RESCATES Y RECOMPENSAS.

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El como Stiles terminó corriendo por su vida en medio del bosque aún le era un misterio, el porqué llevaba a un hombre de la mano invitándole a correr más deprisa era un enigma aún mayor. 

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Stiles había empezado su día como cualquier otro, después de que el día de ayer se desgasta por completo haciendo limpieza profunda a su hogar antes de ir a trabajar no le extraño, Scott ni siquiera lo había contactado otra vez y él no lo culpaba, todo el día estuvo limpiando, sacudiendo polvo y sacando basura y después de casi nueve horas sin parar solo había terminado de asear la mitad del lugar sino que menos, Stiles sabía que la vieja estación de bomberos era grande, pero solo cuando empezó a limpiar se dio cuenta de que tan grande. 

Solo paro una hora antes de su entrada al bar, se ducho de prisa y salio rumbo a su trabajo, algo bueno de la hiperactividad era la energía extra que su cuerpo producía, claro que aún así se cansaba, pero logro acabar su turno bien, sin errores, bromeo con los clientes, disfruto del show de los chicos y al terminar se fue a su casa con la intensión de dormir todo lo que le fuera posible, lo cual fueron 5 horas, todo un nuevo reto, aún así al despertar decidió limpiar un poco más antes de irse al restaurante. 

Esa fue su rutina de todo el fin de semana, el domingo al igual que el viernes se paso toda la mañana y la tarde limpiando, para cuando llegó a su turno en el bar orgullosamente podría presumir de solo faltarle menos de un tercio para terminar de limpiar la estación, un tiempo récord si consideramos que todo lo había limpiado él sin ninguna ayuda, definitivamente el lunes terminaría la limpieza completa. 

Micaya le había preguntado en una ocasión si estaba bien, ya que según el hombre podía notarlo un poco cansado, Stiles le aseguro que estaba bien y su jefe pareció conforme con ello. 

A las 4:00 a.m. Stiles estaba en la carretera rumbo a su casa, hacía 20 minutos que había salido del pueblo en donde trabajaba, Micaya había insistido en que se quedara a descansar en algún hotel del pueblo, pero el castaño se negó, él necesitaba empezar a limpiar a primera hora si quería terminar por fin.

Su amado Jeep comenzó a hacer algunos ruidos extraños por lo que tuvo que detenerse al lado del camino, todo estaba solitario, la luna aún alumbraba la el cielo, Stiles no era ningún experto en motores, pero a lo que su Jeep se refería era un maestro. Cuando logró que su bebé prendiera sonrió, pero antes de poder arrancar un grito pidiendo ayuda llamó su atención, el grito venia del bosque, pero parecía lo suficientemente cerca para que el humano lo hubiera escuchado. 

Cuando un aullido se escuchó seguido de otro grito Stiles tomó su decisión, agarrando una pequeña bolsa de su guantera y su siempre fiel bate corrió en dirección al grito.  De alguna forma, que no se detuvo a pensar, Stiles se encontraba en el bosque intentando localizar a la persona que gritaba por ayuda, un ruido a su izquierda le indico que camino correr. 

Al llegar al lugar Stiles maldijo a su instinto de héroe, un hombre rubio estaba siendo rodeado por tres hombres lobo, tres jodidos hombres lobo, Stiles tomó un respiro antes de correr en dirección de las bestias, no se detuvo a pensarlo o de lo contrario sabía que se acobardaría, de forma rápida y con toda la fuerza que pudo reunir golpeó al lobo más cercano, los tres lobos se giraron a verlo olvidándose de su otra presa, Stiles les sonrió y cuando los tres le gruñeron el castaño aprovechó para aventarles una de las bolsas de tela llena de acónito en la cara, cuando la pequeña bolsa chocó con el rostro de uno de ellos se abrió liberando su carga, las tres bestias retrocedieron, pero estaban obviamente afectados, uno más que los otros, el que había recibido el golpe en la cara había inhalado más aconito por lo que Stiles no se sorprendió que comenzara a ahogarse y caer casi inconsciente, antes de que los otros dos lobos que no inhalaron tanto veneno se recuperarán Stiles tomó la mano del hombre y comenzó a correr, el tipo parecía demasiado sorprendido para seguirle el rito.  

MAGIC STILESDonde viven las historias. Descúbrelo ahora