WREAK HAVOC | TEEN WOLF x THE ORIGINALS.

006.

capítulo seis.
(silenciado).

Mientras que Scott intentaba que un médico atienda a Liam, quien era sostenido por Stiles; Hayley levantó la cabeza aspirando el aroma mientras sonreía hacia una dirección, ganándose una mirada rara de Liam.

—Hola, Melissa— su hijo saludó a Melissa mientras que Hayley se acercaba a darle un abrazo.

La mujer suspiro.

¿Por que demonios no puedo tener hijos normales?.

Trajeron una silla de ruedas, sentaron allí a Liam, mientras que Melissa miraba su pie.

—No te preocupes, Liam. Cuidaremos bien de ti— le dijo la señora McCall con una sonrisa amable, al ver que el chico movía sus manos y mordía su labio inferior nerviosamente.

Melissa tomó la silla de ruedas y comenzó a empujarla mientras que Hayley la seguía.

—¿Como te fue en la escuela, cariño?— cuestionó la mayor hacia su hija adoptiva.

—Bien— murmuró insegura la adolescente tomando la delantera para apretar el botón del elevador. —Pero que no te sorprenda si te citan— Liam soltó una sonrisa al escuchar a Melissa al instante quejándose. —No hice nada— se cruzó de brazos y rodó los ojos.

—¿Que fue ahora?— cuestionó la doctora intentando no colmar su paciencia.

Hayley apartó la mirada. —'Puedes respetar mi cambio de decisión y vete a la mierda, por favor'— con su mano movió su pelo (en estilo diva).

—¡Hayley!— chilló Melissa al escuchar eso.

La chica rodó los ojos y se quedó con una expresión aburrida mirando al techo.

Liam comenzó a examinarla con una pequeña sonrisa en su rostro. No va a mentir, la chica llamaba la atención, por mas común que se vistiera, era un buen centro de atención.

—¿Y tu, Liam? ¿Como te fue en la escuela?— preguntó Melissa avanzando hacia el elevador, metiendose luego de Hayley.

—Muy divertida— respondió en un murmuró, Hayley lo miro por un segundo y volvió su vista al frente.

El celular de Hayley sonó y está respondió.

—¿Que?— preguntó de mala gana sin mirar quien había llamado.

—Hola. Quería decirte que los libros, que dejaste en el campo, los tiene Kira— dijo su madre por la otra línea.

—Esa mujer es un grano en el culo— murmuró rodando los ojos mientras hacía una mueca. La puerta del elevador se abrió. —Tengo que irme— corto la llamada mientras salía del elevador junto a Melissa y el chico en silla de ruedas.

La doctora los llevó hacia una habitación y acomodó a Liam en la camilla mientras hablaba. —Hayley te hará compañía hasta que el doctor vuelva— el muchacho miro a la chica, quien miraba a Melissa con el ceño fruncido.

—Melissa, no puedo, tengo que...— la recién nombrada la obligó a callarse.

—Si. Si puedes— dijo abandonando la habitación mientras que Hayley la seguía con la mirada.

Cuando cerró la puerta dejó un gruñido salir. Volteó a ver al muchacho.

Se quedaron mirándose unos segundos hasta que la chica rodó los ojos y se alejó de la puerta.

—Uhm. Soy Liam, Liam Dunbar— Hayley sonrió de lado al escuchar como el corazón de el chico se aceleraba.

—No he preguntado— se encogió de hombros, Liam bajo la mirada apenado.