Cassiopeia Black estaba asustada, realmente lo estaba pero eso era algo que no admitiría nunca. Fueron condenados a muerte, Cassiopeia quería llorar.
Caminaba atrás de Tina Golstein, una chica con pelo negro y corto y ojos marrones y adelante de su prometido, Newt Scamander, un chico pelirrojo de ojos azules. Entraron en una habitación casi vacía, salvo por una silla flotando arriba de lo que parecía agua.
Cassiopeia sabía que eso no era agua, esa maldita sustancia, ponían algunos recuerdos allí para sentarte en la silla y que mueras felíz. Macabro pensó la chica. Observó a Newt, quien la miraba triste. El no quería terminar así, ella tampoco.
"La rubia primero" dijo el chico que la tenía del codo. Cassie sollozó y miró a su novio, no quería morir.
"¡No! ¡No le hagan daño!¡Por favor!" Gritó el Scamander viendo suplicante a su captor.
"Ya cállate" le dijo y puso su varita en el cuello del chico, Newt dejó de quejarse y se cayó.
"Está bien" contestó la señora de piel oscura que tenía a Tina.
"Te sacaremos unos recuerdos, niña" dijo el chico, Cassie no podía parar de llorar hasta que sintió como le sacaban los recuerdos. El chico de cabellos rubios la soltó y con un movimiento de su varita lanzó los recuerdos de la Black en la piscina.
Cassiopeia vio en ella a su padre, madre y hermano. Su hermanito, como lo extrañaba, sonrió viendo esos hermosos recuerdos.
"¿Quieres entrar, linda?" Le dijo con un tono cariñoso, ella asintió embobada ahora viendo cómo se despedía de su familia para ir por primera vez a Hogwarts.
De repente se encontró a si misma mirando los recuerdos desde la silla, ¿cuando la habían colocado allí? No le importó, estaba absorta en esos bellos recuerdos. Vio como su yo del pasado besaba a Newt en una cita, vio como bailaba con sus amigas, pero de repente la sonrisa se le borró.
Ese recuerdo, no.
Ella se encontraba en San Mungo con un medimago, llorando desconsoladamente, había perdido a su bebé, un bebé que nadie sabía que existió salvo ella y su mejor amiga. Cassiopeia lloró y quiso salir de allí. El recuerdo cambió.
Estaba ella y su mejor amiga, Atenea, en su casa. Cassiopeia lloraba amargamente mientras su amiga la abrazaba.
"Lo perdí, lo perdí" se escuchó la voz de Cassiopeia, rota.
Cassie miró a Newt, quien la miraba confundido, pero de repente el se liberó. Pickett se dijo Cassiopeia.
Newt logró desacerse de los tipos con ayuda de Tina, en ese instante el "agua" subía tratando de alcanzar a la rubia.