Narra Lourdes.
- ¿Estas bien?
Asentí escupiendo agua con sangre. Puse un paño de papel en mis dientes para detener un poco el sangrado.
- Dile a Annie que nos vamos...
Pude pronunciar. Manuela se fue y yo me quedé limpiándome la boca. Marlli llegó y se dispuso a ayudarme.
- Cami me quiero quedar..
Negué.
- Vamos a casa.
- Dejala que se quede -Intervino Marlli- Hay habitación libre para visitas, puede quedarse.
Suspire y volvi a escupir agua.
- Esta bien. Mañana vuelvo a buscarte.
Asintió y se fue.
- ¿Como te golpeaste?
- Escapando de Juan Luis... Me resbalé y caí. Golpee mi boca con un escalón del living.
- Quizas el suelo estaba mojado.
- Si, tal vez...
Por fin el sangrado se acabó.
- Gracias por todo pero ya debo irme...
- Oh... Esta bien.
Me despedí de ella y me fui. Queria caminar un poco asi que iría caminando. Ademas estoy acostumbrada.
*****-*****
- Cami...
Voltee asustada. Suspire.
- Juan Luis.
Conteste cortante.
- Lamento lo del otro dia... No era mi intención incomodarte y menos hacer que te lastimes.
Se acercó y tocó la cascarita de mi labio. Me alejé.
- Si, ya. No es nada. ¿Que quieres?
- Quería salir contigo esta noche... ¿Puedes? Annie puede quedarse en casa con Jason y mi hermana.
- No lo se... Estoy cansada.
Me apoye en la barra del bar.
- Sólo a cenar... Luego te dejo en tu casa.
Acarició mi mano, temblé.
- Esta bien...
- Paso por ti a las 20:10 ¿Quieres?
- Esta bien, no hay problema.
- Ok... Y ahora si puedes vendeme un agua mineral.
Sonreí y fui hasta la heladera.
- Toma... Me pagas luego.
- Esta bien... ¿Estas sola?
- No, pero mis compañeros estan en sus puestos un tanto aburridos ya que no hay mucha gente. Para estas fechas es así.
- Ah... ¿Y tu que haces?
- Depende el día... Llevo pedidos a domicilio, soy mesera a veces, manejo la caja, limpio... Aqui todos hacemos todo, no hay un puesto fijo. Entré a trabajar como mesera pero luego me puse con otras cosas.
Asintió.
- Yo tengo que viajar en unos días... Tengo concierto en Guatemala.
- Que lindo... Me gustaria conocer.
- Ven conmigo.
Negué.
- No puedo dejar de trabajar...
- Te consigo reemplazo... Toda mi familia irá, incluyendo a Natalia.
Rodó los ojos.
- Es solo una semana. Vamos.
- Si Natalia va, yo no.
- ¿Por qué?
- No creo haberle caído bien, y ella a mi no me cayó bien. Para evitar problemas.
Hizo una mueca.
- Quizás le mienta... No quiero que vaya en realidad. Prefiero que estés tú.
Me sonroje.
- Bueno... No lo se. ¿Que hago con Annie?
- Ella puede ir también. Tengo aviones privados, no pasa nada.
Subí mis hombros.
- Luego te aviso.
Asintió.
- Y ya puedes soltarme...
- Ah si... Lo siento.
Sonrió.
- Aguarda un segundo. Voy a atender esa mesa.
- Ok, tranquila.
Sonreí y fui a seguir con mi trabajo...