One Shots De Harry Potter

• Draco Malfoy - 063.2

One Shot dedicado a
Emma6678.

Titulo: "Potter"

Advertencia: No pues no :'v

Caminaba con un algunos libros en un pasillo. Había despertado tan tarde que me perdí el desayuno y tuve que salir corriendo a la clase de adivinación en el corredor d séptimo piso en la torre norte para que la profesora Trelawney no me dejara entrar con la escusa de que no se pueden alterar los horarios. Estoy pensando seriamente en dejar esa clase.

- ¿Saltandote las clases Potter? - escuche detrás de mi. Pisandome los talones.

- Jodete Malfoy - conteste enojada - no tengo tiempo para tus estupideces.

- Wow, que mal día tuviste Ana - me gire enojada.

- No me llames por mi nombre - me gire enojada - para ti y tu bola de tontos soy solo Potter.

- Bueno, «solo Potter» se nota que hoy no es tu día - hizo una sonrisa burlesca.

- Si que eres fastidioso - me gire con la intención de volver a la torre de Gryffindor pero tomo mi muñeca y me arrastro con él - Malfoy, sueltame ahora mismo.

- Ni lo sueñes - intente forcejear pero era obvio que es mas fuerte que yo. Era dos años mayor que yo.

Me guió hasta un pasillo vacio, sin aulas, sin profesores y sin alumnos. Ni siquiera fantasmas por ahí. Me acorraló entre su cuerpo y la pared.

- Eres muy testaruda Potter - comentó pues en todo el camino no dejaba de quejarme. Era casi un secuestro.

- Cuando Harry se entere de esto...

- No le dirás nada a tu querido hermano - sonrió de forma arrogante.

- ¿Y por qué piensas que no lo haré? - lo rete alzando una ceja.

- Por qué si lo haces tendrías que decirle que no hiciste nada para evitar que te besara.

- ¿Besarme? Tu si estas loco Malf... - sus labios se pegaron a los mios y justo como el había dicho, no hice nada para evitarlo. Una voz en mi cabeza me gritaba que lo alejara, mientras que otra me decía que era demasiado débil para quitarlo y la ultima, proveniente de un lugar desconocido, me decía que lo disfrutará.

Decidí hacerle caso a la tercera y moví mis labios al compás de los de Draco. La sensación en mi estomago era idéntica a la que sentí el la estación de King Cross. Una mano en mi cintura me atraía mas al rubio y sin importar que los libros se cayeran puse mis manos en las mejillas de Draco, acercándolo aun más a mi.

Al cabo de unos segundos nos separamos por falta de aire. Era extraño pero sentia que no era lo mismo de hace unos minutos. La sonrisa de Draco no era arrogante o burlesca y no me sentía enojada o frustrada.

- ¿Aun se lo dirás a tu hermano? - alzo una ceja, y repito, no era una sonrisa arrogante.

- Creo que no - susurré mirando el piso. Estaba segura de que mis mejillas hacían juego con mi cabello pelirrojo.

- Eso supuse - soltó una risa agradable. Y eso era raro de Malfoy.

Durante unos segundos quedamos en un silencio. No era incomodo pero ese silencio se rompió cuando Draco suspiro pasando una mano por su alborotado cabello.

- Madison - alcé la mirada encontrandome con sus ojos grises - no puedo dormir sin darte esto - extendió un pedazo de pergamino el cual tome - no soy bueno con las palabras.

Se separó de mi, tomo su mochila y camino de regreso. Estaba confundida, muy confundida.

Tome mis libros en el suelo y guarde la nota en mi capa.

No sabia si maldecir la tercera voz o agradecerle por esos segundo llenos de placer al sentir los labios de Malfoy.