Ha pasado otra semana sin ver a Sasha y la verdad es que es algo torturoso para mí; me molesta mucho no verla.La semana pasada vino una vieja amiga de visita, Frida, y pasé vários días con ella, cosa que hizo que descuidara un poco a Sasha pero Frida sabe muchas cosas sobre mí que me avergonzaría si Sasha se llegará a enterar; son cosas que hice después de la dolorosa muerte de mi madre mientras estaba hundido en un pozo oscuro y profundo. Entonces decidí evitar que ambas se llegará a juntar por más de cinco minutos.
Sé que Sasha se puso celosa, y he de admitir que me gustó ver eso, pero le aclaré días atrás que solo es una amiga y jamás será competencia para ella; no hay juego, siempre he sido de ella.
Me creyó, y se fue tranquila por eso. Fué de vacaciones por una semana dónde su abuela, en Brooklyn.
Los días pasaron lentos pero todo estuvo tranquilo, y de hecho, hasta decidí no salí con Frida para no hacerle pasar malos ratos a Sash.
La semana por fin se cumplió, pero se me hizo eterna; parecía que siempre era lunes.
En fin, ella mañana está de vuelta.
Estará entre mis brazos y no puedo evitar imaginarme besando su delicado rostro mientras bajo sutilmente hasta llegar a su cuello y aspirar su delicioso aroma; mi droga personal.
Con ese pensamiento me quedé profundamente dormido, y ahora, no puedo controlar mis sueños...
No puedo controlar el sonido de sus gemidos mientras mueve con brusquedad sus caderas contra las mías, tampoco puedo controlar lo tentadores que se ven sus senos cada vez que rebotan al compás de sus movimientos.
Los jadeos hacen eco en la habitación y siento que el éxtasis sube cada vez más.
No puedo evitarlo; coloco una de mis manos sobre su espalda y la jalo hacia mí, ella sabe lo que quiero, me pude leer el pensamiento con solo una mirada; lleva uno de sus firmes y redondos senos a mis labios, y yo sin miramentos, lo devoro con deleite.
Clava sus uñas en mis hombros mientras gime con fuerza e incrementa sus movimientos.
De un movimiento, la giro con firma haciendo que ella quede debajo de mi cuerpo; siendo presa de mí. Se ve muy caliente completamente desnuda en la espera de mis movimientos.
Sus labios están rojos e inchado y sus pezones está muy duros por la acción del momento. Paso mi lengua por su abdomen produciendole espasmo, mi mano viaja hasta su vagina, y entra con tanta facilidad que me excito más al saber cuan húmeda la he dejado.
Sasha sabe llevar mi mente, mi piel e imaginación a niveles infernales pero irónicamente se siente como el paraíso.
Jadea, arquea su espalda, pide más, me da más, se mueve, se calienta, se ofrece, me lo da todo. Me coge.
Y mi cuerpo le rinde tributo al suyo.
Busca con desesperación mi boca, y la obtiene, se bebe mis roncos gruñidos de placer que ella me broca, al tanto, que yo me bebo sus gemidos. Su lengua se come la mía y así inicia el juego.
Mis dedos no han dejado de proporcionarle placer y ella no ha dejado de gemir; así que estamos bien.
Su cuerpo estaba bañado en sudor, su rostro está rojizo y sus labios están tan hinchados que temo vayan a reventar; esa es una de más mejores facetas que amo ver en Sasha Montgomery, cuando es completamente mía.
Ya no puedo más, necesito detener el dolor y darle más de lo que me pide.
Entonces, cuando menos me lo espero y quiero hundirme por completo en ella, el puto despertador suena.
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Sueños más salvajes
Teen FictionElla era fuego y él era hielo, entonces ¿quién quema a quién?