Narrador Stephen.
Escucho como cierra la puerta y suspiro. No se que me pasa con ella pero cuando la veo me dan ganas de ir y hacerla rabiar. Y cuando me mira con esos ojos tan grandes una corriente eléctrica recorre todo mi cuerpo. No se que me está pasando con ella.
Sacudo la cabeza para quitarme esos pensamientos y me siento en mi silla. Enciendo el ordenador y en ese momento tocan la puerta.
-Adelante.-digo y la puerta se abre dejando ver a Carolina.
Carolina es la hija de uno de los socios mas importantes de mi empresa. Y mi gran error fue acostarme con ella.
-Hola cari.-dice y yo la miro.
-Carolina, no me llames cari.-digo, esta se rie y se sienta en una de las sillas que estan en frente mia.
-Lo hare cuando tu dejes de llamarme Carolina. Te he dicho mil veces que me gusta que me llames Carol.-dice y se apoya en la mesa.-¿Cuando vamos a repetir lo que tanto nos gusto?.-pregunta refiriéndose a cuando nos acostamos.
-Por ahora no va a volver a pasar.-digo serio mientras miro unos papeles. Ella se levanta y se pone detrás mia. Me abraza y se pone cerca de mi oido.
-Te prometo que no te arrepentiras.-suspiro y le quito los brazos de encima mia. Me levanto y la miro.
-Carolina, no va a volver a pasar. Fue un error y me arrepiento. Y lo peor es que tú lo sabes.-esta se pone seria y mira a otro lado.
Me vuelve a mirar y esta vez con una sonrisa.
-¿Qué pasaría si mi padre se llega a enterar de que tú y yo nos hemos acostado?.-dice y se mira las uñas. Me cruzo de brazos y la miro con una ceja levantada.-Creo que perderías un gran socio.-dice con una sonrisa.
-Yo creo que tu padre perdería más que yo. Que te quede claro, cuando tu has ido yo he ido y he venido veinte veces, así que no juegues con fuego, Carol.-me giro y salgo del despacho.
Sin saber porque me dirijo hasta la sala de archivos y me paro enfrente de la puerta. Noto como empiezo a ponerme nervioso y no se porque, pero me asusta.
Me doy cuenta de que las llaves estan puestas y sin pensarlo abro la puerta, sorprendiendome al ver a Emma tirada en el suelo con un pequeño corte en la frente. Me acerco lo mas rapido a ella y la cojo. Noto que esta ardiendo y no dudo ni un segundo en sacarla de alli para llevarla al hospital.
ESTÁS LEYENDO
Tenías que ser tú.
RomanceComo en mi primera historia no voy a poner ninguna descripción. Quiero que la vayáis descubriendo poco a poco y sorprenderos. Os aseguro que os va a encantar. Besos enormes❤