¡Holaaaaaaaaaaaa!¿Saben cuánto extraño escribir en este loco blog?
Uff, no se dan una idea, jaja.
Sí estuve un poco desaparecida... (¿¡UN POCO!?)
Bueno, bastante desaparecida, jaja.
Pero es que de verdad me costó bastante adaptarme a la nueva rutina de estudiar, trabajar, la Iglesia... pero creo que lo estoy logrando y es por eso que estoy aquí.Saben (jaja me encanta hablar en plural como si una multitud me leyera jaja), últimamente me estuve dando cuenta de unas cuantas cosas.
Por ejemplo, que no importa cuántos años de experiencia o años de edad tengas, los exámenes siempre te revuelven el estómago por los nervios.
De hecho el martes tuve mi primer examen y estaba que no podía mantener la calma, 😂😂.También descubrí que cuando algo te apasiona realmente todo, y de verdad, TODO, vale la pena, el esfuerzo y hasta las lágrimas.
Atado a eso, me di cuenta que para lograr algo con excelencia es de verdad necesario dejar de lado algunas cosas por aquellas que considerás más importantes.
Por ejemplo, la semana anterior tuve que enfocarme en estudiar el doble porque al ser yo becada mis notas no pueden ser bajas. Así que eso se tradujo a menos salidas con amigas, menos lectura por ocio y cosas así. Parece algo banal, pero luchar por algo significa exactamente eso, dejar de lado cosas que te agradan o te hacen feliz, por un bien o meta mayor que anhelás alcanzar.
Esto, mis amados, se lo llama sacrificio.De hecho, este último tiempo o mejor dicho, este principio de año, descubrí con mayor intensidad lo que significa el sacrificio.
Porque una cosa es leerlo, escucharlo y hasta enseñarlo, pero otra muy diferente es vivirlo.
Diferente porque lo siente tu cuerpo, lo juzga tu mente y lo resiente muchas veces tu corazón.Y ahora es momento de la hora culta. Espérense que me pongo los lentes para verme más sabia. 😎
La palabra "sacrificio" proviene del latín "sacro" + "facere"; es decir, "hacer sagradas las cosas", honrarlas, entregarlas.
Este es su significado etimológico, actualmente se le da varios significados según el contexto en donde se use.
Pero siempre me gusta ir a los inicios de algo, el significado de donde nació.Entonces, viéndolo desde ese punto, cuando uno se propone alcanzar algo es necesario que este "algo" sea tan sagrado que seamos capaces de dejar todo por lograrlo. Es decir, que si estamos estudiando una carrera que realmente nos gusta, entonces inevitablemente llegará el momento en donde vas a tener que hacer algo sagrado, dejarlo ir y sacrificarlo por aquello que está en tu corazón tener.
Y sí, una carrera no es lo único. Puede ser un sueño específico o varios, puede ser un plan a futuro... lo que sea conlleve un gran esfuerzo de nuestra parte, tarde o temprano necesitará sacrificios.
Claro que esto no es fácil. No Es sencillo pasar de ver a tu pareja todos los días a dos o tres veces por semana como mucho por tener que estudiar la carrera que soñás. Tampoco es fácil dejar de escribir por tener que darle prioridad a otras cosas en tu vida que exigen tu completa atención. Así como de igual forma una madre sacrifica muchas veces lo que quiere o desea por el bienestar de su pequeño.
Y tal vez pienses, ¿por qué el ser humano a pesar de que el sacrifico es agotador y muchas veces doloroso, lo continúa haciendo?
La respuesta es el amor. Así es, el que ama se sacrifica por su objeto de amor.Inevitablemente esto me lleva a mi amado Dios. Porque bueno, soy su hija y todo lo que hago tiene que ver con él; incluso este blog que tanto amo.
Saben, siempre me maravilló la idea de que un Dios que lo tenía todo, que tenía todo el poder del mundo, que era capaz de lograr todo lo que quería con un chasquido de sus dedos; fue capaz de sacrificarse a si mismo como lo hizo con Jesús. Jesús es el mayor ejemplo de sacrificio.Y acá quiero hacer un paréntesis. La palabra sacrificio no significa simplemente "matar" algo, no, para mí su significado es más profundo, y nos habla se entrega, de amor, de dejar algo por alguien, de ser capaces de olvidar nuestro ego u orgullo por ese bien mayor.
El bien mayor de Dios éramos nosotros. El bien mayor de Jesús eran nuestros corazones. Y yo pienso que él dijo, voy a hacer lo que sea con tal de enamorar tu corazón. Y cuando yo viva en él, vamos a ser uno y todo ese dolor y sufrimiento lo voy a reemplazar con amor, luz y paz.
¿Cómo es posible tanto amor?
Es por ese amor que Dios entregó a Cristo, su propio hijo, y es por ese mismo amor que Jesús, el único hijo de Dios, entregó su vida en forma de pago por todos nosotros.
El sacrifico de Dios fue dar una parte de si mismo al mundo. Y el sacrifico de Jesús fue dar su propia vida por amor y obediencia al Padre.¿Cómo no amarlo? ¿Cómo no corresponder tanto amor si él dejo de lado todo, entregó todo, hizo sagrado y consideró un honor todo lo que dio, por mí?
Hoy en día estoy descubriendo poco a poco lo que significa vivir en sacrifico contante a Dios, o como él mismo lo dice en la Biblia, ser sacrifico "viví". Hoy en día aprendí a considerarlo un gran honor, dar, entregar y hacer sagrada mi vida para alcanzarlo a él.
Sé que puede ser un concepto raro y que en estos tiempos se lo ve como algo malo o doloroso, pero si volvemos a la raíz, al origen, veo que Dios encontró que darlo todo por mí era un honor. Y yo doy mi vida a él para honrar ese sacrificio.
Me alegro de estar una vez más por acá, y aunque es todo por hoy, tengo muchas cosas más para contarles... por ejemplo... ¡¡somos 107 en la página oficial del blog!! Es una increíble felicidad para mí. Y sé que muchas cosas más nos esperan.
Ten fe mi querido lector, el sacrifico no es malo, no cuando es tu corazón el que le das a Dios, porque no hay mejores manos que las suyas.
Así que me despido hasta pronto, y por cualquier cosa, aquí nos leemos.😉
Con mucho amor, Poly. 💜😉😘
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El Blog De Guerrero.
AcakSiempre fui buena para las palabras. Desde que aprendí a leer y fui atrapada por los maravillosos libros, ame y amo la palabras más que cualquier otra forma de expresión. ¿Te ha pasado alguna vez querer decir algo pero no saber exactamente cómo o d...