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IMAGINA #26

Imagina que hoy es un día en extremo lluvioso, como si una tempestad estuviera suelta fuera de casa. Tus padres se encontraban de viaje y tu hermano mayor se había quedado a dormir en casa de unos amigos,a lo que te encontrabas sola. Comenzabas a sentirte a gusto y a acostumbrarte a la soledad, era muy tranquila, sin molestias, y mejor aún, sin preocupaciones escolares, las mejores vacaciones que podrías haber tenido. Tomar el té, enrrollarte en una manta, comer panquesitos de mora azul, mientras estabas votada mirando la televisión, la saga completa de tus peliculas favoritas. Ibas en la parte favorita de la película cuándo el timbre de tu casa comenzó a sonar, entonces te preguntáste dos cosas: ¿quién era lo suficientemente estúpido cómo para andar fuera con ese diluvio? Y no la menos importante ¿quién osaba de interrumpir tu momento de paz? Acomodaste tu bata poniendo encima un sweter holgado y metiste tus pies en las pantuflas de patitas moradas de monstruo. Mientras tiritabas del frio al ir a abrir la puerta se te escapó un estornudo, al abrirla, una voz muy dulce dijo: -salud.
Te quedaste pasmada al ver a un chico en extremo adorable delante de tí, su bufanda tapaba sus labios, básicamente la mitad de su cara, pero su nariz lucía rojita al igual que sus mejillas. Su cabello castaño oscuro estaba un poco humedo a causa de la lluvia.
-Gracías.- respondiste mientras tus piernas temblaban de frio, o tal vez por tender a semejante chico delante de tí.- ¿que deseabas?
-Hola _____, realmente no sé di me recuerdes pero yo a tí si, pero soy mejor amigo de tu hermano NamJoon, Park Jimin, estudiamos juntos desde el jardín de infantes.
-Jimin...Jimin... me suena ese nombre.- buscabas entre tus recuerdos de donde te sonaba ese nombre.- ¡Ya! ¡Eres Jiminnie! El chico que siempre que venía a casa con Nam me traía gomitas de ositos rojos.
El chico sonrió ante mi reacción provocando que su bufanda cayera dejando al descubierto sus gruesos labios curvados en una sonrisa. No sólamente era adorable, si no también muy atractivo y varonil.
-Veo que también me recuerdas.- no dejaba de sonreir.- vine buscando a NamJoon, recién eh llegado de Busan, me quedaré unos días en la ciudad.
-Eso es genial, ¡ahhh disculpa! No te eh invitado a pasar, por favor entra si no es que quieres mojarte por completo.
Jimin hizo caso y se metió cerrando la puerta detrás suyo.
-Vayamos a la sala, hace más calorcito alla por que eh prendido la calefacción.
Al llegar Jimin se desprendió de su mochila, su campera y bufanda, quedando solamente con una sudadera gris. Era todo un monumento.
Ambos nos sentamos en un sillón y comenzamos a platicar. Jimin me contó que se quedaría con nosotros en casa mientras estaba en la ciudad, obviamente tenían el permiso de mis padres ya que ellos conocían al chico desde que básicamente era un niño; pero por la visto a mi muy ingenioso pero torpe hermano se le había olvidado que él llegaba hoy y que tenía que pasarlo a recoger a la central. Luego de ello le marqué a Nam diciendole que Jimin había llegado, según él estaba algo ocupado -seguramente con su estúpida novia- lo siento pero yo no creía eso de la "pijamada" con sus amigos. Prometió llegar antes de la cena.
Jimin subió y deposito sus cosas en la habitación de huespedes. Mientras el hacía todo eso, me serví otra taza de té y una más para Jimin, saqué más panquesillos y me enrollé en la manta. La regadera del piso de arriba comenzó a sonar, seguramente decidió tomar una ducha para que no enfermara después de estar bajo la lluvia. Minutos más tarde bajó usando unos pans negros y una camisa negra con estampado de estrellas blancas alrededor del cuello y sandalias. Su cabello le caía por la frente aun goteando un poco.
-¿Como te sientes?- pregunté.
-Mucho mejor, la ducha me ayudó muchísimo ¿puedo?- preguntó señalando el lugar al lado mio, a lo que yo asentí...tener a Jimin a mi lado me ponía un tanto nerviosa.- estás viendo (tu pelicula favorita) también me encanta.
-¡Encerio!
-No.- se puso serio y luego comenzó a reir.- es broma, me encanta.
Lo chistoso es que en vez de quedarse viendo la película comenzaron a charlar. Lo único que llenaba el lugar era el volúmen bajo de la tv, la lluvia fuera de casa y la conversación entre el muchacho y tú. Hubo un momento en el que Jimin se metió debajo de la manta quedando aun mas pegado a tí, al principio te tensaste mucho y te pusiste muy nerviosa, luego se te pasó y te acostumbraste a su calidez, el frío había desaparecido casí por completo.
-¿Sabes algo _____? Es realmente sorprendente lo mucho que has cambiado, antes eras una niñita muy tierna y dulce, amante de los dulces, sigues siendo así hasta ahora, pero a esepción que ahora eres una chica mayor sumamente hermosa, te vean por donde te vean.- su comentario te hizo colorar tus mejillas de un rojo muy notable, ¿como podía verte hermosa estando en fachas y despeinada?
-Igual estás cambiado Jiminnie.- mencionaste intentado que tu voz no tartamudeara al decirlo.- igual eres muy... atractivo.
-No se cómo decirlo, tal vez me llames loco pero desde el momento en que te ví abrir la puerta pense: esa hermosa chica debe ser la novia de NamJoon, y no sabes cuanto me alegro de que no fuera así, de que fueras su linda hermana menor.
-¿porque lo dices?-preguntaste nerviosa.
-Por qué en el momento en que mis ojos se cruzaron con los tuyos, supe que tu eres mi amor a primera vista ¿loco no crees?
No sabías que hacer, como actuar, te había tomado desprevenida. ¡cielos!
-Yo no sé...- el chico interrumpió tu frase al sentir una mano tomar la tuya y entrelazar los dedos con los tuyos.
-No digas nada ¿sí? Posiblemente NamJoon me quiera matar después de ésto, pero habrá valido la pena.
Y sin previo aviso con su otra mano acariciaba tiernamente tu mejilla sin quitarte la mirada de tus ojos, estaban conectados mirándose el uno a el otro. Posó su mano detrás de tu cuello, y gentilmente fue acercando su rostro a el tuyo. No sabías como reaccionar, estaba en shock, se acercaban cada vez más. Cerraste los ojos hasta sentir el impacto de sus labios contra los tuyos. Querías desistir, pero el tipo besaba extremadamente bien, estaba siendo gentil y dulce contigo, a la altura de corresponderle el beso y ambos moviendo sus labios al compas de la lluvia. En ningún momento soltó tu mano, ni siquiera en el momento en que el beso se rompió por falta de oxigeno.
-NamJoon te va a matar.- fue lo único que dijiste al separse, el chico rió alto y luego beso tu mejilla.
-Sé de sobra que es sobre protector contigo, pero valdra la pena la golpisa.
El chico se pegó aun más a tí pasando su brazo por tus hombros abrazandote protectoramente, con su otra mano seguía sosteniedo la tuya. Recostaste tu cabeza en su hombro y el depósito un casto beso en tus labios seguido de tu frente.
-Me gustas _____, puede que parezca loco, pero realmente vine por tí, puedes llamarme pedófilo, pero siempre sentí una atracción mucho más que hermandad por tí, y ahora que ambos somos mayores, quiero intentarlo.
Entonces pensaste en todos los lindos tratos que te daba cuando pequeña, incluso era más afectuoso contigo que el mismo Nam. No es que Jimin fuera super mayor que tú, se llevaban cinco años de diferencia, pero ¡Dios mio! Si eso era un sueño, que por favor nadie me despierte.- pensaste.