Criada por ellos.

Capítulo 20 - Manos rapidas

Amanecí entre ronquidos, Dylan y Matt habían dormido en el colchón inflable y yo en la cama de mi hermano.

Ambos se abrazaban y roncaban, una escena digna de una foto. Me quise reír a carcajadas, pero primero la foto. Tomé mi teléfono y les tire una hermosa fotografía, que rápidamente mande por nuestro grupo de WhatsApp. Les brinque encima, haciendo que se sobresaltaran y después salí huyendo.

Me metí a la ducha, sentir el agua fría correr por mi cuerpo se sentía de lo mejor, pero el sonido de las cortinas correrse hizo que sacara mi cara de debajo del agua y mirara a la rubia que me miraba con una sonrisa pícara y coqueta.

- ¿Que haces, Layla? - espete furiosa. Ella se adentró a la ducha y me empezó a toquetear, con cualquier movimiento brusco yo caería, y sería peor. - ¡Dylan! - chille asustada. Mi prima era una feroz máquina de sexo bisexual y yo era su presa.

Dylan apareció y sacó a patadas a mi prima de allí, Matt estaba de frente a mí, mirándome sorprendido. Cierto, estoy desnuda. Pero el miedo no me dejo hacer más que abrazarme a mí misma y sentarme en el piso de la ducha, cabeza de polvo cerró el paso del agua, me tiro una toalla encima.

- Vamos, llegaremos tarde. - dijo mirando hacia afuera, pero tendiéndome la mano. - No pasó nada, cuando se te vaya el shock querrás matarla y yo o alguno de los 7 tendremos que agarrarte. - me puse de pie y enrollé la toalla alrededor de mi cuerpo. Tomé su mano y él me sonrió. - No eres tan mala como pensaba.

- Sigues siendo un idiota. - dije divertida y tomé el pomo de mi puerta. - Oye. - él giro a verme dudoso. - Gracias, cabeza de polvo

- De nada, diva. - rodé los ojos y entré.

En Semper High School

Las horas para el baile estaban contadas, las chicas eufóricas y los chicos viendo a quien invitar a salir, mientras que mi grupo y yo, estábamos como siempre, riendo y tirándonos comida, solo que con 4 personas más, estos eran Matt, Eckar y Raúl. Este último me llama la atención, ups, lo dije.

- Uy, chicas lindas a las 2. - dije tomando mi rebanada de pizza y los chicos voltearon a ver a dicha dirección. Las damas terminan de acercarse. - ¿A cuáles les presto?

- Mike, Dylan, James y Rick. - dijo la que estaba en frente, muy segura de si misma, esa era la de Dylan.

- Bien, 20 dólares, ahora. - tenía que sacar provecho de todo esto, y los billetes aparecieron en mi bandeja. - Amo hacer negocios. - entre el dinero en mi bolsillo derecho de adelante. Ellas se alejaron y yo seguí con mi pizza.

- Eso no se hace. - dijo Raúl divertido.

- Cuando sepas de negocios, hablamos, bonito. - bebí de mi soda y seguí en mi conversación con Luna.

El timbre sonó, dando a entender que era hora de la última clase, todos nos levantamos y, cabeza de polvo y yo, nos dirigimos a nuestra clase. Esta última nos tocaba juntos, al entrar al salón, Barbie se dirige hacia mi, amenazante y burlona.

- Hola, puta personal. - dijo y yo sólo levanté mi puño, pero antes de que estampara en su nariz, el brazo de Matt paso por encima de hombros, haciendo que bajara el puño. - Si, controla a tu perrita.

- Te iba a defender, pero la cagaste. - Cabeza de harina me soltó y mi puño estampó en su nariz, rompiéndola. - Mejor ve a enfermería, perrita.

Nos sentamos en los respectivos asientos y la clase empezó, la perra llegó con su nariz morada, sonreí y sentí la mirada de alguien en mí, miré por la ventana y no vi a nadie. Fruncí el ceño y seguí con la clase.

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- ¡Ándate a la mierda, Reeves! - la voz de Jackson resonó por toda la casa y un correteo en esta igual. - Vuelve aquí sabandija. - al escuchar eso, mi puerta se abrió y cerró en fracción de segundo.

Matt se metió bajo mi cama, yo tomé mi teléfono y justo ahí, Gregory abrió la puerta, parecía como si un unicornio le hubiera vomitado encima, estaba lleno de pintura.

- ¿Dónde está? - me pregunta amenazante. - Lo mataré, No lo encubras

- No sé dónde está. - dije neutra. - Lárgate.

Él defensa salió de mi habitación, de un portazo, y cabeza de polvo subió a mi cama, inhalando y exhalando repetidamente y con fuerza. Se giró hacia mí, sonrió y yo sólo negué divertida.

- ¿Me puedo quedar aquí? - me preguntó y sólo lo miré. - ¿Qué significa eso?

- Haz lo que quieras, no me hago responsable de lo que pase. - dije con un tono de doble sentido, a propósito.

- Si quieres hacerme algo, me dejaré. - sentí sus labios en mi mejilla, cosa que me hizo sonrojar y mirarlo sorprendida. - ¿Ellos no hacen eso? - negué

- No son tan cariñosos, sólo cuando estoy en mis días, Layla está o necesito que uno finja ser mi pareja. - volví mi mirada al teléfono, tenía un chisme intenso con Luna y él me interrumpía.

- Se veía que necesitabas una muestra de afecto. - le restó importancia y se acostó a mi lado, la puerta se abrió de golpe y Jackson entró, aún con vómito de unicornio. - Adiós. - Matt río y se lanzó por la ventana.

Me paré deprisa y lo vi correr hacia el parque, y Jackson tras él. Negué divertida y bajé a la cocina, allí estaban los demás, todos con sus celulares. Me senté en medio de la isla, y todos me miraron confundidos.

- Que empiece la lista de películas para mi noche de mañana. - chasqueé mis dedos y los miré. - Empiecen

- ¿De verdad no irás a tu penúltimo baile? - el capitán del equipo apagó su teléfono y me miró serio. - Vamos, será divertido.

- Lo dices porque tienes pareja, y te gusta lo que viene después del baile. - rodé los ojos y bajé de la isla. - Tengo el vestido y todo, pero no me llama ir a ese estúpido baile.

- No podemos dejarte aquí sola. - destaca Michael. - ¿Y si entra alguien?

- Tengo un bate y un nuevo teaser. -