Diego: Estás lista? -dijo golpeando suavemente la puerta del baño.
Roberta: -salió del baño en ese momento- Sí! Hace media hora preguntas lo mismo!
Diego: Ps sí pero me cada vez me decías que 5 minutos!
Roberta: Trata de vestirte con esta panza ¬¬
Diego: A ver ya... quedamos con los chavos hace ya casi 1 hora, vámonos -dijo dirigiéndose a la puerta para salir.
Roberta: Sí intenso -empezó a caminar hacia la puerta pero en ese momento su vista se nubló y la voz de Diego llamándola se oía lejana, sintió como sus piernas temblaban y no soportaban el peso de su cuerpo.
Diego se volteó al ver que ella no le seguía, alcanzó a verla ella con la mirada perdida y la cara pálida, parecía que iba a caer al suelo de un momento a otro, corrió hacia ella justo antes de que esto ocurriese.
Diego: Roberta! Roberta mi amor reacciona! -la cacheteó suavemente- Bebe... Roberta...
Roberta: Deja de pegarme tarado -dijo con voz débil- Estoy mareada... -la tumbó en el sofá y se sentó a su lado.
Diego suspiró resignado, se podía estar muriendo que ella seguiría con ese humor de perros. Al comenzar el embarazo se le hacía chistoso, además Miguel estaba igual que él de consentidor pero ella llegaba a su límite. La miró y seguía pálida, pasaron 5 minutos en silencio y ya su cara iba recuperando su color de siempre.
Diego: Te sientes mejor? -dijo acariciando su mano.
Roberta: Sí...
Diego: Bien. Quieres que llame y avise que no vamos? -dijo seco.
Roberta: Hmm... no... estaré bien...
Diego: Cómo quieras
Roberta sabía qué era lo que le pasaba. Era consciente de que era la peor embarazada del mundo y que Diego era el único capaz de soportarle todos sus berrinches, gritos, golpes y enfados. Pero, como todos, tenía su límite. Y ella creía haberlo superado hace ya tiempo. Se sintió culpable por eso. Acarició su mejilla y dijo
Roberta: Diego... yo...
Diego: Qué pasa? Te sientes mal de nuevo? Debía haber llamado al doctor en ese momento -se levantó para coger el teléfono y ella lo detuvo.
Roberta: No! Estoy bien... ven conmigo...
Diego: -accedió extrañado por la dulzura de su voz- Cla..ro... -y se sentó a su lado.
Roberta: Te quería pedir disculpas.... -dijo agachando la mirada- Sé que soy la peor embarazada del mundo, la más intensa, la más berrinchuda, la más...
Diego: ...bella -completó Diego antes de silenciar sus labios con un beso suave.
Roberta: -se separó- Pero Diego yo quería...
Diego: Ahá... -volvió a besar sus labios esta vez con un beso más intenso. Sabía lo orgullosa que era ella, y a él le bastaba la intención... sin embargo ella quería decirle algo más y se separó de nuevo.
Roberta: Espera -pusó sus dedos suavemente en los labios de Diego para separarlo- Déjame acabar... Ok yo... lo siento y... te prometo que me voy a controlar -dijo sonriendo.
Diego: -besó sus dedos- Echaba de menos esa sonrisa... -dijo sonriendo también- No te preocupes bebe... yo entiendo... pero si es verdad que podrías hacerme el favor de domar a esa fiera que tienes dentro, porque yo no puedo con ella... -dijo riendo con ella.
