31. Ahora

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Dos extraños bailando bajo la luna, se convierten en amantes al compás de esa extraña melodía, que algunos llaman destino y otros prefieren llamar casualidad 🎶

* * *

Podía llevar toda la noche intentar explicarle qué lo hacía tan especial.

Alec estaba acurrucado en su cobija, no tenía frío, pero de repente sentía la necesidad de protegerse, de cubrirse. Tenía miedo de la respuesta de Magnus y hasta ahora se daba cuenta. Y se sentía observado, ya reconocía perfectamente ese parpadeo de oro y plata. Y entonces se le ocurrió: -¿Tus ojos no son plateados como los de Tessa? ¿Por qué hay oro en tu mirada?

Magnus se sorprendió. ¿Cómo lo sabía?  -Mis ojos, en este cuerpo, son dorados, pero hay plata en ellos, es la parte de mi esencia, de la Luna, que nunca me abandona. Por eso Tessa, y nuestro hijo, heredan ese color.

Aquellos ojos de oro y plata se entrecerraron, preguntándose ¿por qué la plata invadía, por momentos, el celeste de los de Alec?

-No puedo esperar a verlos -Alec sonrió ya más tranquilo cuando sintió la cálida caricia de la Luna en su mejilla.

-Yo también ansio ese momento -respondió Magnus-. Y volviendo a tu pregunta, nunca tuve interés alguno en bajar a la Tierra, yo siempre he disfrutado ver todo desde mi posición, a todos los mortales, sentir sus miradas en mí...era suficiente contacto con ustedes, hasta la penúltima Luna llena, cuando un par de tristes ojos azules atrajeron mi atención. Alexander Lightwood era su nombre. Era hermoso, pero la tristeza enmarcaba sus rasgos. Cuando su nombre se me escapó en voz alta, él me miró, con su mano en su vientre, acariciando inconscientemente, él se rió y después se fue, y yo lo vi dormir toda la noche. Una noche él me pidió enviar una estrella fugaz y entendí lo que quería...

-Un deseo -susurró Alec.

Magnus asintió, aunque él no podía verlo, y siguió: -Fue la última Luna llena cuando él lo pidió, yo sabía lo que él quería, y él sólo preguntó "¿qué quieres a cambio?". Y no quería nada, Alexander. En ese momento, cuando después de más de dos mil años decidí bajar por primera vez, no quería nada más que cumplir tu deseo y verte feliz. Pero ahora...

-¿Ahora?

Ahora te quiero. Quiero rebelarme y hacer lo necesario para estar contigo. Quiero tenerte. -Ahora te quiero a ti. Y tú deberías dormir, te ves agotado, mañana podemos seguir hablando, conociéndonos.


CONTINUARÁ...

Creo que su encuentro sucederá la siguiente semana 🙌
no lo estoy retrasando, pero me conocen y tampoco me gusta a presurar nada 🙈

Hijo de la luna (Malec Mpreg)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora