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Narra Lourdes (Camila)

Con razón me faltaba uno de los boletos a L.A.

Ahora todo cuadra.

Juan me envió eso para reencontrarse conmigo. Me parece un detalle tierno de su parte y me alegra que él no esté muerto.

Una vez lista, bajé a la entrada del hotel.

Juan estaba ahi, abrió la puerta y sostuvo mi mano.

- Suba, Reina hermosa.

Reí, sonrojandome. Subí y cerró; Luego subió él en su lado y nos fuimos.

- ¿Que pensaste al ver las entradas?

- La verdad, creí que fue una amiga del trabajo. Me asombré y me gustó mucho.

- ¿Y ahora?

- Esto parece irreal. En serio pensé que estabas muerto...

- No... Fue embrollo de Natalia antes que nazca el bebé. Para que deje mi carrera y me ocupe de ella. O sea, tuve un accidente pero sin lesiones ni nada. Ella inventó eso y mucha gente aún cree que morí. Sinceramente extraño mi carrera, mis fans, mi micrófono, mi equipo de trabajo... Es difícil.

Me quedé en silencio.

- ¿Desmentiste eso?

- No me dejaron salir a desmentirlo, lo hizo mi tía pero aún no lo creen.

Suspiró.

- En fin... ¿Tu cómo estas?

- Bien... Bueno, no puedo mentirte. No estoy bien. Soy bulimica, estoy deprimida hace no se cuantos meses, sólo quiero desaparecer...

Miré por la ventanilla y traté de no llorar.

- ¿Raúl no te hace feliz?

Lo miré.

- ¿Sabes algo?

- Lo vi un par de veces... Hablamos cada tanto y sé que está contigo. Es probable que se casen ¿No?

Me quede asombrada.

- Mm... Bueno... Si, es cierto... Aunque no quiero casarme con él.

- ¿Por qué?

- No siento el suficiente amor para casarme. Al menos no tengo valentía para hacerlo. Si, lo quiero demasiado y todo pero él sabe mi situación e intenta no presionarme.

- ¿Y eso que significa?

- Sabe que aún tengo a alguien mas en mi corazón...

Volví a verlo. Medio sonrió.

- ¿Y que piensas hacer?

- No creo casarme. En realidad lo mencionó, si, pero no preparamos nada ni mucho menos. Además creo que quiere volver con Sara...

- En ese caso... ¿Tu que Harias?

- Estaria bueno que dejes de responder con preguntas.

Los dos reímos.

- Lo siento...

- Ya, esta bien... Bueno, si vuelve con Sara yo estaría igual que siempre. Sola, trabajando, ocupándome de Annie... En fin. Ahora estan mis padres así que estoy mas tranquila.

- Yo te lo avisé.

Encontrarás a tus padres. Estoy seguro...

- Es verdad -Sonreí- Hago las pases con mamá y conocí a mi papá. Ambos se disculparon por su ausencia y tal. Me llevo bien con los dos y sus respectivas parejas.

- Me alegra por ti. Después de tanto lograste salir adelante.

- No mucho... Baje muchísimo de peso y..

- Estas enferma, es entendible -Me interrumpió- Pero sigues igual de hermosa que antes.

Me sonroje.

- ¿Cuanto pesas ahora?

- 46kg... A lo que yo pesaba 64kg.

- Bajaste en serio... ¿Y el tratamiento?

- Bien... Ahora trato de engordar un poco. Tengo tratamiento psicológico y además hago una dieta a base de vitaminas y demás.

Rió. Lo mire raro.

- Me hiciste acordar a mi canción... Vitamina...

Reí mirando por la ventana.

- No esa clase de vitaminas, Juan Luis.

- Creo que eso es lo que te falta.

Golpee su hombro.

- Puerco.

- Ya... Mira, llegamos.

Estacionó el coche frente al estadio. Bajé rápidamente y miré el gran cartel.

Evanescence: Fallen tour  renewed.

- Esto es un sueño...

Juan se acercó a mi lado.

- Entonces no despiertes...

Sonreímos.

- Vamos. Esa banda de rock nos espera.

Agarre su mano y entramos corriendo al estadio.

En serio...

No quiero despertarme.

Un corazón en JuegoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora