Hijo de la luna (Malec Mpreg)

32. Embarazo

Luna, yo todo te doy, luna de mi corazón, yo te doy todo mi amor, si tú me lo cuentas todo 🎶

👆 recomendación de una de ustedes ❤

* * *

Era viernes, se acercaba el último fin de semana de sus vacaciones, sus últimas tres trasnochadas con la Luna, con Él, antes de volver a la universidad.

Alec tenía miedo de volver. Su vientre ya no era plano, se veía como si estuviera ligeramente inflamado, y él, exageradamente, sentía que todos lo notarían...

-Alec -rió Esperanza, cuando se lo dijo-, en todo caso sólo pensarían que engordaste, cariño. Nadie te vería y diría "Alec está embarazado", tú eres un caso único... Y hablando de eso, no le preguntamos a Tessa cuánto duraría tu embarazo, ¿es el mismo tiempo que uno normal?

-Uh... -él no había pensado en eso.

-Bueno podemos preguntarle la próxima vez que la veamos, dijo que hará un chequeo mensual de tu embarazo.

-Claro -aunque Alec tuvo una mejor idea, él podía preguntarle a Él esta noche.

* * *

A Magnus todavía le parecía extraño. Hablar de la posibilidad de que esto fuera, o evolucionara, al amor. No dudaba de que Alexander fuera capaz de lograr eso, en tan poco tiempo había cambiado ya su vida.

-¿Lo estas considerando entonces? -las estrellas titilaban, mientras Catarina, en su forma original, preguntaba.

-Sí, aunque todo depende de la próxima luna llena.

Cat iba a decir algo más, pero en ese momento cierto mortal ojiazul salió a su balcón, buscando a su Luna.

Cat simplemente dejó de prestar atención, mientras Magnus lo miraba sonriente, parpadeando oro y plata, al igual que Alec parpadeaba celeste y plateado.

No entendía la razón, pero eso lo hacía más hermoso, irresistible y atrayente...

¿Era de verdad Alec un mortal cualquiera?

-Hola -Alexander seguía sonando tímido al saludarlo, aunque su sonrisa era más confiada y cálida,y llenaba a la Luna de luz propia, mucho más que la que tomaba prestada del sol.

El sol.

De sólo pensarlo Magnus sentía escalofríos. Ella era uno de los principales obstáculos que tendría para estar con Alexander.

Ella, el Sol, era egoísta y tradicionalista. Si sólo se enteraba de su hijo, el cielo ardería en una guerra.

-Hola, Alexander. ¿Cómo estás hoy?

-Muy bien ahora -tal vez él todavía no amaba a la Luna, pero sin duda era importante y necesario en su vida...más de lo que pensaba-. Quiero hacerte una pregunta.

-¿No era mi turno?

-Considera esto una de ambos -Alec acarició su vientre y Magnus rió.

-Tramposos. ¿Qué pregunta?

-Sobre el embarazo... Eh... ¿serán nueve meses como un embarazo humano normal? ¿más? ¿menos?

-Oh, eso, tu embarazo durará diez Lunas llenas, Alexander.

Y si tenemos suerte yo estaré las próximas nueve contigo. Con ustedes.

CONTINUARÁ...

Después de este va Tus ojos no me ven ❤ y hay por ahí una historia nueva (Papi y el profesor) por si gustan leerla, será tierna tipo esta :3