Ginny caminaba apresurada hacia su mejor amiga, quien estaba sentada en el pasto con un libro entre sus manos.La pelirroja se sentó bruscamente en el pasto cuando estuvo frente a Aura. La castaña alzó su cabeza para mirarla con las cejas alzadas, Ginny Weasley parecía nerviosa. Tenía la mirada inquieta y no dejaba de jugar con sus finos dedos.
La pelirroja se mordió su labio pensando en cómo empezar la conversación. Hace meses que tenía unas dudas rondando su cabeza y molestándola sin cesar, no era lo mejor hablar con la causa de las dudas pero Aura era su mejor amiga y entendía más del tema que otra amiga suya. Además no se tenía que preocupar que alguien los escuche, el patio en donde estaban ellas estaba vacío.
-¿Que sucede, Gin?- Preguntó dulce Aura al verla nerviosa y callada.
-Tengo dudas.- Murmuró Ginny.
-¿Sobre que? ¿Sobre pociones?- Cuestionó la castaña.
Ginny negó con la cabeza. ¡Ojalá fuera sobre pociones! Aura era extremadamente buena en esa clase por eso le había preguntado si sus dudas eran sobre aquello. Eso sería mucho mejor y no sería raro. Pero no, las dudas eran sobre su sexualidad. Todos en Hogwarts sabían que Aura era abiertamente bisexual, con más inclinación hacia las chicas que a los chicos y la pelirroja últimamente se sentía extraña. Sentía que Aura lucía más bonita de lo normal, sus ojos parecían más azules y llamativos, parecía que no podía dejar de mirar sus labios siempre pintados de un color oscuro. Se sentía atraída por su mejor amiga y odiaba eso.
-Creo que soy bisexual- Dijo rápidamente.
-¿Por qué crees eso?- Preguntó la ojiazul. Se sentó mejor y prestó toda su atención a su amiga.
-Porque creo que me gusta una chica.- Ginny empezó a tocar su cabello pelirrojo con nerviosismo.
Para Aura era raro ver a su mejor amiga tan nerviosa. Ginny Weasley nunca estaba nerviosa, siempre decía lo que pensaba y siempre sabía lo que quería y ahora no podía mirar a los ojos a su amiga y se mordía constantemente el interior de su mejilla. Aura se mordió el labio inferior, sospechaba que Ginny estaba ocultando algo en las últimas semanas, había estado rara y pensativa. Pero jamás se imaginó que sea algo así, la pelirroja siempre estuvo muy enamorada de Harry Potter.
-¿Estás segura? Puede que sólo te parezca bonita.- Aura acarició la mano de Ginny, tratando de reconfortarla pero la chica con pecas solo se puso más nerviosa. -¿Que sientes cuando estás con ella?-
Ginny miró a los ojos a Aura, casi se perdió en ellos al hacerlo. Los ojos de su amiga parecían un mar inquieto que ella no podía dejar de mirar. Aura siempre le había parecido bonita, pero no tanto como ahora. Con toda su atención fija en ella y con el cabello algo desordenado por el viento. Aura lucía preciosa.
-S-Siempre me pongo nerviosa al rededor de ella y tú sabes que yo no soy así.- Habló Ginny mientras miraba sus manos. -No puedo dejar de mirarla y cuando habla sin parar solo quiero besarla para callarla. Amo sus ojos, no puedo dejar de apreciar lo lindos que son y su personalidad, tan risueña y aventurera. Es buena en todo, en clases, en Quidditch y con las personas.-
-Creo que estás enamorada, Gin.- Dijo Aura sonriendo. -Esa chica tiene suerte, cariño.-
Aura parecía tranquila con lo que Ginny acababa de contar pero la pelirroja solo quería arrancarse todos los cabellos. ¡No podía estar enamorada de su mejor amiga! Era como algo prohibido.
-No, no puede gustarme ella.- Gruñó la pelirroja.
-Ginny, es normal que no quieras aceptarlo pero no tiene nada de malo que te guste una chica.- Masculló Aura comprensiva. -Tus sentimientos están bien y son válidos.-
-¡No me importa que me guste una chica!- Dijo Ginny con una mueca angustiada. -El problema es que me gusta esa chica.-
-Nadie sabe si le gusta hasta que lo prueba así que no tienes que preocuparte, Gin.- Dijo Aura. -Puedes tenerla, eres preciosa.-
-¡No puedo, Aura!- La pelirroja hizo un puchero tierno.
Ginny parecía a punto de llorar así que Aura se acercó a ella y la abrazó con cariño. La pelirroja se largó a llorar ahí mismo, entre lo brazos de la chica que estaba enamorada. La castaña acarició su espalda tratando de calmarla mientras Ginny lloraba en silencio en su hombro.
-¿Quien es, Ginny?- Preguntó en su oído. -¿Por qué no puedes?-
-Porque eres tú.- Susurró entre lágrimas.
Aura se separó para mirar a Ginny a los ojos con la boca abierta de la sorpresa. Jamás se hubiera imagina que sería ella, pensó qué tal vez era Pansy Párkinson, esa insoportable Slytherin que odiaba a los Weasley. Pero no ella. Se sintió mal por Ginny en esos instantes, la pelirroja era preciosa. Cabello rojo que brillaba como el fuego, llena de pecas y con una personalidad que todos amaban. Pero Aura no la veía como algo más que su mejor amiga y menos cuando había empezado a tener algo más que amistad con Parvati Patil.
-Oh, mi pequeña Gin.- Murmuró con tristeza. -Me siento halagada.-
-No te atraigo, ¿verdad?- Masculló Ginny.
-Eres preciosa.- Dijo Aura con una mueca triste. -Pero eres mi mejor amiga desde pequeñas, eres como mi hermana.-
Ginny se sintió devastada en esos momentos. Su primer enamoramiento hacia alguien del mismo sexo y era hacia su mejor amiga que la acababa de rechazar diciendo que eran como hermanas. Aura la veía con lastima y con comprensión.
-¿No te parezco bonita?- Preguntó la pelirroja.
-¡Eres una de las chicas más lindas que conozco, Ginny!- Dijo en alto su amiga. -Y tienes una gran personalidad y un corazón de oro, tal vez antes te veía como algo más que una amiga pero ahora ya no, Gin.-
-¿Antes me veías diferente?- Preguntó confundida.
-En quinto curso tenía un pequeño enamoramiento.- Aura se sonrojó hasta las orejas. -Fue algo tonto.-
-¿Por qué no me lo dijiste?- Ginny lucía preocupada de nuevo. Aura le sonrió con tristeza.
-Estabas perdidamente enamorada de Harry Potter hace menos de dos meses, ¿cómo crees que te diría algo así?- Dijo la castaña. Se encogió de hombros.- Pero no importa.-
-¿Ya no te atraigo en ese sentido? ¿Por que?- Preguntó Gin. Vio a Aura vacilar y dudar. -Aura, dímelo por favor.-
-Parvati y yo estamos intentando algo.- Murmuró con pena.
Ginny tan solo soltó un pequeño oh. Miró hacia otro lado con melancolía. Tal vez acababa de arruinar su linda amistad al confesarle que era ella la chica que le gustaba, se sintió tan mal porque amaba su amistad con Aura. Un día con la castaña era un día que siempre recordaría, ella le alegraba sus días.
-Igual seremos mejores amigas, Gin.- Dijo Aura sonriendo. -Sabes que vendrá alguien quien te ame de esa manera que quieres.-
Ginny le sonrió forzadamente y asintió con su cabeza, la castaña se tiró en sus brazos dándole un abrazo reconfortador. La chica de pecas quiso volver a llorar al tenerla entre sus brazos sabiendo que ella no sentía lo mismo.