CAPÍTULO 50 -LA DESPEDIDA

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—¡Mandy, qué alegría escucharte! —exclamó Erin Hock desde el otro lado de la línea y del océano.

—¿Cómo va todo por allí? Me habría gustado que hubieras venido, Sarah está aquí.

—Bien pero ya sabes, no podía irme a Londres y dejar a Steven aquí solo. La rehabilitación va bien pero falta mucho. Ahora está como un niño pequeño, sería incapaz de cuidar de una mosca —relató fatigada.

—Oh, ánimo, sé que vas a lograr que salga de ese bache, lo único que necesitas es tiempo y paciencia —dije tratando de animarla.

—Gracias Mandy, ya me contarás qué tal va todo. Disfruta —Erin se despidió y al rato colgó.

Aquel 31 de agosto de 1991, parecía un día normal de verano pero no lo era pues era el día en el que mi amado Jeffrey Dean Isbell daría su último concierto como miembro de pleno derecho de Guns N' Roses. Había decidido despedirse a sí mismo ese día ya que con ese concierto se acababa una manga de la gira que les había tenido ocupados desde marzo así que no causaría tanta conmoción. Aunque estaba totalmente seguro de su decisión se sentía extraño, diferente. No le había dicho nada a sus compañeros, era un perfecto secreto que guardábamos con cautela sus familiares, Molly, Sarah y Erin Hock. Por eso decidí acompañarle al concierto, para apoyarle en un momento tan difícil como aquel.

Aquel recital no se celebraba nada más y nada menos que en Londres, la pintoresca capital inglesa. Habíamos aprovechado para viajar un par de días antes ya que queríamos conocer la ciudad mejor y también queríamos tiempo para nosotros. En el año que habíamos pasado juntos tuvimos que trabajar mucho así que solo nos pudimos ver durante mis vacaciones, en las que viajé a Los Ángeles para estar con Jeff y en las suyas, en las que vino a Lafayette para estar juntos al mismo tiempo que supervisaba las obras de la que sería nuestra nueva casa.

Nuestro mayor sueño era vivir juntos y hasta el momento estaba complicado ya que el vivir en diferentes estados y tener distintas ocupaciones nos dificultaba aún más el poder estar juntos. Aún así nosotros no nos dejamos vencer ya que a estas alturas de la historia no nos podíamos dejar aplastar tan fácilmente. Ahora en Londres estábamos todo el rato juntos, incluso ahora, cuando la banda tenía su prueba de sonido en el monumental estadio de Wembley. Al término de la misma Jeff vino hacia mí corriendo para abrazarme.

—¿Qué te ha parecido? ¿Crees que debemos cambiar algo? —preguntó con efusividad.

—No, creo que así está muy bien.

—Quiero que sea una noche especial, que todos la recuerden.

—Veo que estás muy tranquilo, ¿estás seguro? —le pregunté por enésima vez.

—Sí, ya no hay marcha atrás. Lo he pasado muy mal y no quiero seguir así, no me quiero volver a autodestruir. Soy feliz contigo y creo que he conseguido mi objetivo, he dejado huella en todo lo que he tocado, ¿no crees? —me preguntó a la vez que se sentaba a un lado del escenario con su guitarra entre las piernas.

—Tienes razón, tú mismo me lo dijiste una vez: es fácil olvidar dónde has estado, pero mientras hayas tenido buenos momentos siempre lo recordarás.

—Exacto —contestó sonriente tras escucharme recitar su frase.

—Si eres feliz así yo también lo seré.

—Ya queda poco para el concierto, ¿saldrás a dar una vuelta o te quedas a esperar dentro?

—Estaré por aquí, por si necesitas algo —contesté.

—Por la noche entonces nos vemos —respondió con dulzura mientras me abrazaba por la cintura.

—Bueno, iré un rato con Sarah hasta que empiece el concierto que seguro que tienes mil cosas que hacer. Suerte y disfruta —le di un beso en los labios y me marché junto a mi amiga.

It's So Izzy |Guns N' Roses|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora