Petición

1.7K 160 49
                                    

Desperté de la manera más incómoda posible, dormí en un auto, con Kyle abrazándome, ambos en los asientos de atrás. A pesar de que evadí el tema y le pedí que me soltara, insistió en quedarse a dormir allí, sentí su erección contra mi toda la noche, sabía que él estaba incómodo, y realmente no tenía intenciones de hacerme algo.

El sol me daba en toda la cara, y el calor se me hizo agradable, porque no era sofocante.

- Es un lindo día. - Se levantó primero Kyle y salió del auto, ayudándome a bajar a mi.

- Me duele todo el cuerpo. - Me quejé.

- Lo siento, la próxima vez traeré una tienda para acampar. - Me acorraló contra el auto y estuvo a punto de besarme... De nuevo, pero tapé su boca con mi mano, para evitar cualquier situación...

- ¿Qué haces?

- Quiero besar a mi chica.

- No soy tu chica.

- ¿No me darás una oportunidad? - Su cara fue como de ofensa y luego se tornó triste, ¿Está hablando en serio?

- Kyle... No lo sé, ni siquiera sé si me quedaré aquí o... - Me quedé callada, había abierto la boca en el momento menos indicado.

- ¿O? - Me miró confundido. - ¿Te irás a algún lado?

- No aún, ya sabes, me refiero a la universidad y todo eso. - Eso es, excusas.

- Oh, pero, tenemos tiempo para arreglar todo eso Hayden... - Besó mis manos. - Podríamos ser lo que el otro está buscando.

- Kyle...

- Sólo piénsalo, aunque sea...

- Lo... Lo haré. - Suspiré finalmente.

- Está bien, ¿Puedes llevarme a casa?

- Claro que si, preciosa. - Me robó un corto y casto beso y fue a abrirme la puerta para ayudarme a subir, si algo es seguro aquí, es que él es un caballero.

(...)

Duchada y un poco más relajada, me dispuse a descansar, pero la puerta fue tocada. Vamos, ¿Qué les cuesta dejarme descansar un rato?

Abrí la puerta y quise cerrarla de nuevo, casi al instante cuando me di cuenta de quién era...

- No, por favor. - Detuvo la puerta.

- Estoy muy ocupada, si me disculpa.

- Hayden, espera. - "Hayden espera", maldito sea el día en que me enamoré de este hombre y me dediqué a gozar y empaparme de su voz.

- ¿Qué?

- Por favor, hablemos.

- Ya hablamos lo que teníamos que hablar.

- No es verdad.

- Claro que si.

- Hayden.

- Andrew.

- Lo dices como si fuera alguien que te cae mal, que desearías ver muerto.

- O no haber conocido. - Se que tal vez era muy estúpido lo que hacía.

Bueno, a estas alturas de la vida, realmente creo que soy muy estúpida.

- Hayden. 

- Andrew por favor... - Rogué. - Vete... Ya, no me lo hagas más difícil.

- Si es difícil es porque aún me ama.

- Tal vez sea así, pero eso no importa.

- Claro que importa. - De repente se encontraba dentro de la casa. - Nunca nadie me había importado tanto como usted...

Señorita Inocencia [Andy Biersack y tu] (EDITANDO).Donde viven las historias. Descúbrelo ahora