Siempre fui buena para las palabras. Desde que aprendí a leer y fui atrapada por los maravillosos libros, ame y amo la palabras más que cualquier otra forma de expresión.
¿Te ha pasado alguna vez querer decir algo pero no saber exactamente cómo o d...
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¡Hola por allí! ¿Cómo estás? ¿Cómo anda tu vida como humano? (? Jajaja
Hoy, estoy muy contenta porque tuve una semana muy interesante. Si me siguen en Instagram o Facebook, saben que ayer fue la graduación en el ministerio de Kairos, de pandero y danza, de mi amada líder del grupo de pandero de mi Iglesia local. Fue una hermosa fiesta y estoy muy feliz por ella y todas las graduadas.
Sin embargo, ese no es el tema de hoy. 😉
Saben, hace poco hubo un retiro para jóvenes de la región de Buenos Aires centro y les juro que aunque yo no pude asistir los tres días, me cambió el corazón. Lo cual pienso que entonces cumplieron su propósito, ya que el lema o tema central del retiro era Transformados. Los dos días a los que pude asistir, fue increíblemente extraño que cada prédica hablaba más o menos de lo mismo. Y eso, es de lo que voy a hablar hoy.
La Biblia dice algo muy cierto y es que uno solamente puede transformar su vida, si transforma sus pensamientos.
Romanos 12:2.
Y acá es donde les abro un poquito mi corazón, como me gusta hacerlo siempre. Sean buenitos.😊😊😊
Saben, llevo en el camino de Dios hace ya más de cinco años. He tenido mis altos y bajos, como todos supongo, pero nunca me aparté de él. Siempre supe que yo era mucho mejor con él que sin él. El caso es, que hubo una serie de incidentes en mi vida que me llevaron a llenarme de odio, amargura y sí, falta de perdón. Déjenme los ubico un poco.
Desde que yo comencé en mi Iglesia, tuve y tengo una serie de amistades que amo con mi vida, pero dentro de ellos, esta mi mejor amiga que es la persona que más me sostuvo en todo este tiempo. Verán, hacíamos todo juntas. Íbamos a todos lados juntas, yo iba a su casa y ella a la mía. Siempre andábamos juntas cuando podíamos. Hubo un momento, donde varias circunstancias hizo que nuestras otras amistades se apartaran un poco de nosotras, pero como yo soy muy leal, nunca me aparté de ella. La cuestión, es que a causa de esto, rumores comenzaron a circular.
Saben, he aprendido a base de golpes lo que es capaz de hacer una persona cuando no se da cuenta, o sí se da cuenta no lo sé, de las cosas que habla.
Yo no sé cómo sean sus iglesias, o las personas dentro, o lo que sea. No es mi intención desacreditar ningún ministerio o algo así, es por eso que yo nunca digo el nombre de mi Iglesia o pastores, para que no sea vea ninguna preferencia o para que no piensen que mi intención es echar culpas o lo que sea. Desde el principio, este blog se trata de lo que vivo como cristiana, con completa honestidad, y por más que este hecho de cosas buenas y geniales, también hay algunas no tan buenas.
Mi amiga y yo, somos muy, muy unidas. Siempre le digo que si la ceremonia parabataifuera real, ella sería la mía, jajaja. El punto es, que debido a esta cercanía, y que ambas permanecíamos siempre juntas, la gente comenzó a hablar. Corrían los rumores oscuros y por supuesto, no reales sobre mí, ella y hasta mi familia. Esa fueron una de las cosas que me llevaron al límite.
