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Narra Lourdes.

(Maratón 1/?)

- Gracias Marlli pero yo ya me voy...

- Quedate a cenar...

- Lo siento, pero no.

Me miró raro.

- ¿Hay algo o alguien que te esté molestando?

- No...

- Yo se que si... ¿Que pasa?

Suspire cansada.

- Natalia me molesta... No se... Me da mala espina esa chica. No es de mala pero algo no me gusta.

Sonrió.

- Eso son celos.

Me sonroje.

- No...

- Vamos, que si lo son.

Reí.

- Bueno... Quizás si.

Rió bajo.

- ¿Te gusta mi hijo?

- No lo se... -Me sonroje mas- Es que me confunde... Un día me dice cosas bonitas, por suponer, y al otro no me conoce... Es que no lo entiendo.

Suspiró.

- Amm... Él es así.

Hizo varias muecas.

- Algo pasa... Y usted lo sabe.

- Bueno... Natalia es una razón, su padre es otra...

- ¿Y por qué?

- Su padre le ha hecho muchas cosas a lo largo de su vida y Natalia esconde algo... Es mas bipolar que de costumbre. Hay cosas que él no dice y ese es el problema

Asentí.

- Me voy... Dile a Annie que vendré a buscarla mañana.

- Esta bien...

La saludé y me fui.

Iba caminando demasiado tranquila, cuando una moto se frena justo a mi lado. Me sobresalto y miro; Era Juan.

- Sube. Te llevo a tu casa.

Suspire y seguí caminando.

- No lo compliques... Quiero que hablemos.

- Yo no, lo siento.

Llegué a la esquina y me quedé esperando para cruzar.

- Cami, sube... Ahora.

Rodé los ojos. Pero subí a la moto.

- ¿Donde me vas a llevar?

- A algún lugar para que hablemos...

Suspire. Me sostuve de su cintura, asi fuimos todo el viaje hasta que freno en un edificio.

- Ese es mi departamento...

Murmuró señalando un balcon arriba de todo el edificio.

- Ven...

Entramos a este y fuimos al ascensor.
Habia un silencio bastante incómodo. En el piso 7 subieron dos chicos, altos y por su acento me di cuenta que eran españoles. A uno lo reconocí, "El Rubius". El otro no se quien era pero era bastante bonito.

- Hola Juan... -Saludó Ruben- ¿Subes o bajas?

- Ruben... Y subo.

El otro chico se volteo. Me sonrió.

- ¿Ella está contigo?

Le preguntó a Juan. A lo que él, algo molesto le dijo que si.

- ¿Es tu novia?

- Si..

- ¡No! -Casi grité- Sólo soy su amiga...

Juan me miró como diciéndome "Te voy a Matar"

- Ah... Yo soy Raúl, mucho gusto.

Tendió su mano, la tomé y Sonreí.

- Lourdes...

Sacó de su bolsillo una tarjeta y me la dio, la tome y Sonreí antes de bajar del ascensor. Ademas el tirón de Juan fue bastante bruto.

- Auch...

- ¿Por qué hiciste eso?

- ¿Que cosa?

- Hablarle a ese tipo.

Reí.

- ¿Ahora no puedo hablarle a nadie? ¿No puedo conocer gente? Por favor.

Abrió la puerta y entramos a su departamento. Me agarró de la cintura y me acorraló contra la pared.

- Hiervo de celos, Camila. Necesito que aclaremos las cosas.

Suspire. Estaba muy cerca.

- Perdón no... Pero no sabes la cantidad de celos que tengo yo. Además, yo no voy a acostarme contigo. Veo que esas son tus intenciones.

Lo empuje, y fue raro apartarlo de mi.

Ah no, las cosas conmigo no son así

Un corazón en JuegoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora