeeeee! — Exclamó lamentándose.

Al ver que ninguno de los dos iba en ayuda de Yukimura, Kanae puso los ojos en blanco y exclamó con fastidio:
— ¡Ahh! Voy ayudarte pero solo porque ninguno de tus amigos lo hizo.
En una sugerente pose le extendió la mano para que él pudiera levantarse, pero desde el ángulo donde él se encontraba resaltaban los senos de Kanae.
La tomo de la mano para levantarse y dijo:
   — ¡¡Gracias por la buena vista!!
Cuando Kanae se percató de que Yukimura le miraba los senos, su cara se tornó roja y soltó su mano dejándolo caer de nueva cuenta.
— ¡¡Auchh!! — Exclamó dolorosamente.
— ¡Eres un pervertido de lo peor, no sé porque decidí ayudarte! — Dijo apenada  y se retiró al cuarto de Hotaru.

En ese momento Haruki salió del baño.
— No sé que hayas hecho, pero no planeado ayudarte — Exclamó y entro al cuarto de Hotaru.
— ¡Maattsuun! ¿Donde estás, porque no vienes ayudarme! — Grito tirado en el piso.

Continuará .......