Deja Vu

24. «10 segundos»

A la semana siguiente, en específico el martes de esa semana y un día después de que oficialmente Bangtan Sonyeondan hubiese hecho su exitoso regreso con el álbum "Love Yourself: Her" y su canción promocional "DNA", los neumáticos de una camioneta color negro rodaban por nuevas calles con seis personas a bordo. Más o menos con tres horas de viaje desde Seúl, BlackPink y sus guardianes llegaron a un hotel de la provincia de Chungcheongnam del Sur, su destino más reciente, donde se llevarían las grabaciones de 2 days & 1 night. 

La provincia era más visitada por gente que vivía a los alrededores que por personas de otras provincias u otros distritos. Muy pronto se dieron cuenta de que aquel lugar bien podía pasar por inhóspito de no ser por las montañas y sus colores otoñales.

El equipo de producción y los presentadores estuvieron a la espera de su arribo y el de los miembros de Bangtan Sonyeondan. Ambos grupos se dieron un protocolario saludo hasta cuando optaron por tomar el desayuno, sin embargo, Jisoo junto con el staff y sus managers no tardaron en desaparecer.

Cuando las siluetas de dos compañeros conocidos por todos surgieron en la serenidad de sus comidas, Lisa supo algo. En definitiva, Kim Jisoo estaba loca. Su amiga había llegado acompañada de un miembro de Bangtan, Seokjin. ¿Esa era Jisoo? ¿La Chichoo que le había comentado hacía un montón de meses de la plática severa con su manager acerca de la relación que tenían con los integrantes de Bangtan? ¿Era esa su unnie la que estuvo reacia a que cualquiera de sus miembros hablase vagamente o hiciera alguna referencia al ship entre BTS y su grupo? Ni siquiera ese día, cuando supieron que trabajarían juntos otra vez, notó en su compañera algún rastro de rechazo o desacuerdo al encuentro entre ellos en un programa.

Confundida, la magnae capturó con la mirada el camino de esos dos chicos y recordó las indicaciones de sus managers: no debían tener contactos innecesarios, comentarios fuera de lugar o faltas de respeto. Estaba en un dilema sobre a quién hacer caso, si a sus managers o a su amiga.

Sin embargo, se trataba de un dilema pasajero y algo a lo que tendría que acostumbrarse. Jisoo, al menos, no lo haría, pero había otra persona que sí que estaba en contienda para consumar la misión de hacerle varias ranuras en la cabeza: Jungkook.

Mientras comía de su estofado de pollo, Lisa deseó poseer un control mental tan alto que no pudiera ser alcanzado por nadie. Se sentía tan llena de exposición en ese momento al sentir su mirada, pese a estar consciente de que muchos la miraban, ya sea por interés en sus rasgos tailandeses o por morbosidad al ser una miembro extranjera dentro de un grupo coreano. Siempre había dado todo de sí misma para causar una buena impresión en la gente. Aun sabiendo que no era la chica más hermosa del mundo, sacaba el máximo provecho de sus cualidades. La inferioridad no era uno de sus puntos débiles y hasta estaba orgullosa de decir que la gente la observaba cuando ella no se daba cuenta.

No era egocéntrica, pero la gustaban los cumplidos y que le dijesen cuán buena era haciendo lo que hacía. Claro, nunca despegaba los pies del suelo y aceptaba que había muchas otras personas con más experiencia que ella. Un ejemplo de estas era Rihanna y CL, ex miembro de su grupo senior 2NE1. Ella las tenía como estandartes para emular a una artista de sus mismas habilidades. Deseaba ser una artista completa y sabía que algún día lograría serlo pues existía una verdad implícita en su vida como idol dentro de un grupo musical.

El hermoso proyecto de BlackPink no existiría por siempre.

Y si bien era muy prematuro pensar en un futuro sin ser parte de BlackPink, se puso a imaginar el cómo sería su vida cuando hubiesen pasado los años.

Comiendo con la mirada baja, se preguntó si en ese mundo alterno que soñaba seguiría teniendo vida esa atención especial para ella. Seguro habría miradas dirigidas con dulces sentimientos. Visualizaba las miradas encendidas de miles de personas coreando lo que pudiera cantar o echando vítores para algún paso de baile genial que hubiese creado con todo su crew. Todo esto la emocionaba, pero ¿Jungkook estaría a su lado?