23. Amor y Dioses

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Mil vidas, mil noches, mil lunas, mil años te amaré, mi vida 🎶

* * *

Era el miércoles de la tercera semana cuando Esperanza hizo la pregunta: -¿Qué harás cuando sea Luna llena y se vean?

Alec seguía comiendo demasiado, dormía más, tenía antojos y náuseas. Cuando pidió un hijo no había considerado todos estos síntomas...

Y además estaba engordando. Esperanza decía que era muy pronto, pero él conocía su cuerpo, era muy poco, pero el cambio ya se notaba. Lo sentía y lo veía, se encontraba en las noches acariciando su vientre, sintiendo el cosquilleo, ¿respuesta de su hijo?, y viendo a la Luna desde su lugar, pensando en Él.

Él.

Y ahora Esperanza lo preguntaba. ¿Qué haría esa noche?

No había pensado en eso, sólo anhelaba con cada fibra de su ser que sucediera. Quería ponerle un rostro a esa voz que de sólo recordarla erizaba su piel y mandaba electricidad por todo su cuerpo. No entendía sus reacciones a él, ¿era normal? ¿se sentía eso sólo por haber estado juntos, aunque él no lo recordara? ¿era por ser padres que sentía esta conexión y necesidad? ¿o...era algo más?

-¿A qué te refieres? -Alec abrió los ojos, intentando deshacerse de todas esas preguntas y sensaciones, y se encontró con los de Esperanza mirándolo con curiosidad.

-Pues a eso, cariño. ¿Qué vas a hacer cuando lo tengas frente a ti, así como ahora estoy yo? Es tan surrealista todo esto... A veces todavía dudo que sea real...

-Es real -Alec no dudaba, no lo hizo antes y no lo haría ahora. No cuando tenía tanto de él, su luz, su presencia, su voz...su hijo. Esperanza podía no sentir eso, pero él sí.

-Lo sé. Sólo digo que es una locura.

Y entonces él le regresó las palabras de Magnus con un orgullo y una felicidad absurdos: -Tal vez un poco, pero es una buena locura.

Ella sonrío, aunque tenía miedo de lo que veía en los ojos de Alec. ¿Había notado como la plata se mezclaba con el celeste cuando pensaba en Él? ¿Como sus mejillas se sonrojaban y sonreía demasiado?

¿Como empezaba a...?

Quería preguntarle si le hablaría sobre lo que le había dicho Tessa, y en su lugar preguntó: -¿Los dioses se enamoran, Alec?

* * *

Alec no pudo sacarse de la mente esa pregunta, Él le había dicho que los Dioses a veces tenían a Alguien temporalmente o para siempre, pero nunca habló de sentimientos, había sonado más como pertenencia...

¿Los Dioses conocían los sentimientos? ¿Conocían el amor?

Esperanza se fue y él tomó una siesta, cuando despertó con su voz llamándolo "Despierta, dormilón", una sonrisa tonta se instaló en sus labios, y la Luna ya estaba en lo alto.

Salió al balcón: -Hola.

-Hola, mi Alexander -Magnus no podía creer lo feliz que lo hacía ese mortal con sólo sonreír.

-Q-quería hacerte... ¿una pregunta? -las mejillas de Alec ya estaban sonrojadas y una caricia llena de luz llegó hasta ellas.

-La que quieras -y Magnus no mentía, sentía que ya podía darle todo lo que él quisiera. Pero no estaba preparado para la siguiente pregunta:

-¿Los Dioses se enamoran? ¿Tú...podrías?





CONTINUARÁ...

Hooola 🙌
notaron mi ausencia aquí ayer? 🙈

Hijo de la luna (Malec Mpreg)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora