158. Últimas veces

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Esperanza no había querido decirles a Magnus y Alec que tenía un mal presentimiento y que Tessa igual, por eso iba a venir un día antes y se quedaría todo el mes...

...además estaba su sueño.

Ángela no se supone que interviniera, Raziel se lo había advertido ya muchas veces, pero ella conocía el sueño de Esperanza y no podía no hacerlo.

Esperanza no podía dejar a Rafa con Magnus y Alec, ellos no tendrían tiempo para cuidarlo. Así que Rafa iba asegurado en su asiento.

<<-Esperanza, ya descubrí cómo ayudar, perdón el retraso...>>, estaba diciendo Tessa por teléfono cuando sucedió.

Cuando el auto se volcó, Ángela no sabía qué hacer. No podía salvarlos a ambos. Fue como si el tiempo se congelara, vio la mirada horrorizada de Esperanza y el ruidito feliz de su hijo se detuvo.

-¡Nooo! -Ángela sintió un escalofrío recorrerla y algo clavarse en su corazón.

No sabía que un ángel podía sufrir, que podía doler tanto la impotencia.

No sabía que un ángel podía gritar tan fuerte hasta casi quedarse sin voz.

Pero en medio de todo el caos creyó escucharlo. "Sabes qué hacer".

No. No. No. No.

* * *

La barbilla y los labios de Alec estaban temblando. Tenía que haber escuchado mal. Magnus no era la Luna, no podía ser, ¿y todas esas noches?

Más lágrimas rodaron por sus mejillas. El nudo en su garganta le impidió hablar, eso y el fuerte dolor en el pecho que se unía a las contracciones.

No era cierto. Cerró fuertemente los ojos. No era cierto, esto era una pesadilla, iba a despertar y todo estaría bien. Nada de esto era cierto, Magnus no era la Luna, él no se había enamorado de una mentira, y el nacimiento de Max y Elara no se estaba adelantando.

Cuando abrió los ojos de nuevo, las lágrimas no lo dejaron ver bien. Magnus ya estaba colocando la anestesia, vio los labios de Magnus moverse, pero no entendió lo que decía.

Su expresión estaba llena de dolor y, a pesar de todo, lo sentía como suyo.

Extendió su mano, intentando llegar al rostro de Magnus, ¿de la Luna?, acariciarlo una última vez. Una última vez al menos, ya que no iba a ver a sus hijos, pedirle que los cuidara y a Rafa.

Rafa.

Una punzada de un dolor diferente fue lo último que Alec sintió antes de perder el conocimiento. Nunca llegó a tener esa última caricia, su mano cayó antes de tocarlo.

Magnus limpió sus ojos con furia cuando sintió al Cielo tirar de él. Intentó respirar por sobre todo lo que sentía y lo abrumaba, calmar su corazón. No se podía ir sin saber que Max y Elara estaban bien.

Ignorando el temblor en sus manos hizo todo lo que Tessa le había indicado.

Nada se compara a lo que sintió cuando Max y Elara lloraron por primera vez en sus brazos, cuando los limpió con ternura, los colocó en la pequeña incubadora que tenían preparada y dos pares de ojos se abrieron y se enfocaron en él. Unos gris azulado y otros dorados.

-S-son hermosos -la voz de Magnus tembló mientras veía a sus hijos-. Los amo...t-tanto.

Limpió sus lágrimas y quiso besar a Alec una última vez, pedirle perdón aunque no lo escuchara, pero ya no pudo.

Un momento estaba ahí y al siguiente no.

El Cielo lo reclamaba.


CONTINUARÁ...

Me dolió este capítulo 💔😭 lo siento

Hijo de la luna (Malec Mpreg)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora