La Sobrina de mi Vecina [CAMREN]

XXXVIII

P.O.V Lauren

Desperté de nuevo y oí personas hablando, una de las voces era la de mi tía y otra era la de Ally, supongo que la tercera era la del doctor, no abrí los ojos para oír lo que decían...

D: -El coágulo que hallamos no es por el golpe reciente su cabeza.

M: -A qué se refiere doctor?

A: -Es algo grave?

D: -Ella ha tenido otro accidente recientemente?

M: -Sí, cayó de un árbol, pero no creímos que fuese para tanto, así que no vinimos al hospital!

A: -Santo Dios! Cómo fue? Por qué no me contó nada?

D: -Tal vez eso haya sido el causante, pero tranquilas, no es grave, sólo quería informarles que fue por esa razón que la metimos a cirugía, ya ella está bien sólo falta que despierte y ver si todo está bien y le daremos el alta.

Oí a mi tía y mejor amiga suspirar, me oí a mí misma suspirando. Cuando oí pasos alejándose y la puerta abrirse para luego cerrarse, supuse que ya todos habían salido y abrí los ojos y me encontré con un par de ojos marrones observandome.

-Ally! Me asustaste!

-Oíste todo? Acaso te faltan jugadores en la cabeza? O con el golpe que recibiste se te perdieron las neuronas? Por qué no me habías contado nada? Por qué no habías venido al hospital? -realmente estaba molesta. Nunca la había visto así.

-Hey! A eso iba hoy a tu casa! Te lo iba a contar, además hablar de otras cosas! Y no me revisé porque tampoco pensé que fuese para tanto! Sólo tuve amnesia por unas horas creo. -dije defendiéndome.

-Sólo un par de horas Jauregui? Sólo? A veces agggg! -dijo levantando sus brazos al aire y me reí.- de qué te ríes? Estoy muy molesta contigo! Actuas como una niña que necesita cuidados aún! -dijo exasperada.

-Sólo sé que serás una buena madre Ally, gracias por estar aquí y por cuidarme. -entendí mi mano para que la tomase.

-Es que... Yo te amo Lo, después de lo que pasó con tus padres yo estuve ahí contigo siempre, somos hermanas de corazón y realmente me preocupo por ti. -dijo suspirando y tomando mi mano.

-Lo siento sí? Prometo que desde ahora si me entra una astilla en el dedo o me doy con el dedo meñique del pie con algún mueble o lo que sea te llamaré y te lo contaré, pero ya no estés preocupada, estoy bien! -le regalé una sonrisa dulce.

-Aunque eso haya sido una respuesta con un toque de burla, te agradecería que me cuentes incluso si te salen caries! -dijo ahora ella riendo.

Nos quedamos ahí hablando un poco más hasta que alguien abrió la puerta y fijé mi vista, era mi tía, pero en su rostro no había preocupación ni tristeza, ella estaba feliz, se acercó rápido y me dio un abrazo, Ally dio un paso atrás.

-Mi niña ya va a poder salir de aquí! -dijo mi tía alegre.

-Sí? -preguntamos Ally y yo.

-Sí, el doctor ya viene para verte y luego ya vamos a casa, adelanté los papeleos para salir cuanto antes de aquí. -mi tía sabía perfectamente que yo odiaba los hospitales.

-Gracias tía! Estar encerrada aquí todo un día es insoportable. -dije sonriendo.

-Un día? -dijo ella riendo- llevas aquí una semana y media cariño! -mis ojos se abrieron como platos. Una semana y media? Tanto así? Miré a Ally y ella sólo asintió.

-Pero, cómo? -dije confundida.

-Quedaste inconciente desde que llegaste amor, sólo despertaste ayer. Nos tenías muy preocupadas! -dijo acariciando mi mejilla. Ahora comprendí el enojo de Ally, ahora entiendo por qué sentía mi cuerpo tan cansado.

-Ya quiero ir a casa. -dije suspirando.

-Pronto cariño, además, hay alguien que quiere verte también. -dijo guiñándome un ojo.

-Quién? -quise saber, pero entró el doctor y pidió para que mi tía y Ally abandonasen el cuarto...

XXXVIII