Watch Me Go

Capítulo 14

Me levanto de mi asiento y trato de ignorar lo que ha ocurrido; voy nuevamente a la casa y de camino a la sala me encuentro con los chicos.
—Julian, ya tenemos que irnos.
—¿Por qué diablos?, vamos, nos estamos divirtiendo.
—Curwen está aquí. — dice Jurre con torpeza. —Y sabe que también nosotros estamos aquí, así que dudo que... que...
—Que sea conveniente quedarnos. Viene como con 10 personas bro... Anda pesado el sujeto.
—¡Ja! Lo que dijiste Jobke... — me burlo. —Vámonos pues.
Salimos todos juntos y nos dirigimos al lugar donde Tim ha dejado aparcado su automóvil.
—Esperen, creo no deberíamos conducir. — menciono.
—No seas aguafiestas Juls...
—No, en serio... Si quieren yo pago el Uber. No sé ustedes pero yo quiero llegar vivo a mi casa.
—¿Para que tu madre te mate allá? Ja... Baboso. — responde Tim y espontáneamente todos comenzamos a reír.
—Vamos, ¿si? — hago un ridículo puchero, pero no es de importancia, pues estoy ebrio.
—Vale pues; entonces, ¿qué hora es?, a ver si aún pueden recogernos.
—La 1:47 am.
—Bien, quizás si haya servicio.
En 10 minutos ya estamos subiendo al auto. Los chicos me acompañan todo el camino hasta mi casa: termina saliendo más costoso el viaje, pero prefieren regresar a sus moradas hasta después de dar una vuelta. Nos despedimos, bajo del auto y ellos finalmente se van.
En la entrada de la casa trato de no hacer mucho ruido abriendo la puerta para no despertar a nadie. Una vez adentro voy a mi cuarto con sigilo y ahí me encierro; me tiendo en la cama aún sintiéndome mareado y con el sabor a alcohol en mi boca; eso me recuerda a lo que ha sucedido con Katherine. “Espero no recordar nada por la mañana”, me digo. Veo el techo por unos minutos y caigo dormido.

“¡Con un carajo!” exclamo con ira. El teléfono suena y el timbre de éste me parece de lo más molesto: me obliga a despertarme. La poca luz que logra pasar por la ventana me parece más radiante de lo común y hace que sienta como mis pupilas se queman, me lastima y hace que mi dolor de cabeza se agudice. Una palabra: resaca. Me siento del asco. Veo que hace que el endemoniado celular arme tanto alboroto y literalmente lo ignoro; una simple llamada de Jurre. Pasan un par de minutos y esta vez recibo un texto.

“

Escuché, bueno, más bien leí algo sobre ti esta mañana.
¿Qué tal la resaca, campeón?

Jódete hermano, me siento fatal. A morir.
¿Qué diablos quieres decir?

Yo igual :v
Bueno, por ahí vi una publicación sobre la fiesta de anoche. Rumorean sobre ti (͡° ͜ʖ ͡°)

Deja de poner esa cara, asustas.

¿Me vas a hablar sobre tu llegada a primera base o no?

Mierda... Nos vemos a las 5 en tu casa, ¿vale?

Vale.

”

Ya sé a qué se refiere Jurre. Diablos, creí que no lo recordaría, y que nadie sabría sobre ello.
Miro la hora y está me indica que debo levantarme ya para no crear sospechas; son las 11:21. Abro la puerta y antes de salir me aseguro de que no esté nadie cerca que pueda notar mi estado. Voy corriendo al baño para asearme y todo eso; tras unos minutos salgo y me visto sencillo con un pantalón negro y una playera café sin dibujo. Bajo a las 12 en punto y para mi suerte no hay nadie en casa; casi se me ha pasado por completo la resaca. Veo si hay algo para desayunar y como no encuentro nada simplemente me da por salir ya de la casa para comprar algo de comer de camino al colegio.
Llego a la 1:20 de la tarde: esta vez, a diferencia del día anterior,  mi llegada llama mucho la atención.  El guardia de la puerta me reprende por el notable retraso de mi asistencia y poco después, un profesor de una de mis clases rezagadas pide hablar conmigo. Aunado a ello varias miradas están sobre mi. Aunque eso es lo que menos importa, pues ya estoy acostumbrado: casi siempre se murmuran en estupideces sobre mí, pero hoy... Hoy me alarma un poco por lo que Jurre me ha dicho. La importancia que podría tener tal rumor y el alcance que podría llegar a adquirir me preocupan, a decir verdad. “Diablos, necesito saber de qué se trata.” hablo en mi mente con nerviosismo.
Decido salir algo pronto del colegio, y así lo hago: las 4 en punto y parto a casa de Jurre. Demoro sólo 20 minutos en llegar y una vez afuera de la vivienda, toco la puerta ansioso.
—¡Jurre, hombre! ¡Abreme ya! — le grito desde el exterior de la morada.
—¡Ya voy, ya voy! — escucho. En un par de minutos veo a Jurre en el límite de la puerta saludándome. —¡Julian! Hey, pero, aún no son las 5, ¿o si?
—No, realmente no: lo siento... Pero es que en serio tenía que venir.
—Bueno, pues pasa.
—Gracias.
—Entonces, ¿qué ocurrió anoche? — Cierra la puerta y al hacer la pregunta me mira con cara de pervertido.
—Dímelo tu. ¿Qué se supone que viste o leíste relacionado a mi?
—¿Por qué te preocupan tanto los rumores esta vez? Casi nunca te importa que digan. — responde con cierto recelo.
—Lo sé, pero esta vez es distinto. Hoy cuando llegué al colegio para regularización de nuevo me miraban, y sabe qué cosas estaban diciendo... Por ahí escuché algo sobre Tobías.
—Bueno, en Facebook Alison Van Ofwel publicó “que noche más loca” — Jurre finge una ridícula voz aguda. —y por ahí, otra de las chicas que fue a la fiesta, comentó el estado de Alison y ya sabes que es ahí donde se arman los chismes y esas cosas; el punto es que el comentario de esta otra chica causó polémica, pues decía que lo más descabellado e inaudito de la noche había sido ver a la “patética de la nueva”, osease Kat, y a ti besándose. De ahí varios, tanto chicas como chicos, respondieron al comentario diciendo distintas cosas como que ella es una zorra, que tu y ella están en una relación, o que ni siquiera se habían besado, por lo menos no como ellos creían.
—Diablos... — murmuro. Ahora sé el motivo por el cual soy el centro de atención en el colegio una vez más.
—Yo sí vi que estuviste hablando con ella, y sólo me pareció haber visto que le diste un beso en la mejilla... — hace una pausa. —Entonces dime, ¿llegaste a primera base, picaron? — sonríe.
—No Jurre, no fue en la mejilla. — corrijo con adustez.
—Entonces tú... ¿la besaste de verdad?, ¿en la boca?
—Si.
—¡Wow! — de pronto su gesto incrédulo pasa a ser una sonrisa. —¡Felicidades hermano! Diablos, no creí que llegarías así de lejos tan pronto. Nunca te había visto en una relación con una chica, yo...
—No estás entendiendo Jurre. — interrumpo. —La besé en los labios. Estaba borracho. Ella ni siquiera...

—Ya me dijiste que fue los labios hombre, jaja... Y además con la chica indicada. Doble felicitación para ti...
—Déjame terminar; iba a decirte que ella ni siquiera me correspondió. De ninguna manera es la chica indicada; Jurre, en serio estoy preocupado.
—¿Qué te preocupa?
—Lo que pueda ocurrir después... — suspiro con impotencia.
—¿Cómo paso todo?
—Bueno, salimos a caminar no muy lejos de la casa, quizás apenas pasamos unas cuadras; estábamos hablando y bromeando y ella sabía que yo estaba ebrio o me decía que lo estaba, y después me dijo otra cosa haciendo que de pronto sólo me detuviera frente a ella. Y la mire, sólo miré sus lindos ojos... — suspiro inconscientemente: la trama del recuerdo me hace sentir como si de nuevo estuviera viviendo tal suceso. —Y de pronto sólo puse mis manos en su cintura y la besé. Sólo la besé. Como por 5 segundos, y ella me empujó, me llamó idiota y se fue. —finalizo con sencillez.
—

Rayos hermano, lo siento...
—No importa. — respondo con indiferencia. —Fue sólo un impulso de estupidez, ni siquiera sé por qué lo hice. Supongo que sí estaba muy borracho.
—Bueno, tal vez tu ebriedad te hizo ser sincero... Quizás en realidad, de forma implícita, sientes algo por ella...
—No insistas con eso. Ella no es nadie para mí, ¿okay? Fue sólo un accidente y nada más.
—¿Y qué me dices de ella? Que tal si...
—No Jurre. Ya te dije que ella me rechazó: me empujó y me dijo idiota. No somos ni seremos nada. — digo con firmeza y seriedad.
—¿Crees que vaya a reclamarte en escuela?
—No sé... Espero que no: no me gustaría que se arman más problemas por esto.
—Lo que vas a tener que tolerar por unos días son los rumores y esas cosas. Si alguien los vio besarse, prepárate para los verdaderos problemas. Y más aún si alguien le dice a Curwen.
—Maldición, había olvidado a Curwen... Esto no terminará bien...
—Miralo por el lado amable...
—¿A qué te refieres con “el lado amable”, eh?
—¡A que besaste a una chica! — grita de forma absurda y se mofa de la situación.
—¡Jurre! — reclamo. Me despido de él una vez terminada nuestra charla y me voy a casa.
Me encuentro en mi morada a las 5:20 pm, y debido a que no hallo a nadie en el lugar, decido salir un rato, esta vez no muy lejos.
Westeinderplassen es el lago que queda prácticamente frente al hospicio. Algunas veces voy ahí: cuando necesito pensar, tranquilizarme o tomar una decisión a conciencia. Incluso cuando hay lugar para mi verdadero yo.
Ahí estoy. Fumando un cigarrillo, sentado en un banco a la orilla del lago y mirando como el atardecer se convierte poco a poco y noche. El día prácticamente se me ha escapado de las manos: en algunas horas más el domingo se convertirá en lunes, y siendo sincero, no quiero saber de ese día. Me siento nervioso y algo intrigado al mismo tiempo; pienso sin parar en lo que será del día de mañana.
Sin importar lo que venga, creo en definitivo que debo parar de errar. Mis próximos movimientos son de gran importancia: cualquier error que pueda cometer con Katherine puede llevarme a algo peor. No es ella quien me preocupa, sino Tobías. Problemas con él es lo último que necesito.
Aunque ese beso sigue representando nada más que una equivocación para mi, no puedo dejar de pensar en ello.
Es solo un beso más. ¿Qué puede hacerlo diferente? ¿Qué hace que yo lo sienta diferente?

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Nota de Autor:
Lectoras y lectores :v los que son chidos y los fantasma e.e (ya presentense, no muerdo xD) quiero agradecerles por seguir leyendome después de tanto tiempo sin actualizar. También quiero informarles que he terminado de editar los capítulos anteriores.
Sin más que decir, nos vemos luego!

7u7r

Pd. Si el encuadre del capítulo está mal, es porque no sé qué le está pasando a Wattpad :'v se pone princeso...