Ian amaba a Jezziel. Con cada célula que su cuerpo poseía, con toda su alma. Por Jezziel estaba dispuesto a recibir una bala de acónito por el culo. Por esa misma razón se encontraba con el rubio entre sus brazos, repartiendo suaves caricias en su brazo izquierdo.
—No creo que sea una buena idea, Ian. Además, no es como que tengamos sexo.
—Precisamente por eso debemos decirle a tus papás —Jezz suspiró con cansancio. Conocía a su papá, se volvería loco. Al menos Eddie paps lo aceptaría, a regañadientes, pero lo haría.
—Mi papá...
—Yo hablaré con él. Estoy seguro que Edward le va a convencer, no te preocupes —Ian dejó un beso en su frente, y lo acercó más a él, para que después Jezz pudiera esconder la nariz en el hombro del mayor.
_
*
_Jezz apretó la mano de Ian con fuerza y su propia mano recibió el mismo trato. El menor sentía su corazón palpitar igual de rápido que el de Summers.
—No —pronunció con voz fría su papá. Edward estaba en shock, pero al ver el nerviosismo de ambos rubios y ver sus manos agarradas con fuerza, lo hizo salir de él y mirar a su pareja.
—Lo quiero, papá —pronunció Jezz con la voz temblorosa. Ian le hizo mirarle porque tal vez pudiera entrar en pánico y tener uno de esos raros ataques de ansiedad que a veces sufrían los Stilinski por herencia de Stiles.
—¿Estás bien? —murmuró al ver que su corazón palpitaba incluso más rápido de lo normal. Ese palpitar rápido no tenía nada que ver con los nervios. Cuando Jezz comenzó a desprender ese olor a frustración, Ian lo tomó de las mejillas.
—¿Jezz? ¿Qué pasa? ¿Qué tienes? —el instinto de Parker le hacía querer apartar a Ian de su hijo, más ahora que sabía que estaban juntos. Ed detuvo a Park y le hizo mirar la escena y quedarse sentado.
Ian abrazó a Jezz y colocó sus labios en la sien del menor, con su mano derecha dando masajes en su pecho.
—Respira despacio, Jezz —Parker observó atentamente la escena, y se dio cuenta que era la primera vez que Ian no llamaba a Jezziel por su nombre completo, sino por Jezz. Su hijo se agarró con fuerza al mayor y cuando logró estabilizar su respiración y latidos, Jezziel se apartó un poco.
—No me hagas separarme de él —Park sintió un nudo en la garganta —. Es mi compañero.
Y Park escondió el rostro en sus manos, porque eso no se lo esperaba. Realmente no esperaba que fueran compañeros.
—Parker... —susurró Ian —. De verdad que entiendo si dices que no estás de acuerdo. Pero también tienes que entender que si nos apartas, eso no va evitar que siga queriendo a Jezziel y él a mi
—Ian, sé que son compañeros, pero Jezz sólo tiene dieciséis —habló Ed por fin.
—Lo sé.
—No soy un niño, paps. Y muy pronto seré legal.
Edward y Parker simplemente se miraron a los ojos por unos cuantos segundos. Y Ed pronunció:
—No sé qué son, pero no van a estar realmente juntos hasta que Jezziel cumpla dieciocho. A partir de ahí, pueden hacer lo que quieran.
—Papá... —Jezz miró a Parker, pidiendo su opinión.
—Jezzi, realmente me importa una mierda con quien salgas, pero no cuando eres menor de edad, ¿vale? Sólo no quiero que hagan nada hasta los dieciocho. No los quiero ver juntos hasta que tengas dieciocho.
—Lo entiendo, en serio. Gracias —Jezz le sonrió a Ian.
_
*
_—No fue tan mal, eh.
Ian soltó una risa.
—No, no lo fue. Aunque me asusté con ese ataque de ansiedad.
—Lo siento.
—No importa. Pero tenemos que hablar, ¿vale? Seriamente —Jezz frunció el ceño —. Voy a tomarme en serio lo que tus papás dijeron. No quiero que cambien de opinión al ver que te dé un beso o algo así. Pueden separarme de ti y no lo quiero, no cuando estamos a dos años de estar realmente juntos.
Jezz lo golpeó con fuerza en el pecho, casi como veinte veces.
—¡No puedes hacer eso! ¿Por qué te vas a tomar tan en serio lo que dicen mis padres?
—Jezziel, entiende. No puedo tomar el riesgo de que hagamos algo que no les guste y no nos dejen estar juntos definitivamente.
—¡Pero luego cumpliré dieciocho y su criterio ya no van a contar! ¡Seré mayor de edad y podré decidir!
—¿Y no estar con tu familia? Porque no creo que me acepten y luego seré un omega y eso te hará querer dejar a tu familia y manada. No voy a permitir eso.
—¡Ian! —gritó Jezziel con enojo —. No lo hagas. No hagas esto, porque no voy a regresar contigo cuando tú quieras.
—Lo siento, Jezz, pero no voy a dejar que pierdas todo por mi culpa y por algo que puedo hacer frente a tus padres. No si puedo evitarlo —el mayor se acercó a él y le besó con fuerza. Jezz no pudo evitar llorar.
—Te quiero, no lo hagas —Ian se tragó un sollozo, pero no pudo evitar abrazar con fuerza a Jezziel al escucharlo llorar —. No termines conmigo, no me dejes.
—Te quiero, Jezz —dijo sobre su boca, saboreando lo salado de las lágrimas, acariciando con cuidado sus labios, intentando memorizar cada pliegue y cada zona —. Te quiero, te quiero, lo siento.
—Ian, por favor —sollozó el rubio, sujetando con fuerza al mayor.
—Tengo que hacerlo, lo siento. Te quiero —y con cada te quiero, Ian lograba lastimar cada vez más a Jezz, lograba romperle el corazón y el alma cada vez más.
—Ian, por favor, te quiero —lloró, y lloró con más fuerza al sentir al mayor separarse de él y dejarlo ahí, en plena calle, llorando y con el corazón roto.
Por primera vez, Jezziel estaba actuando como el niño que aún era.

ESTÁS LEYENDO
Teen Wolves [En Edición]
Hayran KurguAdvertencia: Esto NO es Sterek. La pareja sólo aparece brevemente en un par de capítulos Ser un adolescente de por sí es bastante complicado, pero ser un lobo adolescente lo es aún más. Sobre todo cuando perteneces a la familia Hale-Stilinski, donde...