Todo esto sucedió en un pueblo ubicado cerca del puerto de Veracruz, llamado La Única, nombre puesto porque sólo había una tienda de verduras.
Se cuenta que al principio de 1800 en ese pueblo existía una señora a la cual la gente del pueblo no quería puesto que decían que era una poseedora de maldad y magia negra, así que para sacarla del pueblo llamaron a muchos sacerdotes, los cuales fueron muriendo poco poco, uno a uno, así que el pueblo decidió sacarla entre ellos y quemarla. Así sucedió, pero antes de morir se dice que hizo un conjuro y maldijo el pueblo.
Cuentan que años después, unos jóvenes trabajaban en la agricultura (entre ellos el papá de mi abuelo), tenían que pasar todas las mañanas por la calle donde existía esa señora,y resulta que un día mi bisabuelo no pudo ir (no recuerdo la razón), así que sólo fueron sus amigos.
Se dice que eran como las cinco de la manana (en aquellos tiempos se acostumbraba levantarse temprano), sintieron miedo y pánico acompañado con un sudor frío recorriendo cada parte del cuerpo de los jóvenes al entrar en esa calle. Uno de ellos sintió cómo una flecha le atravesaba el cuello y lo dejaba inconsciente, pero entre sueños recordaba la imagen de una hermosa mujer cubierta por una capa larga y negra, que en pocos segundos ha convertido el hermoso rostro en un maléfico demonio, destrozando a sus companeros, y dejándolos sin ninguna parte de su cuerpo unida.
Unas horas después ya había amanecido, y encontraron al joven inconsciente y toda la calle llena de sangre, pero al despertar el joven empezó a dar gritos de locura. A consecuencia de esto se suicidó tres años después dejando su alma vagando, y por esa razón cerraron la calle para siempre. En estos tiempos nadie pasa por ahí.