SIEMPRE TUYA ©

Capítulo 43.

Dos semanas despues.

Como cada mañana la rutina era la misma desde que volví a la empresa, me levante de la cama y fui directo a la ducha, después de salir, me maquille rápidamente y salí del baño, escogí algo formal, ya que hoy teníamos una cita con el Sr. Dellawey, dueño de la revista Poise.

Respire hondamente y cepille mi cabello junto a mis dientes, ya estaba lista, así que tome mi bolso y mis cosas, incluyendo unas carpetas que traía para unos estudios de muestra, me acerque a Jacob y deposite un beso sobre su mejilla, hoy cumplía su primer mes y estaba precioso, había subido mucho de peso y la lactancia era solo leche materna, ya que yo me exprimía en las noches para dejar el banco de leche.

Baje las escaleras y me tope con toda la familia desayunando, me senté a la par de ellos y los salude, comenzamos a desayunar y admito que ya me acostumbre a ellos, los amo como mi familia y hablando de familia mis padres llegarían mañana así que tendría que ir a buscarlos al aeropuerto, pero como estaba ocupada iría Charles.

Después de terminar Dereck y yo nos fuimos a la empresa, era ya costumbre que el fuera un poco demandante con llegar puntual, hoy era viernes y estaba contenta de que mañana no tendría que ir a trabajar, así estaría todo el día con mi bebe para dedicarle tiempo completo, ya que esta semana no hemos estado juntos.

Llegamos a la empresa y nos dispusimos a trabajar, eran las 8:00 de la mañana y la cita que teníamos con el Sr. Dellawey es a las 12:00 P.M., después de trabajar toda la mañana junto con Grace llego la hora de la flamante cita, tome mis cosas y salí a paso firme de la oficina para ir a la de Dereck, al llegar toque dos veces y me accedió el paso, entre y lo vi sentado en su silla con su vista fija en el ordenador, estaba bastante ocupado mirando unos contratos con unas empresas de los Ángeles.

—Demonios Dereck, son las 11:50 A.M., apresúrate que tenemos la cita con el Sr. Dellawey y tú eres uno de los que más me apura —dije un poco estresada.

—Ya voy Kaylee, estoy apagando el ordenador y sabes que ando ocupado —Dijo él tomando su saco para luego ponérselo mientras salía de la oficina.

Caminamos hacia el elevador y como por mala suerte visualice Alice en uno de los escritorios de las empleadas, esa tipa aún sigue aquí en la empresa, la mire con una mueca para después solo sonreír falsamente mientras chasqueaba mi lengua con cara de pocos amigos.

—Pero miren quién ha llegado, ni más ni menos que la zorra de Kaylee Williams, la cual se casó con el jefe por su dinero —pronuncio ella riendo.

—Es mejor que te calles si no quieres perder tu trabajo Alice —dijo Dereck sonriendo.

—¿Quién es acaso ella para despedirme?, ¿la jefa o quién demonios se cree para poder correrme de mi trabajo? —cuestiono ella burlándose.

—Para que te quede muy claro, no soy la dueña de esta empresa, cariño, pero hago parte de la familia Harrison y estoy a cargo de esta compañía como presidenta, para no ponerme a pelear y mucho menos perder mi tiempo contigo, el cual es muy valioso, recoge tus cosas que estás despedida, cuando vuelva no quiero verte en la empresa Alice, tampoco se te ocurra poner una demanda porque aquí todos sabemos como me has tratado siempre —respondí sonriendo.

Su risa se esfumó y ella solo asintió sin decir nada, camine hasta el elevador y Dereck no paraba de reír por lo que había pasado, su sonrisa era tan contagiosa que comencé a reír al recordar la cara de Alice, era un poema.

—¿Viste su cara de idiota? —cuestione riendo mientras tocia por falta de aire.

—Sí, estaba pálida y no sabía qué decir después de le dijiste que eras la presidente de la empresa, además se lo tenía merecido —respondió Dereck riendo.