Su humor no estaba mejorando a medida que se pasaba la mañana, mientras los niños juagaban en la parte trasera del auto ella estaba tomada de la mano de él, en realidad ella solo tenía sus dedos entre los de él, él era el que la tomaba de las manos, ella miraba de reojo como se veían sus manos mientras él manejaba, un momento de melancolía la embargó, como añoraba que esa imagen se reflejara en la verdad y no en una mentira que tenía que sostener por sus hijos, una lágrima iba bajar por su mejilla pero ella la detuvo antes de que él la viera, por supuesto que él no la vería llorar. Se detuvo el auto y Justin la miro, ella no le miro y se bajo del auto para abrirles la puerta a los niños.- Se comportan, no quiero quejas de su maestra y no sean coquetos.- ¿Y como nos querrán las chicas si no somos coquetos? – pregunto Jason, un escalofrío recorrió el cuerpo entero de ella al sentir el frío tacto de él en su cintura, un nudo atorado en su garganta estaba a punto de estallar pero tenía que mantenerse, los niños la verían llorar y sería ridículo. Besó la frente de ambos y salieron corriendo a su escuela. Ella, apenas los niños entraron en la escuela, se separo bruscamente de él, él la miro enojado mientras veía como se subía al auto y cerraba la puerta de éste bruscamente, acto que para nada le gustó.- Deja de comportarte como una niña – soltó inescrupuloso, su mirada ardía en llamas de furia por la actitud de ella.- Ya cállate y deja de dar órdenes – atacó ella. Él le decía ‘niña’ porque sabía que odiaba que le dijesen así y ella sabía que él odiaba que lo mandaran a callar – Necesito ir al centro comercial por unas cosas ¿Me llevas allá? Sino tomaré un taxi – a él le exasperaba su actitud y más si le hablaba con esa frialdad que le helaba la sangre y aún peor ni siquiera se tomaba la molestia de mirarlo pero era lo menos que podía esperar.- Déjame hacer unas cosas en la empresa y luego vamos juntos. También necesito algo – a ella no le gusto en absoluto pero las ganas de discutir se esfumaron al recordar la dichosa empresa. La Bieber’s Mallette Company era una empresa destinada al manejo de otras microempresas en el ámbito comercial, toda empresa mundialmente reconocida había pasado por los entrenamientos de ésta compañía y los frutos de éstos se veían en él numero de ceros que poseía sus chequeras, una buena inversión sin duda. En el camino a la compañía ella recordaba los pocos días de felicidad armada como una obra de teatro que tuvo a su lado, muchas veces se la pasaba en la empresa todo el día pero otras veces faltaba solo con el fin de estar co ella todo un día tumbados en la cama hablando de cosas verdaderamente sin importancias, pero dudaba enormemente que eso sucediera de nuevo, apenas tenía una semana con él y su vida había sido como el infierno. Suspiró sin saber que él lo había notado, era una señal específica de que estaba recordando momentos no tan agradables que al fin y al cabo era su cuento de hadas.Por parte de ella, en lugar de la confianza había un inmenso vacío que la separaba a distancia de él. Los momentos felices vividos solo quedaron como parte de un pasado que desearía regresar solo para sentir esa inmensa alegría que en verdad estaba en ella, pero debía recordar que solo le duró un mes, los siguientes tres meses fueron los peores de su vida, con las magníficas discusiones que tenían a diario ya a él ni le gustaba estar en casa, si así se le podía llamar, mientras ella peligraba alterarse estando embarazada pero no podía hacer nada, no habría podido pegar un ojo sabiendo que él estaba en la calle a esas altas horas de la noche y además con unas copas de alcohol encima, no podía.- ¿Estás bien? – pregunto él realmente preocupado, ella solo se limitó a asentir. En el camino no había mirado nada más que para el suelo del auto y su mirada a veces demostraba un temor profundo que él no veía desde hace mucho tiempo, solo la vez que en el auto la zarandeó para que le respondiera si estaba embarazada.Al caminar a su lado podía percibir un miedo que destilaba de ella, él trago grueso, seguramente la empresa le traería recuerdos de los principios de su matrimonio, y hacía que se arrepintiera toda su vida del mal ya hecho.- Buenos días señor Bieber – saludo la recepcionista quien lo miraba desvistiéndolo con la mirada, ___________ sintió el impulso incontrolable de tomar el brazo de Justin y entrelazar su mano, la recepcionista la miró inmediatamente confundida.- Megan ella es ___________ –___________ le interrumpió, siendo dominaba por las emociones del momento.- ___________ Bieber, la esposa del señor Bieber, mucho gusto – expresó con falsa simpatía esbozando una sonrisa sarcástica que la recepcionista noto y bajo la mirada apenada, y ___________ supo que no era una resbalada. Justin emprendió camino hacia su oficina seguido por ___________ quien se volteó a mirar de nuevo a la recepcionista – Fue un gusto – soltó ___________ esta vez hablando enserio y Megan lo noto sonriéndole, soltando un suspiro de alivio.Ambos entraron a la oficina totalmente equipada de Justin, había estado allí unas dos veces con suerte, la había remodelado, su escritorio color caoba puro ahora era más amplio y ahora sustituyo los sofás de cuero negros por los de algodón ligero blancos, se sentó en uno de ellos mientras él se sentaba en su silla giratoria y se concentraba exclusivamente en la montaña de papeles que tenía en su escritorio. Aprovechó que él estaba desconectado del mundo exterior y se fijo en su perfil, la luz que entraba por el gran vidrio de su oficina le reflejaba el perfecto perfil que tenía, y hacían brillar sus ojos aún más, su traje pulcro y perfectamente planchado, su camisa que se ajustaba a sus hombros y espalda ancha y esos pantalones que le daban un porte ejecutivo, definitivamente estaba casado con uno de los hombres más sexys o por lo menos eso pensaba ella.- ¿Estas aburrida? – pregunto él, ella se asustó, seguramente había notado que se lo estaba comiendo con la mirada pero parecía lo bastante concentrado en sus papeles que lo más seguro es que fuera no.- No – su voz fue como el de una niña, de igual manera estaba en una oficina como una niña, esperando que él terminara. El sonido del teléfono de recepción sonó y Justin lo contesto en altavoz.- Señor Bieber, el aspirante para el puesto de Gerente ha llegado para la entrevista – Justin chasqueó su lengua, estaba ocupado por unos papeles importantes y no tenía tiempo para la entrevista pero se vería desagradable profesionalmente hablando que cancelara la entrevista cuando había solicitado extrema puntualidad a la hora de ejercer su cargo. ___________ notó todo eso, se levanto dejando su bolso en el sofá y camino hacia la puerta, tratándose de ella se dio cuenta de eso.- Yo iré. Tú termina allí y yo veré quien es. Cualquier cosa lo traigo y le das el último vistazo – él asintió encantado con la idea y dejó que fuera, pasaron diez minutos y al fin había encontrado los documentos que necesitaba, los examino minuciosamente, dos toques en la puerta no distrajeron su atención de esos papeles.- Adelante – pronunció y enseguida la puerta se abrió, Justin levanto la vista y su cuerpo por unos segundos se congeló ante tal persona – Lisa – fue lo único que pudo decir debido a la sorpresiva visita.
***
- ¿Me puedes decir quién es el aspirante? – Le preguntó ___________ a Megan, ella asintió y señaló a un chico que estaba de espaldas a ella y con un traje ejecutivo, ___________ fue hacia él y le habló – Disculpe viene por el empleo de… - ___________ se cayó al segundo de ver el rostro de aquel hombre.- ___________ - dijo aquel hombre pálido con los ojos ensanchados de la sorpresa - ¿Qué haces aquí? – preguntó Logan.
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30 Días De Subasta{Go Away} 2 Temporada.
Roman d'amourCuando el orgullo es el que manda, el destino se echa a un lado sin importar a quién hiere o lastima , el orgullo es ciego y vanidoso pero después de todo es un escalón para levantarte de aquello que te hizo caer y que hoy te hace más fuerte. Lo mal...