#OUTSIDERS

52 • Sweet Love Of Mine

Sin el miedo de mi violación, puedo disfrutar de tocar a Midnight como dios manda, como debí haberlo hecho desde que la vi llegando con esa ropa de prostituta después de una maldita semana sin comunicación. Debí haberla agarrado y subido a mi cama para que nos perdonáramos, hiciéramos el amor y nos prometiéramos amor infinito.

Las cosas no pasaron así para nada, pero aquí la tengo en mi cama de todos modos. Aún puede suceder.

—Que bien se siente tenerte de nuevo —murmuro, jalando su cuerpo para poder enterrar mi cara en sus tetas. Una vez que tengo a Mid completamente suelta y a mi disposición, la tiro a un lado de mí en la cama y me pongo sobre ella, asegurando sus manos arriba de su cabeza porque no quiero que intente algo salvaje con mi parte trasera. Todavía estoy en alerta roja— ¿Me extrañaste?

—Define el verbo extrañar —dice Mid. Cuando subo la mirada a sus ojos bicolor, ella tiene el descaro de reírse de mí— la verdad es que no te extrañé ni un poquito. Te estuve odiando bastante.

—Perra —murmuro sin tanto enojo detrás de mi voz. Midnight se ríe de mí una vez más— no importa. Aquí te tengo de todos modos. Voy a hacer que me hayas extrañado.

—Exacto, así que deja de hablar y hazme sentir mejor —dice, abriendo sus piernas y levantando una ceja en espera de lo que haré. Me gustaba más cuando tenía miedo de que la tocara y no se ponía a exigir cosas.

Primeramente y sin hacerla esperar más tiempo, bajo a su pecho para tomar sus pezones en mi boca y jugar con ellos un rato, lamiendo y succionando. Luego me muevo a su suave abdomen, rodeando su ombligo con mi lengua y haciéndola temblar.

Sé lo mucho que odia la falta de besos entre nosotros, así que una vez más intentó compensarla besando sus labios de abajo dulcemente, como cualquier otro hombre normal lo haría con su boca. Tomo los muslos de Mid para ponerlos sobre mis hombros y conseguir un mejor acceso para brindarle la mejor experiencia que mi lengua pueda dar.

No había probado algo tan delicioso en años. Siento que podría estar aquí toda la vida.

—Shh. Almohada —ordeno, levantando mi cara de mi cena cuando ella se pone demasiado ruidosa. Mid se queja de la pausa, pero toma una almohada de todos modos para ahogar sus gemidos ahí.

Y entonces me siento con toda la libertad de esmerarme en hacerla sentir bien, intentando que el orgasmo borre de su memoria fotográfica todo lo malo que he hecho.

Midnight

La mañana siguiente despierto en la cama de Justin sintiéndome descansada y satisfecha. La ultima vez que tuve sexo fue con Jake, el fatídico día que descubrí lo que Justin hizo con la señora, o sea que no pude disfrutarlo porque solo estaba pensando en cómo se veía Justin en la cama con esa mujer. Y en cómo podía hacerlo sufrir tanto como yo.

Así que me merecía esto, totalmente.

Justin está durmiendo con la cabeza sobre mi abdomen y las piernas volando fuera de la cama, así que puedo estirarme sin problema por mi celular. Mmm, son las ocho de la mañana y Lion no me ha hablado para quejarse de que voy tarde.

—Justin —digo, sacudiendo su cabeza. Hago esto por un par de minutos hasta que empieza a despertar— es tarde, tenemos que ir a BM.

Justin entierra su cara en mi abdomen de nuevo y se queja ahí por un buen rato hasta que logra mover el resto de su cuerpo adormilado. Aprovecho que se aleja de mí para levantarme de la cama y recoger mi ropa tirada.