Narra Dani.
Nada más que llego a casa, subo corriendo las escaleras, y busco a mi hermano como un loco.
-¡Estoy aquí!-grita mi hermano desde su habitación.
Es un capullo. No sé cómo sabía que iba a hablar con él.
-Dios tío. No sabes lo que me ha pasado.-me echo las manos en la cabeza, y me siento en su cama.
-Wo, debe de ser muy fuerte, cuenta.-se tira en plancha en la cama, cayéndo encima mía, y se queda así.
-Me he besado con Alicia.
-¿¡Cómo!? O sea, ¿pero ella quería o le has forzado? Mira Dani que te meto.-dice incorporándose bien en la cama, y levantando la mano.
-No, ¿qué dices? Yo en la vida he forzado a nadie para que haga algo conmigo, gilipollas.-digo un poco ofendido, pero se me pasa enseguida-. Me iba a despedir de ella, y no sé, necesitaba decirle que estaba enamorado de ella, y nos hemoa dado un pico. Y luego nos hemos liado... No sé Jesús, a sido fantástico. Muy sútil, agradables, fresco, inocente... El mejor beso de mi vida.-y me tiro de espaldas con los brazos abiertos dramáticamente.
-Te has besado con muchas chicas, ¿estás seguro que a sido tu mejor beso?-me pregunta Jesús. Yo me reincorporo y le miro serio.
-Pues claro que ha sido mi mejor beso. A sido muy sencillo, y perfecto. Es que me ha encantado.
-¿Y ella te ha dicho que está enamorada de ti?
-Me ha dicho que le gusto...
-A ver-se pone recto-. Alicia me cae genial, es muy buena chica, y no hay ninguna queja de ella, pero no sé. ¿No crees que has ido demasiado rápido al decirle a Alicia que estás enamorado de ella? ¿y si a lo mejor ella no siente lo mismo que tú, y te hace daño? No quiero que pases por lo mismo que pasé yo.
Me quedo callado. Es cierto que he ido un poco rápido. Que nos conocemos de días contados. Pero, es que dentro de mí, había algo que me decía que tenía que decirle que estaba enamorado de ella, y eso he hecho. Haré todo lo que esté en mi mano para que se enamore de mí.
-A lo mejor no me hace daño. No quiero pensar en eso...-me levanto de la cama, y me toco el pelo-. He quedado con ella en un rato.
-Ya, justo me acaba de enviar Sandra un mensaje, mira.
-Jesús, estoy con Alicia. Dice que ha quedado con Dani en el parque para enseñarle a montar en monopatín, ¿vamos con ellos?
-Sí, ¡por nada del mundo me perdería a Dani montando en monopatín! JAJAJA.
-Que malo eres. Pues cuando nos vayamos, os mandamos un mensaje.
-Vale cariño, hasta luego.
La verdad es que no me hace mucha gracia que Alicia le haya dicho a Sandra que venga con nosotros. Yo ésta tarde tenía previsto intentar enamorar a Alicia, pero bueno, otra vez será.
Jesús nota que no me agrada la idea.
-Le caes bien.
-No le caigo bien. Dijo de mí que era un matón, y un mindundi. Y ahora, está saliendo contigo, y da la casualidad de que somos como dos gotas de agua.- me cruzo de brazos, y me siento en la cama.
-Venga Dani por favor. Haz un intento. Intenta conocerla. Sólo se preocupaba por su amiga... Es mi novia, y me gustaría que os llevaseis bien.
Lo tengo que intentar por mi hermano. Si él es feliz con esa chica, pues intentaré ser yo también feliz con mi cuñada.
-Vale.-le miro y sonrío.
Me voy a mi habitación, y me busco la ropa para ésta tarde. Que es como siempre, muy cómoda; una camiseta, y unos pantalones. Nada complicado.
Voy al baño, y me echo la gomina,me peino hacia arriba, y me echo un poco de colonia.
-Venga Jesús, ¿estás ya?
-Sí, ya voy.
Le espero en el salón, y viene con su monopatín.
-Toma fiera.-y me da el monopatín-. Vamos a reírnos un poco.
-Mongolo.-y le doy una colleja.
Salimos de casa entre risas, y para ser sinceros, armando un poco de jaleo.
-Mira, allí están.-señala Jesús hacia enfrente, y las chicas vienen hacia nosotros-. Hola cariño.-le dice mientras le da un beso en los labios-. Hola Alicia.-le deja dos besos en la mejilla.
-Hola Sandra, ¿qué tal?-le digo intentado empezar bien la tarde.
-Muy bien, gracias.-me responde con una sonrisa, y se va al lado de Jesús, que le pasa un brazo por encima de sus hombros, y ella le abraza por la cintura.
-Hola eh. Que yo existo.-dice Alicia enfrente mía, cruzada de brazos, y con el labio inferior fuera.
-Ese labio peligra.-digo riéndome, y abrazándola a la vez-. Que ganas tenía de verte.-le dejo un beso en la frente.
-Acabamos de despedirnos.-dice ella divertida.
-¿Y qué? Pero yo ya te echaba mucho de menos.-le paso mi brazo por mis hombros, y la acerco a mí.
Llegamos al parque, y nos sentamos en un banco. Espero que se le olvide lo del monopatín, aunque parece que no, porque ella se ha traído el suyo.
-Venga vamos.-se pone delante mía, y me tiende la mano.
-Te tocó.-dice Jesús.
-No hables, a ver si te va a tocar a ti también.-le dice Sandra.
-Te jodes.-y le sonrío a mi hermano.
Me pongo de pie, y cojo el monopatín. Alicia me guía hasta llegar a un lugar que el suelo es totalmente plano. Sin nada de baches.
-Aquí será más fácil de aprender.-desliza su monopatín por el suelo, y salta encima de él, mientras que se mueve. Como quiera que yo haga eso, Daniel Oviedo muere. Se baja del monopatín, y anda hacia mí-. Venga, ahora tú.-y me da un golpe en el pecho.
-¿Estás loca? ¿me quieres matar? No puedo hacer eso.
-Eres un gallina, Daniel. Yo no te hacía así, eh. Mira, mucho más fácil.-pone el monopatín en el suelo, sin moverlo-. Montate.-la miro-. Confía en mí.-la cojo de las manos y me monto-. Y ahora, ponte recto, no te muevas, y...-pone su pie en el monopatín, y le da impulso-. Disfruta del viaje.
ESTÁS LEYENDO
Enemigos Perfectos
Fanfiction¿Tienes miedo a enamorarte de la persona equivocada? Siempre han dicho que las apariencias engañan. Te aseguro, que ésta novela, no te dejará indiferente. Lee y vive en primera persona los primeros síntomas de una chica que se enamora de alguien...