Salí de la cancha y me dirigí al edificio donde estaban los salones de clases. Caminé por los pasillos de U.A. abrumada por lo que había ocurrido. Todavía podía sentir las miradas de todos sobre mí, oír sus comentarios y ver sus rostros asqueados.
Intenté ahuyentar esos recuerdos mientras entraba a la clase 1-C, la cual estaba vacía y silenciosa como una biblioteca. Me acerqué a mi asiento y me senté, para luego abrir mi mochila en busca de mi almuerzo. La apoyé sobre la mesa frente a mí y cerré la mochila con cuidado.
Pasé los siguientes diez minutos entre bocado y bocado, intentando no recordar lo que acababa de ocurrir. De todas formas, no podía dejar de pensar en que tendría que volver a la cancha en una hora, para poder continuar con la próxima actividad del festival, y competir contra Mei. No importaba si ganaba o perdía, sería considerada una villana para los alumnos de U.A.
De un momento para otro, se abrió la puerta de la clase 1-C y se oyeron unos pasos. Levanté la mirada de mi almuerzo para encontrarme a Todoroki, cargando con una pequeña bolsa de polietileno.
Él se acercó tranquilamente a donde yo estaba sentada, tomó una silla perteneciente a alguno de mis compañeros de clase y se sentó sin decir palabra. Lo observé sorprendida, sin entender qué estaba ocurriendo.
—Todoroki... ¿Qué haces aquí?
—Quiero hacerte compañía—murmuró, mientras abría la bolsa de polietileno y sacaba un plato con soba fría y palillos.
—Gracias—dije, con una sonrisa. —Me estaba aburriendo sola aquí.
—Deberías ir al comedor más seguido—propuso. —Podrías sentarte con nosotros.
—¿Con la clase 1-A?
—Sí. Eres amiga de las chicas, ¿verdad?—continuó.
—No lo sé—solté, con la mirada puesta en mi almuerzo. —No sé si querrán que las acompañe en el almuerzo. No hablo con ellas hace tiempo.
—¿Por qué no hablas con ellas?—preguntó Todoroki, antes de tomar un poco de soba fría y llevársela a la boca.
—Es extraño. Intenté ayudar a Yaoyorozu...—comencé, pero me callé rápidamente. No podía hablarle a Todoroki sobre lo mal que había estado Yaoyorozu a razón de su ruptura, aunque él probablemente estuviera al tanto de ello. Prefería no sacar ese tema—, pero Jiro no me lo permitió. Creí que las chicas me buscarían luego, pero no me han vuelto a dirigir palabra.
Tomé el último bocado de mi comida y lo llevé a mi boca. Todoroki tragó antes de preguntarme:
—¿Y tú has intentado hablar con ellas?
Negué con la cabeza.
—No creo que Yaoyorozu quiera verme. Tampoco las demás—dije, luego de haber tragado. Comencé a guardar mis cosas en mi mochila, ya que había terminado de comer.
—¿Por qué lo dices?
Recordé a Yaoyorozu diciéndome que me callara cuando intenté ayudarla. No podía decirle eso a Todoroki.
—No lo sé—respondí.
—Entonces búscalas. Quizá ellas estén esperando a que tú les hables.
Lo que decía Todoroki tendría sentido si no fuera porque Yaoyorozu realmente no quería verme.
—Tal vez lo intente—murmuré, sabiendo que en realidad no lo haría.
Él asintió. Un silencio nos inundó durante unos segundos, aunque no me sentía incómoda junto a Todoroki.
—Hay algo que quiero decirte. Es por eso que he venido—se sinceró Todoroki, mientras apoyaba los palillos sobre la mesa ya que había terminado de comer. Comenzó a guardar sus cosas en la bolsa de polietileno.
—¿Qué cosa?
Todoroki tardó unos segundos en responder:
—Todos están especulando sobre tu Particularidad. He visto sus miradas de repulsión y he oído que están en desacuerdo con que estés en U.A.—comenzó a decir, para luego levantar su mirada. Sus ojos eran serios y decididos. Como los de un gran héroe que sabe qué es lo correcto. —Tienes que ignorar lo que dicen de ti. Mereces estar en U.A. Te has esforzado mucho para llegar hasta aquí, has entrenado duro. No te rindas ahora.
Lo observé sorprendida. Nunca había oído a Todoroki hablarme de esa forma, con tanta pasión y preocupación de que yo no comprendiera su mensaje. Él estaba mostrando otra faceta suya.
—Todoroki, no pienso rendirme—murmuré. —Aunque sé que seré considerada una villana, no me dejaré vencer.
Todoroki asintió y se levantó de la silla. Observándome desde arriba, agregó:
—¿Sabes?, para mí nunca serás una villana.La segunda fase del festival comenzó media hora después. Todos los alumnos nos ubicamos en las tribunas que rodeaban las canchas, expectantes del duelo. Los primeros en enfretarse eran Iida y Bakugou, ambos pertenecientes a la clase 1-A y los dos primeros en haber cruzado la meta.
Cuando todos estábamos ubicados, incluidos los héroes poseedores de agencias, el primer duelo comenzó, teniendo como vencedor a Bakugou.
Los duelos fueron pasando uno detrás de otro rápidamente. Todoroki y Tokoyami fueron los siguientes, y Todoroki fue el vencedor. Luego, Tsuyu y Uraraka, Tsuyu siendo la ganadora. Después, Midoriya y Kaminari, Midoriya siendo el vencedor. Más tarde, Yaoyorozu y Tetsutetsu, aunque no supe quién había ganado, ya que estuve durante ese tiempo en una pequeña sala, esperando a que fuera mi turno.
Con los nervios a flor de piel, entré en la cancha al oír mi nombre y el de Mei. Los gritos del público eran una enorme nube, llena de apoyo a su estudiante favorito y desprecio al otro, que parecía una amenaza constante por su gran tamaño.
Las dos nos preparamos para el duelo, ignorando los comentarios del público, hasta que Present Mic nos indicó que comenzáramos.
Mei no tenía ninguno de sus artilugios. Yo había pensado que traería alguno nuevo, ya que yo había destruido los que llevaba en la carrera, pero no fue así. Sin embargo, ella debía tener alguna estrategia que le permitiera vencerme. Y yo también tenía una.
Mei comenzó a correr hacia mí, y yo levanté mis manos. De mis palmas salió sangre, que la golpeó directo en el estómago, y me concentré en que la fuerza fuera suficiente para hacerla retroceder. Quizá no podría hacerla salir del límite de la cancha de un sólo disparo, pero de esa forma la alejaría de mí y evitaría un ataque de su parte.
Mei retrocedió sobre sus pasos, aunque arrastró los pies sobre la arena de la cancha, no cediendo a la fuerza de la sangre del todo. La fuerza con la que chorros de sangre salían de mis palmas se reducía paulatinamente. Mientras que yo tenía menos fuerza, ella se acostumbraba al dolor de los golpes y retrocedía cada vez menos.
Decidí que debía dejar de disparar. Si continuaba forzándome de esa forma por más tiempo, me desmayaría y perdería el duelo.
Hice que la sangre dejara de salir de mis palmas mientras yo bajaba mis manos y las dejaba caer a los dos lados de mi cuerpo. Retrocedí unos pasos hasta estar a escasos centímetros del límite de la cancha. Mei, por su parte, comenzó a correr de nuevo hacia mí. Cuando estaba a punto de tocarme, la esquivé y rodeé. Luego, volví a disparar.
Mei ya estaba cerca del límite, por lo que no tuvo tiempo de poner freno a la fuerza de mi disparo. Cayó hacia atrás, justo sobre la línea que decidía quién tenía la victoria de cada duelo.
—¡Mei está fuera de los límites!—anunció Midnight, dando el duelo por finalizado. —¡T/A T/N es la ganadora!
Tomé un profundo respiro. Estaba contenta y aliviada de haber ganado, pero cansada luego del duelo. Todo a mi alrededor daba vueltas, y mis piernas temblaban. Quise formar una sonrisa, o hacer un mínimo gesto que demostrara mi alegría, pero estaba exhausta. No había forma de que pudiera ganar el siguiente duelo.
Mientras Mei salía de la cancha, todavía enfadada conmigo, y yo me iba por el otro lado, oí a Midnight comunicar:
—¡El próximo duelo al que T/A se enfretará será contra Yaoyorozu!
Ahora sí que no había forma de que pudiera ganar.~~~~
¡Sorpresa! ¡Hoy es el cumpleaños de Todoroki y Tipo O ha vuelto (y esta vez para quedarse)!
Siento no haber actualizado por tanto tiempo :( De ahora en adelante, subiré capítulos seguido, lo prometo.
También siento no haber respondido comentarios y mensajes últimamente. Estos días los estaré leyendo y respondiendo.
En fin, quería darles este capítulo como un regalo por el cumpleaños de Todoroki (estaba listo desde hace unas horas, pero decidí esperar hasta que fuera su cumpleaños alskshsks). Espero que los haya sorprendido (gratamente) y hayan disfrutado <3
Nos vemos en pocos días. Goodbye!
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Tipo O [Todoroki x tú]
FanfictionTodoroki y tú eran vecinos y amigos de la infancia. Cuando Todoroki desarrolló su Particularidad, a los cuatro años, Endeavor le prohibió relacionarse con otras personas para entrenarlo día y noche. Cuando tenías once años, y sin poder despedirte, t...