Capitulo 36

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Una mujer segura de sí misma se reflejaba en el gran espejo de la habitación, _____________ deseaba tanto que eso fuera verdad, pero ni ella misma se lo creía, añoraba con su alma poder resistir la tentación de tomar a Justin por los hombros y reclamarle de una vez porque estaban en esa situación tan extraña. Ella quería preguntarle todo lo que había hecho durante esos tres años quería preguntarle cómo se había sentido y si la había extrañado pero se aseguró a sí misma llenándose con el pensamiento de que solo pensaría en ella por la curiosidad de que habría sido de ella y del bebé que esperaría, solo eso. Quería preguntarle tantas cosas que no sabría que podría preguntarle primero pero tales preguntas solo quedarían entre ella y su habitación.– ¿Estas lista? – preguntó Justin entrando en la habitación esperando que ella estuviese lista. _____________ solo pudo asentir, si llegaba a emitir un sonido con sus garganta su voz se quebraría, y eso lo debía evitar. Odiaba recordar cómo se sintió cuando Justin decidió alargar la estancia en una cabaña de la playa un día más.Mientras los niños corrían con gran entusiasmo al auto con sus ropas playeras Justin se detuvo en la puerta esperando a _____________ antes de subir al coche. El objetivo de ese viaje a la playa no era aterrorizarla hasta un estado histérico quería que afrontara su mayor miedo, los niños cerca de una gran cantidad de agua._____________ Por poco y vomitaba y si no más; la combinación entre >>Niños – Playa, mar agua<< no era su favorita. – Quiero que te tranquilices prometo que nada va a pasar. Te lo juro – _____________ lo miró a los ojos buscando esa esperanza en ellos y se sorprendió cuando encontró en ellos una sinceridad que le daba escalofríos y hacían que suspirara por él una vez más – Todo estará bien – susurró besándola en la frente, él sintiendo como ella estaba a punto de arrepentirse.Los minutos nunca le parecieron tan cortos como esa trayectoria, los gritos alegres y ansiosos de los niños la ponían al borde de la histeria y le erizaban la piel ¿Por qué no podía disfrutar tanto o más que los niños? Debía relajarse, era un viaje a una playa pero ella se sentía como un cordero siendo llevado al matadero.– _____________ No creo que puedas broncearte allí, el sol no cabe en el auto – comentó divertido Justin, eso la relajó, pero aún le quedaba esa gota de pánico en ella. Se bajó del auto y trató de tranquilizarse con el sonido de las olas chocando en una gran roca áspera cerca del muelle.– Niños quiero que escuchen atentamente – dijo Justin observando cómo los niños lo miraban atentamente – Quiero que siempre se mantengan cerca de la cabaña en donde estaremos, no corran lejos, si van a alguna parte díganle a su madre y a mí, no conversen con extraños y lo más importante, no vayan al mar sin alguno de nosotros dos ¿Entendido oficiales?– ¡Entendido! – gritaron ambos haciendo el gesto de un oficial acatando órdenes del mayor.Todos fueron a la cabaña donde había señalado y _____________ se enamoró completamente de ella.– ¿Es tuya? – preguntó sorprendida, era completamente hermosa. La gran cabaña de dos pisos era hecha de pura madera del siglo XIX los pisos eran de madera sólida un poco más reciente pero sin dejar de darle ese toque antiguo y hogareño, la cocina era clásica con un horno a leña y la estufa con poco gas. Amaba la sensación de un verdadero hogar y el aire que se respiraba era simplemente puro y limpio.Los niños se dirigieron a la puerta y salieron, _____________ iba a salir detrás de ellos.– Déjalos. Ya les colocamos las reglas además llevan sus salvavidas y sabes que aún no entraran al agua, primero harán sus castillos de arenas – ella decidió confiar en él una vez más, solo así podía lograr vencer ese miedo.– ¿Cómo sabes que harán primero los castillos de arena? – le preguntó ella.– Porque yo hacía lo mismo, moría por ir a la playa y lo primero que hacía era castillos de arena – respondió y por alguna extraña razón el estómago de _____________ se tensó de alegría.– ¿Es tuya la cabaña? – repitió _____________ él solo sonrió, la tomó de la mano y la condujo al comedor. La respiración de _____________ se aceleró al sentir su cálida mano asegurar entre ésta la suya. Él tomó un papel de la mesa y se lo entregó.– Es tuya – susurró besando su mano y rozando sus nudillos con sus labios.– ¿Qué dices?– Eso. Tu eres la dueña de ésta cabaña. Está a tu nombre.

30 Días De Subasta{Go Away} 2 Temporada.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora